CAPITULO 2

Mil cosas pasan por su cabeza: ¿Por qué está aquí'¿La habrá visto tirada en el suelo gritando que pare de oír esas voces?
Abie se percata de algo importante: Su padre está con alguien, y a ese alguien le conoce, ¿pero por qué está con él?¿Por qué se están riendo mientras hablan de algo muy importante?
Son preguntas que, de momento, no tiene respuesta.
Las voces no cesan, así que se levanta del suelo y empieza a caminar hacia el único lugar que la puede aliviar de este dolor. Un sitio al que ya la habían invitado, pero que rechazó la oferta para no defraudar ni desilusionar a su madre. Vuelve a pensar en ella, lo que hace que llore más aún. Suspira. Se concentra en lo que están diciendo las misteriosas voces: 'Sigue. Haces lo correcto.-Abie sabe que no es verdad. Defraudará a mucha gente, pero no tiene otra opción.- Tu madre era una asesina. Estaba loca. Nuca te ha querido. Engañaba a tu padre.- La última frase es nueva, lo que sobresalta más a Abie. ¿Cómo sabe la voz que su madre ya no estaba con su padre? Aunque también se da cuenta que es su subconsciente el que la está engañando porque, nadie puede hacer eso sin meterle algo en la cabeza, cosa que por supuesto, no ha hecho.- Pero él tampoco te quiso. Los dos quisieron deshacerse de ti, pero la ley no se lo permitió. Ahora acabarás con tu vida, aprovecha la oportunidad que la vida te está dando.'
Ya ha llegado. Les ve. Pero no le apetece hablar con nadie. Un antiguo compañero suyo también la ve, hace un gesto, y Abie asiente.
Se sienta apoyada en una pared junto a otros muchos desconocidos. Ella al final les saluda, pero no obtiene respuesta. Supone que ya están en otro mundo.
Se lo toma. No le gusta, pero no hay más remedio. Se lo vuelve a tomar, hasta acabarlo. Ya siente que se ha sumergido en el terrible mundo de los desesperados.
Pero hay un problema, no ve a nadie: todo está brillante, blanco, y solitario; no hay carreteras, ni casas, ni gente, nada; parece que está en una gigantesca caja vacía y blanca. Se siente más sola que nunca. Ve una diminuta figura sombreada que cada vez se acerca más. Se le ve la cara.
-¡Niall!-grita. Él gira la cabeza de un lado a otro, negando con ella; cierra los ojos, soltando una pequeña lágrima, y desaparece.
Otra figura diferente vuelve a aparecer. Llora. Suspira, y grita lo más fuerte que puede:
-¡Mamá, no te vayas tú también, no me abandones una vez más!¡¿Es que quieres que me muera de dolor?!-grita una última vez, mientras ve que vuelve a desaparecer de su vida-: ¡No!
Y aunque todo sea fruto de su imaginación, ella no lo sabe, y sufre, puede que ahora más que nunca.
Necesita a alguien a su lado, que la apoye mucho.
Una persona que no llega a reconocer la sacude. Grita su nombre, pero Abie no reacciona. 
Se toma más. Oye que la dicen algo, pero no logra entenderlo.
Y es entonces, cuando dentro de la caja blanca, vuelven a sonar las voces, y se oyen más fuerte. Esta vez la insultan.
Abie da vueltas sobre si misma buscando el lugar de donde provienen esos sonidos desagradables, pero no ve más que blanco. Parece que hayan absorbido a todo y a todos con una aspiradora, a todos menos a ella.
El agua fría recorre todo su cuerpo, calando la ropa que lleva puesta. El pelo moreno se vuelve más oscuro ahí debajo. Intenta abrir los ojos, pero el las gotas no la dejan ver con claridad: ahí está ella, su mejor amiga; la rubia con ojos verdes que la ha apoyado en todo y siempre. 
Nota que no está nada contenta, así que prefiere seguir acurrucada en una de las esquinas de la ducha, llorando e intentando volver a la caja blanca, porque aunque sufra más dentro, la alivia de algunos dolores. Pero sin resultado alguno.
Está claro que la situación no es fácil, pero no hay más opción que aceptar que no puede seguir sufriendo por esa voz de hombre y de mujer que alternan para atormentarla. Las voces le son conocidas, pero no llega a reconocer de donde provienen ni de quién son.
Para de pensar en eso, y siente que ya no cae agua. Aly la levanta. La seca; la cambia de ropa, envolviéndola en su pijama y albornoz, y la mete en la cama arropada con la manta gruesa que no dejará entrar el frío del invierno, dentro del bulto que Abie está haciendo con su cuerpo.
Llega a dormirse, pero después de mucho esfuerzo. 
La luz que entra a través de las pequeñas rendijas que hay cuando la persiana está bajada, la despierta, y con esto se acuerda de cuando durmió en casa de su amiga Aly, que se despertó de la misma manera.
Piensa en donde estará Niall. La última vez que le vio le explicó lo de las voces, y al cabo de unos minutos se fue corriendo y salió a la calle, luego le vio cuando se drogó, y esa vez desapareció llorando. 
Cierra los ojos de golpe al ver que justo él entra por la puerta de su habitación azul y blanca, que es por cierto, bastante grande.
Niall se sienta junto a ella y le susurra al oído: 'Te he visto, estás despierta, cariño.'
-Bueno, pues buenos días corazón.-Abie se levanta de golpe y le da un grandioso beso.-¿Qué tal?
-Yo preocupado por ti. ¿Qué hiciste anoche?¿Y las voces?
-Pues las voces igual... Y anoche, salí con Aly.
-¿Estás segura?-agacha la cabeza- Estaba en casa cuando te trajo drogada. No hace falta que me mientas.
-Niall, por favor, no me hagas más preguntas si sabes la respuesta. Mi cabeza va a explotar. Estas voces no paran de decirme cosas horribles que no soporto-dice señalando los oídos-, no necesito a alguien que me diga que debo y que no debo hacer, ¿sabes?
-Pero...
-Que no Niall. Déjame en paz.-dice Abie interrumpiéndole, tumbándose y tapándose la cabeza y el resto del cuerpo con la manta, mientras le dice que se vaya.
El chico no tiene más remedio que levantarse y salir de la habitación.
Abie rompe a llorar, recordando los momentos en los que le dijo a su novio que le odiaba, ¿y qué hace ahora? Rechazar su ayuda cuando ella más lo necesita.
'Soy una persona espantosa. Niall dejará de quererme, si no lo ha hecho ya, y yo podré dejar de hacerle sufrir y adentrarme en mi propio mundo: el del único dolor interno.'
Se levanta de la cama, mira el reloj de pared y ve que son las 11 de la mañana. Se vuelve a dar una ducha y se viste de forma informal.
Sale de casa, y no sabe donde ir primero: si al cementerio a darle unas flores a su madre y a pedirle perdón, o a casa de Aly a darle las gracias.
Decide ir a darle las gracias a su amiga y luego a darle las flores a su mami, ya que tardará más en lo último.
Coge el coche y llega en menos de media hora.
-¿Aly?-sonríe y la abraza- Tía, que muchas gracias por lo de ayer, no sé que hubiera sido de mi si no me hubieras venido a buscar.
Nota un dolor intenso en la mejilla: un tortazo.
-¿Cómo me has podido hacer eso? Y no solo a mí, que es lo de menos, si no a ti. No te creía posible Abie.
-Pero...¡Aly!¡Tú no sabes lo que se sufre con estas voces! ¿Y sabes qué? Ayer le vi... a mi padre, y estaba con...
-No me interesa Abie. No tienes razón, no debías hacer eso por mucho dolor que sintieras. Por favor, júrame que no lo volverás a hacer.
Abie solo bufa.
-¡Qué me lo jures!-Aly coge la mano de su amiga y la pone en alto con la palma abierta- Repite lo que voy a decir: Yo Abie...
-Yo Abie.
-Juro que nunca más le voy a dar esos sustos a nadie...-Abie lo respite.-Y que nunca más me drogaré como lo hice ayer.
-Y que nunca más me drogaré como lo hice ayer.
-Y lo juro en nombre de mi madre muerta.
Abie abre los ojos como platos. 
-¡No puedo jurarlo por mi madre!
-¿Es por qué tienes intención de volverlo ha hacerlo no es así?
-¡Qué no! Pero no puedo...empieza a llorar y sale corriendo de la casa y se dirige al mismo lugar de anoche.
La gente sigue allí, moviendo las cabezas como locos, y desde luego sin para de hacerlo.
Ve una bolsa llena en una esquina, pero un chico se da cuenta y corre hacia ella (la bolsa) y la coge antes que Abie. Ella ve como el chico bajito y delgado se la acaba en 10 minutos.
Vuelve a reconocer a su antiguo compañero y le pide más.
Se sienta apoyada en la misma pared de ayer, y en nada, ya está otra vez en la caja blanca.
Pero en vez de ver a gente acercándose y alejándose, revive el momento en el que fue al hospital y le dieron la noticia, y cuando le dijo a Niall que él era el asesino:
Ella iba caminando por la calle, intentando no pisar las líneas de los azulejos, cantando una canción que se inventaba al instante, mientras observaba a la gente que se paraba a escucharla o a mirar lo patética que parecía llorando, cantando o diciendo palabras sin sentido, y saltando de lugar en lugar.
Cuando va al camino de arena, en el que ve a su móvil roto por la caída que tuvo unas horas antes, donde conoce al Roberto británico, que le dice la bonita voz que tiene, y que la lleva a una tienda de ropa donde se compra el doble de la ropa que tenía en su casa. Y cuando la manda con tres maletas al aeropuerto con destino a Estados Unidos, donde la recoge el Roberto americano. Cuando la prepara para audicionar en 'America Got's Talent' donde gana, y cuando saca su primer single. Cuando conoce a Margy. Cuando la toca cantar el dúo con Niall. Y también recuerda que se cambió el nombre a uno la mar de parecido al suyo verdadero. El momento en el que se reconcilian y vuelven a Reino Unido.'
Se despierta de golpe, y ya es de noche. El día de ha pasado demasiado rápido para su gusto. 
Y lo peor es que tiene los oídos agotados de oír  los gritos y súplicas para que se despierte de la persona que tiene delante, Niall:
-Vuelve, conmigo.

CAPITULO 1

Otra vez esas voces asquerosas: tan graves y conocidas que le dicen cosas malas sobre su madre muerta. Ella vuelve a taparse los oídos, gritando que pare, que paren ya; se acurruca en una de las esquinas de la habitación, e intenta olvidar e ignorar lo que le están transmitiendo. 
Niall no está con ella en ese momento, y la frustra más aún.
-Cariño, ven por favor.
Niall le dice que enseguida está allí. Abandona la firma de discos que está organizada en el centro de Londres. Coge su coche y se dirige hacia  la casa en la que se aloja esos días. Llama a la puerta, al ver que Abie no responde, abre con su llave y corre hacia su habitación.
Se para en la puerta y empieza a andar lentamente hacia ella, se pone de cuclillas frente a su novia y le pregunta que le pasa.
Abie entre sollozos intenta decir unas palabras que grita: '¡Haz que pare por favor, diles que paren ya!'
-¿Qué paren de qué?¡¿Quiénes?!
-Ellos, ellas. Se ríen de mi y de mi madre. Me dicen que era mala y que engañaba a mi padre y a mi. Dicen que tú te burlas de mi y que no me quieres...
-¡Pero Abie, tú sabes que no es verdad!
-¡Intento pensar eso! Pero diles que paren ya...-se levanta y va hacia la cama. Se mete entre  la sábana y la manta, se vuelve a acurrucar y a gritar que paren ya, que no quiere escucharles y que le hacen daño.-no quiero volver a escucharle...
-¿Quién es, Abie?¿A quién escuchas?
-¡Ah!
Abie no puede más y sale corriendo por la puerta y sale también del apartamento, llorando.
Niall, frustrado, no sabe que hacer ni que decir en estos momentos. Se sienta en la cama y hunde su cabeza entre las manos apoyadas en sus rodillas.
Grita de desesperación y dolor, dolor por ver a su querida Abie en ese estado, y él sin poder hacer nada ni ayudarla. También piensa en todas las fans a las que ha defraudado hoy, y a las muchas que defraudará en el futuro.
'¿A quién puede escuchar?¿Quién le está haciendo esto?¿O se lo está haciendo ella?¿Es su cabeza?¡¿Está enloqueciendo!? Desearía estar en un mundo en el que las cosas malas no le ocurren solo a las mejores personas. Primero la muerte de su madre, después nuestra separación, y ahora esto; la vida de la dulce Abi está empeorando por momentos. Solo falta que aparezca su padre desaparecido y la trastorne del todo.'

Jennifer va andando por la calle, cuando ve un gigantesco grupo de chicas que están al rededor de un lugar que no llega a reconocer. Se acerca curiosa a ver que pasa. Se adentra en el grupo; la empujan y apenas puede respirar. Llega al sitio que quería averiguar que es: una mesa en la que hay 4 chicos firmando discos. 
-¿Y tú disco?-le pregunta un chico de forma cariñosa, con una sonrisa radiante en la cara, y unos ojos azules brillantes.- No me digas que se te ha olvidado, ¿eh?
-¿Qué?¿Qué disco?-pregunta Jennifer incrédula. Sin saber que hacer: se ha colado en una firma de discos de un grupo bastante famoso en esta época.- No se me ha olvidado, no sabía que era una firma de discos.
-¿Y entonces por qué has venido?
-Porque era curiosa por saber que es todo este alboroto.
El chico se ríe, y le dice que no puede perder mucho tiempo con una sola 'fan', así que le regala un CD y una dedicatoria en ella que ponía: 'No hace falta que me mientas para parecer interesante :) xx 097284628 So call me maybe :P'.
La chica sale corriendo del lugar riéndose. Lo que la acaba de pasar no le pasa a cualquiera, y entonces ella deja de ser una persona cualquiera.
Sigue con su paseo, leyendo la dedicatoria. Al principio pone cara de pregunta y se pregunta porque él piensa que ha mentido, si en verdad no lo ha hecho, ¿y el número de teléfono?¿Por qué le ha dado su número de teléfono?¿De verdad le ha parecido interesante?
Llega a casa, y pone el CD en el ordenador para escucharlo. También busca el nombre del grupo, para averiguar el nombre del chico: 'One Direction, y Louis Tomlinson'. Es la información que ha encontrado, y la que le interesa. 
Después de escuchar todas las canciones del disco, 3 veces, decide poner el número en su teléfono. Cuando lo guarda con el nombre de 'Louis el famoso', se plantea llamarle o no. Decide no llamarle por el momento, haber si le va a parecer una desesperada. Pero él es un famoso, y ella no es más que una supuesta fan de ellos, tendría que ser normal llamarle si le ha dado su número, ¿o no es un número y es otra cosa?
Jennifer baja al kiosko que tiene a la vuelta de la esquina de su apartamento que comparte con su hermano Esteban, que tiene 27 años, es muy alto y rubio, con ojos verdes claro.
Vuelve a casa con las únicas revistas que tenían mucha información sobre One Direction, y muchos posters con ellos, y sobre todo con Louis.
Los cuelga en la pared de su gran habitación y se tumba en la cama boca arriba mirando el poster del chico famoso en el techo y la pantalla de su móvil en el que está marcado el número de Louis.
'¿Le llamo, no le llamo, le llamo, no llamo?'  Deja su móvil en la cama mientras coge una flor que ha recogido hoy de vuelta del instituto, y arranca los pétalos decidiendo así, si llamarle o no. 'No le llamo, le llamo'. Último pétalo y ha salido que le llame.
-Cosas del destino.-susurra.
Le da al botón verde que significa 'Llamar', y oye unos cuantos bips. Su voz metálica y graciosa la sobresalta  .
-¿Hay alguien ahí?
-Eh...si. Hola.-Jennifer está nerviosa, y se le nota en la voz.
-Hola. ¿Quién eres?
-La chica no mentirosa, que creo que te pareció interesante en la firma de discos, ¿o e equivoco?
-Ah, pues si te equivocas.-ella dice un '¿eh?' en forma de duda.-Eres una mentirosa. Porque si no fueras ni fan, no hubieras ido.
-¡Ya te he dicho porqué he ido allí!
-Pues no me lo creo.
Jennifer dice 'bah', y se queda parada mientras oye como Louis se ríe solo en la otra parte de la línea telefónica.
-Eh, estaba esperando que llamases.
La chica se sorprende y no sabe que responder. Decide ser un poco borde.
-Pues ya ves que lo he hecho.
-Eh eh, ¿qué pasa?
Ella grita un poco, y se levanta de la cama dando un salto. Louis pregunta que pasa y no recibe respuesta, aunque sabe que la conversación no se ha cortado.
Lo que ha pasado es que el poster de Louis que estaba colgado del techo encima de la cama de la chica, se ha caído, y ella ha ido a socorrerlo.
Siguen hablando un rato, bromeando entre ellos y echándose sus primeras risas. Por fin se dicen los nombres, aunque ella ya sabía el de él. 
-¿Quedamos algún día de estos?
-¡Vale!-responde Jennifer entusiasmada, aunque no sabe por qué.
-¿Mañana a las 5 en el mismo sitio de hoy?
-Ahí estaré. Tengo que colgar, adiós Louis famoso.
-Adiós Jen no famosa, buenas noches. Besitos.
Ella cuelga, pero la palabra 'besitos' se le ha quedado marcada. Ha recibido los besitos, y se ha tomado una dosis de más.

Harry, que está con su amigo Louis en estos momentos, le está preguntando quién era y porque le mandaba besitos. Parece que se ha puesto celoso. Aunque Louis le responde ingeniosamente: '¿Yo no puedo darte celos con una chica guapa o qué?¿No haces tú eso con Cynthia?'
-No Louis, yo a mi nena la quiero. Tú a esa 'Jen'-esto último lo dice imitando la voz de su amigo pronunciándolo antes.- no la conoces casi de nada.
-Pues sí.
-¿Qué? Espera... ¿no será esa con la que hablabas hoy en la firma? Pues si que es guapa. 
-Te lo he dicho, y si, es ella. Déjame.-se ruboriza.
Se sienta bruscamente en el sofá y se tumba encima de su amigo. Enciende la TV y miran su propio documental en un canal de televisión.

Zayn se mete en su cuenta de 'Directioner' en Twitter y lee los tweets de las fanáticas hablando de su relación con Aly y la de Niall con Abie. Algunas críticas malas, pero la mayoría buenas; las fans están empezando a aceptar sus relaciones por fin, después de diversas amenazas bastante fuertes. 
Habla con algunas de ellas, y se ríe un rato. Se hace un par de fotos y las sube a su cuenta verificada. Le divierte ver como las latinas y españolas siempre dicen que está 'muy matante' o que está 'violable'. No entiende bien lo que significa, pero cree que es algo bueno, y no se equivoca.

Anda por la calle. Por un par de horas, esas voces no la han molestado, y está contenta. El sol se está poniendo, y está realmente precioso.
Saca su móvil, se pone los cascos en las orejas, y sigue andando con la música en sus oídos. Disfrutando lo máximo posible de esos momentos tranquilos de los que los últimos días no ha podido disfrutar.
Entonces, cuando está en medio de su canción favorita, que aunque sea muy antigua, la sigue emocionando igual, 'Frozen, de Madonna', vuelve a escuchar las voces. Esta vez son mucho más fuertes y con palabras mas dañantes.
Abie cae al suelo gritando de dolor y diciendo que se vallan cuanto antes, que no los quiere volver a oír. Se arranca los cascos de las orejas, y se las tapa intentando que el volumen disminuya, por muy poco que sea.
Y entonces, mientras está acurrucada en una pared de una calle de Londres, levanta la cabeza que tiene ahogada entre sus rodillas y el pecho, le ve, a ese hombre esbelto, cabello oscuro y algunas canas, y esos labios tan finos que apenas se notan. Un hombre al que Abie reconocería por muy viejo que se hiciese y por muchos cambios que tuvieran su cuerpo.
-¿¡Papá!?

FILOS DE COLORES: PRIMERA PARTE

CAPITULO 1

Ayleen corre tras su amiga Abie, que minutos antes, le había quitado el móvil. Las dos ríen, pero la que destaca es Abie.
-¡Devuélveme mi móvil!¡No tienes derecho a leer nada!-grita Ayleen mientras sigue persiguiendo a su amiga Abie.
-¿Qué no tengo derecho?Cómo tu mejor amiga lo tengo. A ver "Quiero verte pronto!-lee Abie imitando la voz de Johan, el chico por el que Ayleen lleva suspirando bastante tiempo.
-¡Eh! Que no leas...
-Si igualmente me iba a enterar por él. Tú tranquila Aly.
-¡Contigo nunca se puede estar tranquilo!
Aly se sienta en un banco, mientras observa como su amiga sigue leyendo los mensajes. Abie se da cuenta de que su amiga ya no la persigue y decide sentarse junto a ella y devolverle su móvil.
-¿Qué, ya estás contenta?
-Mucho. Pero si os gustáis, ¿por qué no salís juntos?
-Ese es el problema, que a mi me gusta, me encanta, pero yo a él solo le gusto para lío... y yo no quiero...
-Que capullo...
Hubo un pequeño silencio, en el que las dos amiga piensan en su amistad. Abie y Aly ven un parque infantil cerca. Se miran, y empiezan a correr hacia los columpios, su atracción favorita. Se sientan y empiezan a columpiarse, continuando con el silencio empezado en aquel extraño banco.
-¿Una carrera?
-¿Para ver quien se columpia más fuerte?
-Como siempre.
Las chicas paran "uno, dos y tres" piensan cada una en su cabeza, mirándose entre sí y afirmando con la cabeza en el número tres. Empiezan a columpiarse otra vez, ahora con más fuerza y velocidad. Empezó ganando Aly.
-No me vas a ganar, ¡te lo aseguro!
-¿Qué no? Ya veremos.
Empiezan a columpiarse cada vez con más velocidad, Aly ya la lleva mucha ventaja a Abie.Las dos se percatan de que toda la atracción de los columpios, que está junto con el tobogán y el puente, empieza a tambalearse. Cada vez más fuerte.
-¿Qué está pasando?
-No lo sé, frena. Tenemos que bajar, esto se puede romper.
Aly intenta frenar, pero va con mucha velocidad, no puede. El columpio junto con el tobogán y el puente de madera empiezan a derrumbarse uno a uno, empezando con el columpio.
Abie reacciona antes que Aly y se tira hacia adelante, pero la barra de hierro que sujeta los columpios se desploma en el suelo encima de la pierna de Abie, estirada en la arena.
Aly cae al suelo, vestida de escombros de madera, barras de hierro y tornillos. La misma barra de hierro que golpea la pierna de Abie, golpea la frágil y rubia cabeza de Aly. Dejándola desmayada y tumbada en la arena, sin movimiento alguno.
-¿Aly?¿Estás bien?-pregunta Abie con voz baja, intentando levantarse del suelo, pero el dolor de pierna la impide levantarse.
Abie reacciona y ve un mechón de pelo de su amiga sobresaliendo por debajo de los escombros. Ella saca el móvil del bolsillo de sus baqueros pitillos. Llama al número de emergencias y pide una ambulancia para ella y su amiga.
La ambulancia llega en unos pocos minutos, cuatro enfermeros apartan las atracciones rotas que estaban encima de Aly y la desplazan a ella en una camilla, dentro de la ambulancia. Otros dos enfermeros ayudan a Abie a levantarse y la sientan en la ambulancia, junto a su amiga.
Llegan al hospital  y las enfermeras avisan a los padres de las chicas. 
Ya la habían puesto la escayola en la pierna derecha de Abie, tiene rota la rodilla.
-¿Y Aly?¿Cómo está?-pregunta Abie a un enfermero, muy preocupada.
-¿Quién es Aly?
-Ayleen Reeve. La chica que vino conmigo en la ambulancia.
-No sé como está, voy a pedir información, ahora vuelvo.
El enfermero sale por la puerta de la habitación. Él sabe perfectamente como está Aly, pero no quería asustar a Abie con la noticia, la afectaría mucho.

La madre de Aly llega muy asustada, y se dirige a recepción.
-Perdone, ¿cómo está mi hija, dónde está?
-¿Cómo se llama su hija, señora?
-Ayleen Reeve.
-Está en cuidados intensivos. Piso 3.
La madre ni siquiera se despide ni da las gracias, ya estaba corriendo hacia el ascensor. Aprieta muchas veces seguidas el botón para llamar al ascensor, por fin se abren las grandes puertas grises automáticas.
Aprieta el botón del piso 3, llega. Ve a un enfermero leyendo unas hojas.
-Dsiculpe, ¿la habitación de Ayleen Reeve?
-Habitación 419. Pero no puede entrar, está en cuidados intensivos y tiene prohibida cualquier visita.
-¡Pero soy su madre!-grito desesperadamente la madre de Aly.
-¡Cualquier visita!
La viuda de Reeve refunfuña por lo bajo, preocupada, asustada, sin poder hacer nada.
-Bueno, ¿y Abie Donovan?
-Piso 2, urgencias. Allí puede preguntar por su habitación.
La señora Reeve, vuelve a irse sin despedirse ni agradecer. Baja corriendo por las escaleras hasta llegar al piso de abajo, donde leyó un gran cartel azul clarito en el que ponía en letras muy grandes y negras "URGENCIAS". Dio un par de vueltas a sí misma, y vió de reojo a Abie con escayola y con dos muletas, andado con ayuda de una enfermera algo anciana.
-¡Abie!Hija, ¿qué tal estás? ¿Qué ha pasado? Cuéntamelo.
-Hola señora. Yo tengo la rodilla rota, no me han dicho detalles. ¿Y Aly, cómo está?
-No me han dejado verla, está en cuidados intensivos. Pero dime, ¿cómo ha sucedido?
Abie empezó a contarle a la madre de su mejor amiga lo que sucedió. Que vieron un parque, que estaban haciendo un concurso de quien iba más rápido en el columpio. Que las tres atracciones pegadas empezaron a tambalearse y que se derrumbaron y Aly no tuvo tiempo de reaccionar por la gran velocidad que llevaba.
La madre de Aly empezó a llorar, pensando en lo peor, en cambio Abie estaba muy optimista, sabiendo que fue un accidente muy absurdo, y que sucedió de una manera muy tonta.
-Venga, te llevo a casa, tienes que descansar.-le propuso la señora Reeve a Abie, ya que esos días se estaba alojando en casa de su mejor amiga. Porque sus padres estaban de viaje de aniversario.
-Si porfavor, me duele mucho.

CAPITULO 2

A la mañana siguiente. Abie se despierta decidida a ir al hospital, y estar con su amiga todos los días que hagan falta, sin moverse de allí. Se levanta de la cama de su amiga, se cambia de ropa, como puede, y anda sin muletas hacia las escaleras. 
-¡Ah!
La señora Reeve reacciona al oír un golpe y el grito con la voz de Abie.
-¿Estás bien?-pregunta la madre de Aly corriendo y agachándose al lado de Abie, para ayudarla.
-Creo que si, gracias Amy.
-De nada mi niña, ten cuidado, ¿eh?
-Lo tendré.
-¿Y que haces sin las muletas?Así no puedes andar.
-No sé donde están. Creo que las dejé abajo, ¿podemos ir a ver a Aly?
-Si, ahora vamos.-dice Amy, la madre de Aly. Corriendo escaleras abajo para recoger las muletas y devolvérselas a Abie.
Las dos desayunan un café con leche, el preferido de las dos, mientras conversan sobre como llevar lo de Aly. Aunque no saben ni lo que tiene. Van al coche con cuidado. Durante el trayecto hubo un gran silencio, ninguna de las dos tenían otra cosa en la cabeza que no fuera lo sucedido el día anterior.
-Ayleen Reeve.
-Piso 4, habitación 419.
Las dos mujeres se dirigen al ascensor, despacio, cuidando lo mejor posible la rodilla rota de Abie.
Llegan al mismo sitio de ayer, se sientan en las sillas azules, duras, sin proporcionar ningún tipo de comodidad.
-¿Puede visitar ya a Ayleen Reeve?
-Si, pero máximo dos personas. Pasen.-dice una enfermera bajita, pelirroja, con una voz muy agradable.- y no hagan mucho ruido, la paciente las oye aunque esté así.
-¿Así cómo?-interrumpe Abie preocupada.
-¿No se lo han comunicado? La paciente sufre un coma, pero no es muy grave.Sufrió un golpe muy fuerte. Pero es cuestión de horas o menos para que se despierte.
-¡¿Coma?!-gritan Amy y Abie a la vez. Muy preocupadas, la mejor amiga de Aly empieza a llorar, desesperadamente, sin posible consuelo.
Amy y Abie entran a la habitación con mucho sigilo.
-Hola amiga, ¿cómo estás? ¡Ai...! Es la costumbre, lo siento.-dice Abie mientras se pone de rodillas al lado de la camilla de Aly, cogiéndola de la mano y dándola un beso.
-Hija, nos a dicho la doctora o enfermera que nos oyes. Quería decirte que estamos aquí para todo.-Amy mira a Abie, mientras Abie mueve la cabeza en forma de afirmación, con una sonrisa dibujada en su blanco rostro. Este símbolo tranquiliza a la madre.
-Es verdad. "Tú y yo, forever and always", ¿recuerdas?-Abie le dice la frase que marca la amistad entre ella y Aly, mientras le resbala una lágrima por su mejilla suave, roja por los nervios. Con una sonrisa que nunca se le quita cuando dice "su" frase.
-"Tú y yo, forever and always".-una voz más grave que el de Amy y Abie, repite la frase dicha minutos antes por la mejor amiga de la tumbada en aquella cama.
-¡Al...Al...Aly!¡Has hablado!
-¡Te has despertado!
Amy se levanta de la silla en la que estaba sentada, y sale de la habitación llamando algún doctor o enfermero,para que atiendan a su hija.
-¿Qué me ha pasado?
-Nada, tú tranquila, descansa.
-He descansado hasta ahora.
La misma doctora que le respondió las preguntas a Amy, entra por la puerta, dispuesta a atender a Aly.
-Veamos.-la doctora Amelie empieza a revisar a Aly, mira sus ojos, luego los oidos y por ultimo la boca.-creo que está todo en orden, tendrá que venir mañana para decir las últimas palabras. 
-¿Va a estar bien?-pregunta Amy, intrigada.
-Bueno, puede que tenga algún que otro problema de vista, y que la duela mucho la cabeza. Pero sería normal, por el golpe que sufrió.
Amy, Aly y Abi se quedan en blanco, preocupadas. Aly tendría problemas de vista.
-¡Este accidente no acabará conmigo!
-No hija tranquila.
-Bueno, yo iré preparando el alta.
La doctora sale por la puerta, dejando a las tres chicas observándola.
-La odio.
-A mi me cae bien.
-¿Por qué la odias hija?
-Por que ha sido ella quien me ha dado esta noticia...
-¿Y si no hubiera sido ella, y hubiera sido otro?
-Pues odiaría a ese otro.
Amy y Abie se miran, asombradas por la actitud de Aly. Ella había cambiado, ya no quedaba nada de esa niña buena, tranquila, educada, que con sus mechones rubios lisos y sus ojos verdes oscuro, que la hacían más infantil. 
El rostro de Aly iba cambiando segundo a segundo, empezaba a fruncir el ceño, la medio sonrisa de sus labios se convertían en labios caídos hacía abajo, dejando la sensación de odio y dolor.
Ella empieza a observar una luz proveniente de cada persona. Abie tenía un color azul verdoso. Y su madre rosa chicle. No sabe que significa. Las preguntas la acosan en su cabeza, ninguna tiene respuesta. Pero piensa en que solo es cuestión de tiempo para que se le pase, eso la tranquiliza mucho.
-Ya está el alta, pueden marcharse cuando ustedes deseen.-dice la doctora, y vuelve a salir.
-Lo dicho, la odio.
-De verdad, que no hay quien te entienda.
Las muchachas recogen sus cosas y salen por la puerta. Se suben en el coche, y Aly deja a Abie que se siente en el sitio del copiloto del coche.
Amy y Abie empiezan a tener una conversación entretenida sobre lo contentas que están de que Aly esté con ellas de vuelta. Mientras Aly, observa por la ventanilla, muy entretenida, el color que desprende cada persona. La divierte, aunque también la asusta, no sabe que es, solo sabe que de momento cada persona que ha visto, tenía un color distinto.

CAPITULO 3

Llegan a casa, Amy sube a su habitación. Mientras que las chicas se sientan en el sofá a mirar un rato la televisión. Aly en vez de prestar atención a los dibujos animados con los que Abie se ríe a cada rato, se dedica a observar el color azul verdoso de Abie, con el ceño fruncido.
-¿Qué?¿Tengo monos en la cara o algo?-pregunta Abie mientras se palpita su cara, como si estuviera asustada.
-No tonta, no es nada.-dice Aly asustada, con miedo a que la descubran.-Aunque es mi mejor amiga-piensa  ella.-Es mejor que se lo diga, no podría confrontarlo sola.
-¿De verdad? Te veo rara, desde el hospital estás así, y por el camino de vuelta aquí, no has dicho nada...
-Está bien, te lo voy a decir. Mira, desde que me desperté, bueno un poquito a después, empecé a ver colores que provenían de cada persona?
-¡¿Colores?!-pregunta Abie asombrada.
-Si, colores. Pero a cada persona que veo, tiene un color distinto.
-¿Y qué color tengo yo?
-Azul verdoso.
-Anda, mi favorito.
-¿Crees qué tiene algo que ver?
-No lo sé, puede.
-¿A ti ese color que te expresa? Es decir, ¿tiene alguna relación contigo, con tu forma de ser?
-No sé, espera que piense.-Abie colocó codo encima de su rodilla y apoyo su barbilla en su mano con forma de puño.- ¡Ya lo tengo!
-¿El qué?
-Comeremos pasta. Sé que no tiene nada que ver con lo que me has pedido que piense, pero tu madre me lo preguntó primero.
-Estaba segura de que no me dirías nada de este tema. ¡Qué pienses!
-¡Qué si pesada...!-dice Abie de mala gana.
Las dos piensan durante un rato.
-¡Ya lo sé!
-Haber,¿qué sabes?
-Pues puede que sea la personalidad de cada uno, por ejemplo, a mi el azul celeste me parece que pega mucho conmigo. Me parece que ese color representa un poco de timidez, diversión, y optimismo.
-Tiene sentido. Pero, ¿cómo saber cuál es el color de cada personalidad? Porque el tuyo son dos colores...
-Pues vamos a buscar a alguien que tenga el azul o el verde puro, pero que conozcamos, para saber cual es la personalidad de ese color que lleva.
-Vamos.
Aly y Abie están dispuestas a salir. Cogieron sus chaquetas, ya que ese día en Londres no hacía muy bueno. Las chaquetas de las chicas conjunta con su físico. La chaqueta de Aly es marrón, cuero falso, conjunto con el pelo rubio de la chica y con sus ojos verdes oscuro. Por el contrario, la chaqueta de Abie es negra, de lana gruesa, conjunta con su pelo marrón muy oscuro y sus mechas rubias, y con los ojos color miel dulce de la chica.
-Adios mamá, volvemos en un par de horas.
-¿No coméis primero?
-Cogeremos algo por ahí.
-Ten cuidado con la rodilla de Abie.
-Lo tendremos.-dicen las dos chicas a la vez, mientras se cierra la puerta de madera blindada a sus espaldas.
Van andando bastante despacio, aunque Aly de vez en cuando se adelanta. No está acostumbrada a ir con alguien que va en muletas.
-Azul puro.
-¿Dónde?
-En ese chico, de pelo marrón. El que va acompañado de el chico que tiene rizo marrones.
-¿Esos?-señala Abie, soltando una muleta y cayendo al suelo.
-¿Estás bien?-pregunta Aly aganchandose a ayudar a su amiga.
De repente, las chicas ven al chico del filo azul y a su acompañante, acercarse hacia ellas, ayudando a Abie a levantarse.
-Ahora me siento culpable...-dice el chico de los rizos.
-¿Por qué?-pregunta intrigada Aly.
-Porque se que estabais hablando de nosotros, ella nos ha señalado, y por eso se ha caído.
-En realidad hablábamos solo de tu amigo.
-Ah..- bueno... como es mi amigo, también me siento culpable.
-Yo también.-interrumpe por fin el chico del filo azul.-¿os puedo contar algo?
-Claro.
Ese chico misterioso, para Aly y Abie, empieza a bromear sobre como se rompió una pierna en una fiesta. Lo dice de tal manera, que los tres adolescentes restantes, no podían parar de reír. 
Las chicas se miraron, sonrieron, lo habían descubierto.
-El azul es...
-Divertido y fiestero.-acaba la frase Abie.
-¿Qué? Me he perdido... Bueno da igual, me llamo Harry, y este es Louis, ¿y vosotras?
-Yo soy Aly, y esta es Abie, la patosa.-Abie le da un codazo a Aly.
-Bueno, encantado.-dice Louis riéndose.
-Nos tenemos que ir, ¿verdad Aly?
-Pues si.Adiós chicos, a lo mejor volvemos a coincidir.
-Seguro que si.
Las adolescentes se levantan, dan dos besos a cada uno de los chicos. Se dan media vuelta y se van a casa, contentas de que hayan descubierto que el azul es divertid@ y fiester@ y el verde tímid@.
Llegan a casa, hambrientas. No habían cogido nada de comer. Todo había sucedido muy rápido.Van a la cocina y se preparan dos bocadillos de queso derretido.
-Son guapos.
-Si, pero no son mi tipo.
-¿Y cuál es tu tipo, si se puede saber?
-Pues no losé, solo lo sabré cuando le encuentre.
-Pues vaya romántica estás hecha, ¿eh?
-Parece mentira que todavía no me conozcas, después de tantos años...
-Que si te conozco tonta, pero nunca había visto tanto romanticismo en tus palabras.
-Y habrán más cuando le conozca.
-¿A quién?
-Al amor de mi vida.
El sonido chillón del teléfono fijo de la casa, asusta a las muchachas, haciendo que Abie se atragante un poco.
-¿Si? Alie, es para ti.
-¿Quién es? Espere que lo pongo en altavoz.
-Soy Ilenia. Me he enterado de vuestro accidente, ¿qué tal estáis?
-¡Hola Ilenia!-grita Abie entusiasmada.
-Pues estamos bien por suerte, Abie se ha roto la rodilla y yo solo tengo fuertes dolores de cabezay tampoco veré muy bien.
-Ai pobre, ya no podrás venir tanto a las fiestas, y como te pongan gafas te llamarán cuatro ojos o algo así.
-Si, pero repito, ¡este accidente no acabará con mi vida!-grita Aly enfadada, colgando el teléfono. Dejando a Amy, que estaba escuchando todo, y a Abie, boquiabiertas, por la reacción de la muchacha.

CAPITULO 4

El molesto rayo de sol, que penetra por una de las pequeñas aberturas de la persiana cerrada, ilumina la cara de Aly, hace que ésta de se despierte.

Se levanta de la cama haciendo el menor ruido posible para no despertar a "su Abie durmiente". Intenta buscar ropa en su armario, con cuidado para ser sigilosa, sin buen resultado.

-Mm...¿qué haces a esta hora despierta?

-Me cambio, o por lo menos lo intento. Y no es temprano, son las diez.

-¿Y te parece tarde?

-No, tampoco eso. Me parece la hora perfecta para ir a desayunar por ahí.

-Está bien.

Las dos se despiertan del todo. Y Aly deja de buscar ropa y acompaña a su amiga lavarse la cara un poco, para así despertarse mejor.

Las muchachas van a su cuarto, abren todos los cajones, desordenándolos mucho. Buscan algo cómodo para ir por ahí, a desayunar o incluso de visita a alguna que otra tienda.

Al final, Abie se decanta por un vestido naranja clarito, de tirantes, ya que esa mañana, en Londres hacía bastante calor, y con manoletinas color carne. Por el contrario, Aly prefiere unos pitillos baqueros azul marino, le gustan más. Con una camiseta sencilla roja, manga corta, y convers también rojas. 

Decididas a salir, se acuerdan de que no tienen dinero, se lo gastaron la última vez en una entrada de un grupo nuevo, el nombre del grupo era un misterio.

-¡Mamá! ¿Nos das dinero para ir a desayunar por ahí?

-¿Y por qué no desayunáis aquí y me sale más barato?

-Por que también queremos ir un rato de compras. Venga, no seas mala.-dice Aly mientras le da pequeños codazos y alzando las cejas.

-Vale. Tomad, 100 para cada una. 

-¡Muchas gracias mamá!

-Bueno, eso porque los padres de Abie me dieron 500 euros, ahora solo me quedan 400...

-Gracias señora.

Las chicas salen por la puerta, andando muy despacio.

-Rosa, rojo, amarillo, naranja, azul marino, ¿negro? ¡¿Blanco?!

-Que de colores, ¿no?

-Muchos, y solo sabemos dos.

-¿Cuáles?-hubo un cruce de miradas, en el que la mirada de Aly expresaba asombro, y el de Abie dice "déjalo, es una pregunta tonta":

Ven una cafetería nueva en ese lugar, porque para las chicas ya les era más conocido.

-¿Entramos?

-¿Por qué no?

Se sientas en una de las mesas que hay en la terraza. Ambas piden un café con leche, para tomarlo con un bollo de chocolate.

Empiezan a hablar sobre lo ocurrido los últimos días. Ninguna se puede creer lo que las había pasado, aquel accidente tonto, pero peligroso. Los filos de colores que veía Aly y los chicos que las ayudaron a descubrir aquel misterio de los colores.

-¿Tú habías visto alguna vez esa tienda?

-No. Pero parece que ay cosas modernas, ¿vamos?

-Claro "mi Abie durmiente".

-¿Por qué me dices eso?

-Por que estás guapísima cuando duermes

Abie se ruboriza. Mientras que pagan la cuenta, bastante caro el "Starbucks Coffe".

Van directas a la tienda que hay al otro lado de la carretera, de donde está aquella cafetería, ahora guarda problemas.

Miran los productos y las ofertas de la tienda. Demasiado caro, piensan. Pasean por una larga calle llena de tiendas, restaurantes y demás lugares de ocio. Abie se para en un escaparate, donde había una camiseta que  también llamó la atención de Aly.

-Vamos a probarnos esa camiseta, y si no es muy cara nos la cogemos las dos igual, ¿vale?

-Venga.

Entraron en la tienda, se probaron la camiseta rosa clariro, en la que había un estampado de letras, en el que ponía "ONE DIRECTION", en letras grandes y negras. Las chicas pensaron que era una frase bonita y nada más. Se la compran.

Entran en más tiendas, se prueban más cosas. Todas muy caras.

-¿Por qué lo ponen tan caro?

-No sé. Pero yo voy a guardar el dinero para algo más importante.

-¿Hay algo más importante que la ropa?

-¡Un armario más grande para meter toda mi ropa!

-Si lo planteas así...

Aly empieza a marearse, tanto colorido en el ambiente no le hace nada bien a los dolores de cabeza que tiene a cada rato. El dolor de cabeza empieza a ser insoportable, los colores de la ropa, de los carteles, más los de las personas, hacen que la vista de Aly no sea nada más que un gran arcoiris de miles de colores.

-Vamos a entrar a esta tienda.

Mientras Abie miraba entusiasmada un vestido de fiesta, Aly no aguantaba más.

-No puedo má...

Aly cae rendida en el suelo de esa tienda.

-¡Aly!¡Llamen a una ambulancia por favor!

La dueña de la tienda llama al número de emergencias lo más rápido que puede. En pocos minutos llega la ambulancia, la recogen y se la llevan, acompañada de Abie.

-Señora, Aly se ha desmayado. Creo que por los dolores de cabeza.

-¿Cómo?-responde una voz al otro lado de la línea telefónica.-Enseguida voy.

A la paciente se la llevan a una sala de emergencias, en una camilla, seguida por su amiga morena.

Los médicos no dejan que Abie ni Amy entren en la habitación de Aly.

-¡Soy su madre!¡Tengo derecho a verla!

-Señora, su hija tiene que descansar. En su estado no es bueno que tenga visitas.-responde un médico alto, tapando el paso a la señora.

La doctora me ha dicho que me duerma, para poder descansar mejor. Piensa Aly, que no puede conciliar el sueño, era la hora de comer y ella estaba hambrienta y obligada a dormir.

Después de diez minutos de que la chica piense, piense, y vuelva a repensar en lo sucedido, traen a un paciente que parece dormido. 

Verde claro, piensa Aly. Asombrada, nunca había visto ese color.

-Hola.

-Hola.-responde Aly malhumorada.

-¿Por qué estás aquí?

-Tuve un accidente hace unos días, y hoy he tenido una recaída, ¿y tú?

-Acoso.

-¿Acoso?¿De quién?¿De tu mamá?

-No. De mis fans, es agotador, me desmayé.

-¿Famoso?

-Si, cantante. Me llamo Zayn, ¿y tú?

-Ayleen, llámame Aly, si quieres. ¿Y en qué grupo tocas?

-One Direction.

-¿Es un grupo? Que curioso, hoy me he comprado una camiseta en la que ponía ese nombre, no sabía que era un grupo...-dice Aly bajando la cabeza, como avergonzada.

-Bueno, no pasa nada. Ya lo conoces.

-¿Y cuántos sois?

-Cinco. Louis, Harry, Liam, Niall y yo, Zayn.

-¡Ah! Bueno, pues encantada.

Aly se da la vuelta, dando la espalda al chico moreno, con unos ojos color miel dulce. Dando por terminada su conversación.

-¿Y qué clase de accidente has tenido?

-¿Te importa?

-Soy curioso.

-Estaba con una amiga en los columpios de un parque, y se derrumbaron junto con un tobogán y un puente de esos. Y quedé sepultada debajo de ellos.

-Pobre. Lo siento mucho.

Mientras el muchacho moreno acababa su frase, la puerta de la habitación se abría.

-¿Aly?

-¿Harry, Louis? Y vosotros debéis de ser Niall y Liam, ¿me equivoco?-Rosa y naranja, piensa Aly.

-No, no te equivocas.-responde un chico rubio.-Soy Niall. Vaya Zayn, parece que ya nos has presentado.

-Bueno, ella me preguntó.

-Oye Aly, ¿qué haces aquí?-preguntó Harry, bastante intrigado.

-Pues tuve una recaída, cuando Abie se rompió la rodilla, yo también sufrí un accidente.

-Lo siento.

-No es nada.

Los dos pacientes, más los cuatro visitantes, empiezan a hablar entre ellos, muy entretenido. Conociéndose más. De repente, una doctora le dice a Aly que ya puede irse. 

-Oye Aly, dame tu número de teléfono.

-Dame tu móvil, corre.

Harry saca un móvil de su bolsillo, se ve que fué él quien lo guardó para que a Zayn no se le perdiera.

Aly apunta corriendo su número y al guardarlo en contactos puso dos puntos y una "P" mayúscula al lado, al acabar su nombre, "Aly :P".

CAPITULO 5

La vuelta a casa es lo peor de todo, piensa Aly, mientras que su amiga y su madre vuelven a conversar sobre los sustos que les da Aly. Volverá ha decirme lo mucho que se ha preocupado, y me molestará con sus tontería, no hay humor para eso. Vuelve a imaginar la muchacha rubia.

-Uf. Menudo susto que nos has dado hija. Y ni siquiera nos han dejado entrar a verte.

-Ya. Que si.

-Encima de que me preocupo...

-Eres mi madre, ¿no es tu obligación?

-No lo fue tenerte.

-Pues no me hubieras tenido.-grita Aly subiendo corriendo a su habitación, llorando.

Amy se sienta en el sofá, suspirando. ¿Qué he hecho mal? Siempre le he dado mi amor incondicional, pensaba que éramos amigas. Piensa Amy, entristecida por la actitud de su hija, ya no tan cercana a ella.

Abie silba como diciendo "menudo problema..", asombrada por los gritos y peleas constantes de los que ha sido testigo esos últimos días.

-Yo... bueno... voy a dar una vuelta, llegaré en un par o dos de horas.

-Está bien. Adios.-responde Amy, volviendo a suspirar, esta vez cogiendo un cojín, apoyándolo sobre sus piernas, y dejando caer sus manos cansadas, encima de la roja almohada.

Abie sale por la puerta, decidida a comer algo, está hambrienta. Ve un restaurante que adora, su preferido. Y decide entrar,la sobra el dinero, por ese lado no se preocupa.

Va hacia la cola para pedir unas patatas y una hamburguesa. Cuando tiene su bandeja en la mano, se da cuenta de que no hay mesas libres, y no tienen terraza.

-¿Y dónde me siento ahora?-dice en voz alta, no sabe por qué.

-Mm... puedes sentarte conmigo. Estoy solo.-dice un chico, con la boca llena, disfrutando lo máximo posible de su hamburguesa.

-Bueno, ¿por qué no?

Abie se sienta al lado del chico desconocido.

-¿Y cómo te llamas?

-Abie, Abie Donovan, ¿y tú?

-Niall Horan, encantado.-el chico rubio de ojos azules, extiende su mano limpia, en forma de saludo.

-Igualmente. Oye me suenas mucho, ¿nos conocemos?-dice Abie, dejando la mano del muchacho extendida sin ningún sentido.

-No lo sé, pero tú también me suenas, pero no mucho.

-A lo mejor nos hemos cruzado alguna vez.

-Puede. ¿Y cuántos años tienes?

-Dieciocho, ¿y tú?

-Los voy a cumplir este año.-Abie se le queda mirando como si no terminase de entender.- Me refiero a los dieciocho años.

-Vale, ¡enano!-dice Abie riéndose, mientras se empieza a atragantar con las patatas, y decide beber un poco de su refresco.

-Eso te pasa por decir cosas que no son, ¡abuela!

-Perdona bonito, pero yo no te he dicho "bebé" si no "enano".

-Lo sé, ¡mayor!

-Mayor...¿qué? ¿Mayor que tú? Oh, ya lo sabía.-responde Abie riéndose, cada vez más.

-Te parecerá gracioso... Haber, ¿cuándo los cumples?

-El uno de mayo de cada año, ¿y tú?

-Haber entonces...¿A qué día estamos?

-A uno de mayo de este año.

-Entonces... ¡Espera!

-¿El qué?¿Qué espere el bus? Lo siento,he venido andando.

-Que no me refiero a eso.-dice Niall riéndose, a más no poder.-me has caído bien.

-¿Qué te he caído bien? Lo siento, creo que tengo pérdida de memoria, porque no recuerdo haberme caído encima de nadie.

La pareja no paraba de reírse. Cuando oyeron a una pareja de unos cuarenta años hablando.

-¿Ves lo felices que son juntos?-le pregunta una mujer de complexión muy ancha y cabello negro oscuro, a un hombre fino, alto y rubio.

-Si,los veo, ¿y?

-Que seguramente son una pareja feliz y contenta, viviendo su juventud. Y tú no me dejaste vivir la mía...

-¿Pero qué dices mujer? Si fuiste tú, la que no me dejaba salir de casa.

-Por que tenías de cuidar del bebé. 

Los dos muchachos que aún reían, y comían, disfrutando de cada mordisco,no salían de su asombro. Ese "matrimonio" les consideraban novios, así, sin conocerles de nada.

-Que cosas de la vida, ¿no?

-¿Cuáles, el matrimonio? Oye que mis padres están casados, yo lo veo de lo más normal.

-No tonta...

-¡Oye no me insultes, que no sabes de lo que soy capaz!

-Lo siento, era de broma.-responde el chico riéndose más y más.-Me refiero, a que apenas nos conocemos y ya nos consideran novios.

-Gente estúpida, que no tiene nada que hacer aparte de quejarse y envidiar a los demás.

-¿Envidiar el qué?

-Nuestra felicidad.

-¿Ahora mismo eres feliz?

-Pues sí.

-¿Conmigo?

Abie se ruboriza, y agacha la cabeza para que Niall no la vea colorarse. Aunque Niall se da cuenta, y levanta la cabeza de la chica acariciando y empujando ligeramente su barbilla hacia arriba.

-Era broma, no te pongas así.

-¿Así cómo?

-Pues como estás ahora.

-Ya... Haces esto con todas, ¿no?

-¿El qué?

-Este numerito, de ponerme roja de la vergüenza y luego levantar mi cabeza con tu suave mano, y así conquistarme.

-¿Te he conquistado?

-¡Yo no soy cómo el resto!

-Lo tengo muy claro, tú eres mejor.

-Me voy, adiós.

-¿Me das tu teléfono?

-El teléfono no puedo, me quedaría sin. Y mi número mucho menos.

-Por favor.

-Si lo quieres, averígualo.

-Lo aré.

Abie sale corriendo de ese lugar. No quiero volver a verle en mi vida, menudo creído. Piensa la chica. Aunque en el fondo de su corazón, le cayó bien, muy bien.

Va andando por una gran calle, llena de parques y casas, muy bonita. Hasta que llega a una plaza, con muchas tiendas de ropa, cafeterías y demás.

-¡Qué bonitos zapatos! Que pena que sean tan caros...

-Si quieres te los compro yo.-dice un chico, de una voz conocida para Abie, cogiéndole los brazos a la muchacha y agarrándoselos a la espalda.

-¡Ah!¡Suéltame o grito!

-Que no soy ningún ladrón ni nada de eso.

-¿Qué no?¿Y por qué  me has cogido mi móvil de mi bolsillo? Por que lo he sentido.

-No hay otra manera de averiguar tu número.

-De verdad que eres tonto. Mi número no lo tengo ahí, me lo se de memoria.

Abie se da la vuelta, y sigue su camino, decidida a no darle su número a Niall.

-Dámelo, dámelo, dámelo, dámelo...- el chico sigue repitiendo esa palabra, aunque Abie le ignore y siga su camino. Él, simplemente se dedica ha decir esa palabra y a seguirla.

Continúan así durante 10 minutos.

-No vas a parar, ¿no?

-No, y lo sabes. Hasta que no me lo des, te perseguiré y seré tu peor pesadilla o tu mejor sueño, depende.

-¿De qué?

-De ti, dámelo y me marcharé, aunque no para siempre.

-Venga apunta, ¡pesado! Que tengo que volver a casa.

Mientras Abie le dicta su número a Niall, ve un autobús acercándose a la parada de ella. Y se va corriendo.

-¡Espera!¿Cuál es el último número?

-¡Cinco!-grita Abie desde la parada de autobús.

-Te llamaré.

-No hace falta.

-Lo aré aunque no quieras.-dice Niall susurrando, ya que Abie ya había subido en el bús. Aquel autobús rojo, pasa al lado suya, y Abie le saluda con la mano en forma de despedida, y él, solamente le dedica una gran sonrisa.

CAPITULO 6

-Vaya, si que has tardado mucho, ¿eh?
-Si... eh... bueno. ¿Qué tal sigues con tu madre?
-No me cambies de tema, ¿con quién has estado?
-¿Yo? Con nadie, he estado de compras, ¿por qué?
-¿Y las compras?
-¿Qué compras?
-¿No habías estado de compras?
-He ido a comer.
-¿Tanto tiempo?
-¿Esto es un interrogatorio?
-Si, soy la policía llamada "tu mejor amigo tiene derecho a saber todo ya que duermes en su casa".
-Un nombre un poco lago, ¿no crees?
-Da igual.
La conversación entre las chicas se mantiene viva mientras Amy prepara la cena. Amy no sabe si ir y pedirle perdón a su hija, o dejar las cosas así, ya que sabe que Aly nunca la va a pedir perdón.
-Está bien, te lo contaré.
-Haber, ¿cómo se llama?
-Espera, primero te cuento detalles.
Aly suspira. Abie empieza a contarle que fue a comer, y no tenía sitio y que aquel chico la dejó sentarse con él, el matrimonio que los tomó como novios, todo. Pero nunca rebelando el nombre del rubio con ojos azules dulce.
-Se llama...
-Chicas, a comer.-grita la madre de Aly desde la cocina, lo más alto posible para  que las chicas la oigan bien.
-Luego me lo dices.
Cenan en silencio, aunque Abie, acostumbrada a conversar mientras come, rompe el hielo de vez en cuando con cualquier tontería, sin éxito.
Vuelven cada una a su habitación, después de poner su plato sucio de aquel delicioso arroz blanco con salsa de tomate, en el lavavajillas.
-Sigue contando.
El teléfono de Aly suena, interrumpiendo a Abie, que intentaba hablar.
-¿Si?-responde Aly, algo descontenta, y haciendo señal a su amiga para que pare de hablar.
-Ponlo en altavoz.-susurra Abie, curiosa.
-Hola, soy Zayn, ¿me recuerdas?
-Claro, ¿boyband?
-Por supuesto, normalgirl.
-¿Nos vamos a llamar así?
-Prefiero que no.
-Ni yo.
-¿Qué tal?
-Bien,¿y tú?
-Bien. ¡Au!
-¿Qué te ha pasado?
-Nada, me he dado con la esquina de la cómoda, en el dedo meñique del pie.
-Pobre, ¿te duele?
-Suele dolerme cuando me doy.
-¡Zayn!Baja, corre, tienes que ver esto.-grita una voz metálica, dulce, de chico, desde la línea del chico.
-Espera Aly. ¿Qué quieres tío? Estoy hablando.
Aly empieza a reírse. Abie se queda pensando, la voz del chico que gritaba a Zayn, le era muy familiar. Ella conocía a Zayn, aunque solo sea de lo que Aly le había contado.
-Ya estoy Aly.
-¿Qué quería Niall?Era él, ¿no?
"¿Niall?", piensa Abie. Por eso la sonaba tanto esa voz.
-Si, era Niall, quería que Louis me cuente un chiste.
-¿Cuál?
-Cuando quedemos te lo cuento.
-¿Y cuándo me lo cuentas?
-¿Mañana?
-¿Por qué no?
-¿Dónde quedamos?
-Hay una cafetería en la calle Abbey Road, Starbucks Coffe, ¿sabes dónde es?
-Claro, allí nos vemos a las doce, ¿te parece?
-Me parece, adios, buenas noches, besos.
-Buenas noches, que sueñes con angelitos.
"Contigo", piensa Aly. Poniendo el móvil a cargar, y se tira tumbándose en la cama.
-Así que mañana cita, ¿eh?
-Si, bueno. Ya era hora de olvidar a Johan, ¿no crees?
-¿Le has olvidado?
-Casi.
Las dos se tumban en la cama, en silencio, mientras se quedan dormidas, sin darse cuenta.
"Zayn es adivino, he soñado con angelitos."Piensa Aly, nada más despertarse, contenta, sonriente. Había soñado con él, el chico que la ayudó a olvidar a Johan.
Por otro lado, Abie piensa en el precioso sueño que tuvo, basado en ella y en Niall. Esa "cita soñada" imaginada en su  imaginación,  no paraba de recordarla esa comida junto a ´l, en Nando´s, el restaurante favorito de ambos.
-Abie. Abie. ¡Abie!
-¿Qué quieres pesada?
-¡Mec!
Aly empieza a reírse a carcajadas, a más no poder. Le encanta hacerle esa broma a su amiga, la divierte y anima. Y también le gusta, porque puede darle un beso y un abrazo mientras la pide perdón.
-Sabes que nunca me ha gustado esa broma.
-Pero siempre picas.
-Porque si no pregunto que quieres, nunca vas a parar.
-Puedes decir "dime".
-Bueno es saberlo.
Bajan a desayunar y comparten un gran vaso de leche, para poder mojar las magdalenas. Su desayuno preferido.
-Oye Abie, anoche se me olvidó. ¿Con qué chico estuviste ayer?-pregunta Aly, mientras busca la ropa perfecta para quedar con Zayn.
-Ya bueno, Niall...
-¿Niall? Yo conozco a un Niall, pero es famoso.
-¿Famoso? El mío es rubio, ojos azules, muy guapo, y le encanta comer, por lo que he visto.
-¿Enserio? El que conozco yo es igualito, aunque no se eso de la comida.
-Bueno, ¿y te gusta Zayn?
-¿Y a ti Niall?
-He preguntado primero.
-Bueno, tampoco le conozco mucho.Pero de lo que le conozco, si, me gusta. Es guapo, amable, muy simpático.
Abie silba, en ese modo de ligue.
-A mi también me gusta un poco Niall, es muy simpático, y sobre todo guapo. Siempre me han gustado los chicos rubios con ojos azules.
-El problema es la fama.
-Y no creo que le gusten las chicas normales como nosotras.
-¿Por qué no?
-No se.
Se cambian, en modo aleatorio, cogen lo primero que pillan. Las dos cogen baqueros pitillos azul claro, y se han puesto la camiseta de "One Direction".
Ahora que ambas saben que los chicos por los que suspiran son de esa banda, les encanta la camiseta.
-Aly, ¿hoy no tenías la cita con Zayn?
-Si, tengo muchos nervios.
-¿Y vas a ir así vestida?
-¿Por qué no? Yo creo que le gustará, ya que él es de esa banda.
-Es verdad, pero cógete mejor un vestido, que hoy hace calor.
-Vale.
Aly busca en su armario, saca varios vestidos muy bonitos. Al final, entre las dos, elige ponerse uno blanco con un estampado de pequeñas flores rosas claro, casi crema. Aly prefiere ponerse manoletinas. Piensa que si ella y Zayn van a dar un paseo, se le hará muy cansado si va con tacones. Y se pone manoletinas, sencillas, color crema.
Abie mira el reloj, ve que la aguja pequeña marca un entremedio entre once y doce, y la grande marca claramente las cuarenta. Ella hace una señal a Aly, para que se vaya. Se despiden con un abrazo.
-Suerte.
-Llama a Niall.
-Lo haría si tuviera su número.
Aly suspira y  levanta los hombros y luego dejándolos caer, queriendo decir "que se le va ha hacer". Y sale por la puerta.
Coge el autobús, ya que su moto está en el taller. Llega a la cafetería acordada con Zayn. Y allí ve a Zayn, rodeado de su filo precioso, al igual que él. Peinándose el pelo,parece nervioso.

"¿Tardará más?", se pregunta Zayn, una y otra vez. Gira la cabeza para buscarla con la mirada mientras se da un último retoque,al pelo que con mucho cuidado y dedicación lavó, secó y peinó esa mañana.

CAPITULO 7

-Hola, verde claro, otra vez.
-Hola, perdona, ¿qué?
-Nada, cosas mías.
Aly se sienta en la silla, mientras que Zayn se queda levantado, como esperando algo.
-Ui lo siento.-dice Aly mientras se levanta y le da dos besos al chico que sonríe, dulcemente.
-No pasa nada. Se ve que no es costumbre para tí.
-No, si que es. Solo que como salgo prácticamente solo con Abie, pues no la doy dos besos a ella.
-¿Quién es Abie?
-Mi mejor amiga. ¿No te ha hablado Niall sobre ella?
-¿Niall?¿Qué tiene que ver Niall en esto?
-Bueno, mejor que te lo cuente él.
-Bueno, está bien. ¿Qué tal llevas lo de tu accidente?
-Bastante bien, dentro de lo que cabe. ¿Y tú?
-Bien. Lo mío no ha tenido importancia.
Los muchachos se quedan charlando un rato mientras se toman un café de Starbucks Coffee. Hablan sobre la fama del chico,  y sobre la "interesante" vida de la muchacha.
-Venga, seguro te ha sucedido o te está sucediendo algo interesante.
-Te digo que no.-dice Aly mientras no puede parar de reír.
-No te creo.
-No me creas.
-¿Damos una vuelta?
-Vale.
Dejan el dinero encima de la mesa. Observándolo mientras se iban, para que no se lo roben.
Van andando por un paseo muy bonito de un parque, rodeado de rosas blancas y rojas. Aly se para a olerlas de vez en cuando.
Zayn coge una rosa blanca, y se la pone detrás de la oreja izquierda a Aly.
-Oh Zayn, gracias, es preciosa.-responde Aly, sonrojada, al detalle que ha hecho Zayn.
-No es nada, te queda muy bien con tu pelo rubio.
Aly agacha la cabeza.
-A ti también te queda muy bien...-Zayn la mira esperando una respuesta.- Pues te queda muy bien todo.
-Vaya, gracias.
Los dos se avergüenzan, y siguen caminando en silencio.
-Mira, vamos por esa calle, conozco un paseo por un bosque precioso.
-Bueno, si tú lo dices.
-Venga, no seas tonto.
-¡No lo soy!
-Lo sé, lo sé.
Los dos corren por ese camino, que empezaba a ser de tierra. Se miran, sonríen mutuamente. Y siguen su camino, andando, con el corazón acelerado por haber corrido.
Observan como los árboles empiezan a moverse, por el viento que empieza a llegar desde el este. Las nubes blancas y algo amarillentas,  empiezan a recubrir todo el azul cielo. Dejándolo con un tono gris amarillento.
-Parece que va a llover.
-No, va a haber tormenta.
-Puede ser.
Recorren mucha distancia, ya cansados deciden parar a descansar.
-¿Tienes agua?
-No, lo siento. Pero ahí hay una fuente.
Aly corre hacia la fuente, sedienta. Se agacha, coloca su cara bajo el chorro de agua,para beber.
-¡Ah!¡Qué asco! Está caliente. Pero voy a beber, así se me pasa la sed.
-Déjame probar.-Zayn llena sus manos colocadas para coger agua, y bebe.
Hace un gesto de asco.
-¿Cómo has podido beber de aquí?
-Mi abuela siempre decía que el agua caliente quita la sed, mientras que la fría te da más sed.
-Ya, pero no "tan" caliente.
-Bueno, yo soy así si no te gusta, te aguantas.
-No he dicho que no me guste.
-Entonces, ¿te gusta?
-Bueno.
A Aly le encanta liar así a la gente, la divierte mucho. Corren hacía un árbol con higos, para comer un par.
Zayn escupe lo que había comido.
-¿Pero qué haces?
-No están hechos. Están rancios.
-Yo amo los higos rancios, es como me gustan a mí.
Zayn pone una cara de extrañado, pero le gusta la chica, le divierte su forma de ser.
-Seremos buenos amigos.
Aly asiente. "Claro, amigos". Piensa ella, entristeciéndose. Aly no sabe si preguntarle a Zayn si tiene novia. "Seguro que tiene. Tan guapo y famoso, atrae mucho, tiene millones de fans." Sigue pensando.
-¿En qué piensas?
-En nada.
-Tienes cara de pensar.
-Bueno, no es nada.
Zayn intenta no preocuparse, pero no lo puede evitar al ver a Aly mirar al frente.
La chica empieza a observar fijamente al frente, mirando un rebaño de ovejas.
-Oye Zayn, ¿tú crees que las ovejas tienen personalidad?
-No lo sé, nunca me he parado ha hablar con ellas. Pero lo supongo, si son seres vivos, lo tendrán.
-Entonces tiene sentido.
-¿El qué?
Aly decide contárselo. Lo de los filos. Le cuenta lo que significa, que color tiene él, su madre, Abie. Las ovejas. El motivo por el que se desmayó el día anterior, todo.
-¿Y tú que color tienes?
-No lo veo. No sé exactamente que personalidad tengo.
-Seguro que la mejor.
-No te creas, a veces soy demasiado mala.
-Ui que miedo, la malvada Aly me va a matar.
-Puede que yo no, pero mandaré a una serpiente a morderte y matarte.
-Hablando de serpientes, allí hay una.
-¡¿Dónde?!-Aly empieza a correr gritando, para huir de aquel lugar. Odia las serpientes.
-¡Aly! No corras tanto, ya no está, vuelve.
-Ven tú, yo no piso por dónde ha pasado un ser tan asqueroso y malvado.
Un trueno les interrumpe la conversación, y el rayo que acompaña, llama la atención de la muchacha. La lluvia empieza a notarse en la ropa de los jóvenes.
-¡Adoro la lluvia! Es tan bonito, me relaja. Cuando mejor estudio, es cuando llueve, preferentemente cuando hay tormenta.
-A mi también me gusta, pero porque estoy muy acostumbrado. No me gusta tanto como a tí.
La lluvia cae sin cesar, empapando el pelo rubio de Aly, y el peinado de Zayn.
-¡Mi pelo!
-Da igual, te lo lavas en casa.
Aly salta de alegría, por la lluvia. Grita, desahogándose, expulsando el odio, cariño y todo los sentimientos que tenía guardados en su corazón y pensamientos.
Zayn se limita a observarla, sonriendo. Por saber que ella en este momento es feliz, o eso desea él.
-¡Amo la lluvia!-grita Aly, lo más alto posible, acompañada de un gran rayo blanco que cae en el horizonte, con su fuerte trueno correspondiente. La chica levanta los brazos, dando vueltas con todo su cuerpo. Haciendo que el vestido tome una forma redondeada, preciosa. El pelo rubio de Aly, también gira, soltando las gotas que había recogido con la lluvia.
Al final Aly decide parar, y seguir con su paseo y conversación.
-Siento ser tan... yo. Es que la lluvia me encanta, me  hace olvidar todo.
-No tiene nada de malo expresarse de la manera que cada uno quiere. 
-Ya, pero lo mío es lo más raro que puedas encontrarte en una persona.
-Conozco cosas peores.
-Un ejemplo.-dice Aly mientras se para, para a Zayn, y acerca su cara muy cerca de la del chico.
El silencio de Zayn hace que Aly haga un movimiento con los brazos, como diciendo "lo sabía".
-Ves, no hay nadie más raro que yo.
-Tú no eres rara, simplemente especial. Me gusta, y mucho.-responde Zayn, juntando sus labios con los de la chica, y pegándolos con gotas de lluvia que caían encima de ellos. 
Este gesto, remata los sentimientos de Aly, haciendo que a su corazón le quede muy claro lo que siente por Zayn.
-Zayn creo que es un poco pron...
-Sh.-dice Zayn interrumpiendo a Aly, poniéndole su dedo índice encima de sus labios.
El chico coge el mechón mojado de la cara de Aly, y lo pone detrás de la oreja de la chica. Zayn acaricia suavemente la cara de Aly, parandole el paso a las gotas que seguían su curso.
Y la vuelve a besar, más apasionadamente. Esta vez, Aly se deja manipular por Zayn. Aunque no es una chica muy fácil de conseguir.

CAPITULO 8

Le encanta, lo sabe, los dos. Esa chica se le mete por los brillantes ojos de Zayn, sin posible escapatoria. "Nunca me ha gustado una chica tan rápido, ¿cómo puede ser posible?". Se pregunta el chico una y otra vez. "¿Será esto lo que se hace llamar 'amor a primera vista'?". Zayn llega a casa, después de despedirse de Aly. Ella tuvo que irse, su madre la llamó.
-Hola tío. ¿Qué tal con Aly?
-Muy bien. Oye Niall.
-¿Qué pasa?
-¿Quién es Abie?
-¿Abie?-pregunta Niall sorprendido, no se esperaba esa pregunta.-Es una chica.
Los chicos empiezan a darle codazos al chico rubio, cabizbajo, avergonzado.
-Venga responde.
-¿Y cómo sabes que la conozco?
-¿Sabes que es la mejor amiga de Aly?
-Entonces ya sabes quién es, no me preguntes.
-Quiero saber de donde la conoces.
Niall no aguanta más el interrogatorio, no quiere hablar de ese tema, de ella. Los chicos se darían cuenta que le gusta. Y prefiere decírselo más adelante.
Se levanta y corre escaleras arriba hacia su habitación. Donde coge el portátil nuevo y decide entrar en twitter, haber que nuevas locuras le dicen las chicas.
-Vaya, si que me desean.-comenta sobre un twit que le manda una fan loca.
-¿Ahora hablas solo?
-No, estaba leyendo los twits de las fans.
-Bueno, deja eso. Cuéntame quien es Abie.
-No me apatece.
-Venga, cuéntale a tu "daddy" quien es esa chica tan misteriosa.
-Vale, pero Liam, prométeme que no se lo dirás a los chicos, por el momento.
-Lo prometo.
Niall le cuenta quien es Abie, como es, de físico y personalidad, que comieron juntos, el matrimonio que les tomó por novios. También que él la siguió hasta que le dio su número, y que estuvieron juntos hasta que se fue corriendo para no perder el autobús.
-¿Y es muy guapa?
-No te la podía describir en palabras, es hermosa. Con los ojos del mismo color que Zayn.
-Entonces debe ser como una princesa.
Niall carraspea mientras dice "mía", para que no se oiga mucho.
-¿Te gusta?
-No lo tengo muy claro, tengo que verla.
-Llámala.
Niall no sabe si llamarla, le parece algo pronto, o demasiado tarde.
-Harry, no hagas ruido, que nos pueden descubrir.-se oye una voz que proviene del pasillo.
Niall y Liam se miran. La mirada de Liam lo delataba. Niall se había dado cuenta.
-Espera.
El joven rubio fue andando sigilosamente hacia la puerta. La abre. Zayn, Louis y Harry caen rodando en el suelo, dentro de la habitación de Niall.
-¿Qué hacéis espiando?
-Queríamos enterarnos.
Los tres espías agachan la cabeza, avergonzados. Louis empieza a reirse, Harry lo mira y también se ríe.
Al final, todos acaban riéndose de lo ocurrido. Menos Niall.
-Os hubierais visto. Los tres con la oreja pegada a la puerta, y cuando la abre os habéis caído rodando.-Liam no puede parar de reírse, aquella escena fue muy graciosa para todos. Les animó.

-Entonces, ¿nos dejas?
-Vale, pero os portáis bien.
-Si mamá. Te lo juramos.
Aly y Abie, se cogen de las manos, y empiezan a dar vueltas saltando, en medio del salón.
-¿Y a cuántas chicas vais a invitar?
-Pues seremos cinco. Aly, Hannah, Cynthia, Ilenia y yo.
La madre de Abie se da la vuelta y va a la cocina. A preparar la cena, para las muchachas.
-Lo vamos a pasar genial.
-Tenemos que organizarlo todo.-responde Abie, sentándose en el sofá y tirando del brazo de Aly para que también se siente.
Las chicas conversan sobre la fiesta de pijamas que siempre han querido hacer, y de la que esa noche disfrutarían con sus mejores amigas.
-Son las seis de la tarde, las chicas están al llegar, y mis padres ya se han ido.-le dice Abie a Aly, que está haciendo pequeños bocadillos para más tarde.
El timbre suena un par de veces. Ilenia, que iba acompañada de su saco de dormir violeta, y de una pequeña maleta azul cielo. Entran por la puerta, gracias a que Abie la abre.
-Hola, ¿por qué has traído la maleta?
-Se necesita muchas cosas para una fiesta de pijama, maquillaje, ropa, y más cosas.
-Bueno, la ropa ya la teníamos, y lo del maquillaje... está bien, tú tienes más que nadie.
Al cabo de un rato llegan las demás chicas, con su saco de dormir y todo lo necesario para pasarlo como nunca antes, y para siempre.
-Vale chicas, ¿qué hacemos?
-No sé, oye, ¿esta noche miramos alguna película?
-Yo tenía pensado ver la de Tres Metros Sobre El Cielo.
-¡Si si, porfavor!- Cynthia suspira.-Uf, Mario Casas, ojalá tuviera un chico que esté como él en mi vida.
-¿Qué es eso?-pregunta Ilenia.
-Es una película española, pero también lo hay en inglés.
-¿Y quién es Mario Casas?
-Un chico guapísimo, y es el protagonista.
Las chicas deciden jugar a lo del maquillaje, antes de ver la película.
Abie tiene que maquillar a Hannah, Hannah a Aly, Aly a Ilenia, Ilenia a Cynthia, y Cynthia a Abie.
-Yo empiezo maquillando.-dice Cynthia, mientras coge todo lo que quiere utilizar.
-¿Entonces seré la primera maquillada?
-Mala suerte. Te maquilla Cynthia.
Abie suspira. Cynthia siempre hace de las suyas, la maquillara de lo peor posible. 
Coge el  lápiz para hacer la raya de los ojos. Al cabo de unos minutos, los ojos color miel de Abie, destacan, gracias a que el borde parece un trozo de carbón hueco.
El pintalabios azul cielo, se ha mudado a los labios de Abie, ya que Cynthia lo ha gastado entero en ella.
Coge la sombra de ojos, de color amarillo fuerte, fosforescente, y lo aplica a los pequeños párpados de Abie, ahora color sol.
El polvo naranja pastel, que invade el trozo de algodón que sostiene Cynthia en su mano, colorea las mejillas de Abie. Que está asustada, sin poder verse.
Las demás chicas, no pueden parar de reírse, al igual que Cynthia.
-Bueno, ¿de qué os reís tanto?¿Cynthia qué me estás haciendo?
-Sh, no hables, que se te estropea el pintalabios.
-Que vale.-responde Abie, malhumorada y algo enfadada.
Abie cruza los brazos, poniendo morritos con los labios azules, destacando más el color y la cantidad de pintalabios que llevaba.
Cynthia continúa maquillando a Abie, poniéndole unos puntos en la mejilla, ya llena de aquel polvo naranja.
-Toc, toc.¿Se puede?
-¿Qué? Pero si no hay nadie en casa.-grita Abie, levantándose, y apartando las manos coloridas de Cynthia.
-Estoy en la ventana. Ábreme.
Abie se acerca a la ventana, haciendo una señal a las chicas, para que salgan de la habitación.
Ella abre la ventana, cuando todas sus amigas han salido de su cuarto.
-¿Qué haces aquí?
-Venirte a ver, pero... uh...-Niall pone una cara de asombro al ver a Abie, y ríe.
-¿De qué te ríes?
-De... bueno... de ti.
-¿De mí?
Abie corre hacia el espejo que había en la parte interior del armario de aquella habitación. Con sus manos toca su cara, intentando quitar esos colores transformados en nuevas partes de su cara, ya que no se iban fácilmente.
Vuelve donde está Niall, decidida a hecharlo.
-¡Vete!No quiero que me veas así.-dice Abie, girándose y tapándose la cara con sus manos algo manchadas de amarillo, azul, negro y naranja.
-Pero si estás muy guapa.-responde Niall, girándola y descubriendo su bello rostro, casi multicolor.
-¿Te burlas de mi o qué?¿Guapa así?
-Que sí. Si tú estás guapa con todo.
-Anda mentiroso. Vete, no quiero que las chicas te vean.
-¿Por qué no?
-Por que no quiero que sepan que un famoso ha venido a verme.
-¿Cómo sabes que soy famoso?
-Mi mejor amiga es Aly, y está casi saliendo con Zayn, tu amigo boyband.
-Ah, es verdad, mejor amiga de la normalgirl.
-¡No me llames así!
-Bueno, ¿quieres quedar algún día conmigo?
-No sé, no quiero que las locas fans se enteren y me intenten matar.
-No se enterarán.
-Vale, mañana, en Nando´s, a las ocho. Ahora vete, corre.
-Ahí estaré.-responde Niall, sonriendo como nunca. Ya no aguantaba más, y decide lanzarse. Coge a Abie por la cintura, rápidamente, y la besa, apasionadamente.
Aly, Cynthia, Ilenia y Hannah, deciden entrar por sorpresa en la habitación. Y les sorprenden besándose.
Niall y Abie reaccionan. Se separan, y la chica empieza a reírse, al igual que sus amigas.
-Vale, no lo pillo. ¿De qué os reís?
-Tienes los labios, y alrededores, azules.
-¿Azules?
-Por el pintalabios de Abie.
-Y dime Abie, ¿estoy guapo?
-Que tonto eres. Venga adios. Te quiero.-esto último lo dice susurrando, para que no lo oiga nadie.
-Yo también.-responde Niall también susurrando. Bajando otra vez por las paredes del edificio de Abie.
En una mirada entre los muchachos, Niall pierde el equilibrio, y cae al suelo. Tres pisos de caída.
-¡Niall!¡O dios mío!
Abie sale de su habitación, con su móvil, llamando a emergencias. Llega al lugar donde, Niall, sigue tumbado, si reaccionar.

CAPITULO 9

Llega la ambulancia, y Abie sube con Niall en ella.
-Chicas, avisad a sus amigos.-dice Abie, antes de que los médicos  cierren las puertas.
Cynthia, Hannah e Ilenia, se miran frunciendo el ceño, extrañadas. Al cabo de un par de segundos, miran a Aly, que no dice nada.
-¡Ah!Espera, yo si tengo el número de uno de sus amigos.-Ella busca un número en su móvil, y le da al botón de llamar.-Hola, ¿Zayn?
-Bueno, soy Harry, ¿eres Aly?-responde una voz conocida para Aly.
-Si, oye... ha pasado algo grave con Niall.
-¿Niall?¿Qué hace allí?
-Verás, mi amiga Abie y el se gustan y tal, y él ha subido por...-Hannah le hace una señal a Aly, para que acabe pronto la conversación, y puedan ir al aeropuerto.-la ventana de casa de Abie, y cuando quería bajar, se cayó...
-¿¡Qué se ha caído desde una ventana?!¿Cuántos pisos?
-Pues son tres pisos.
Harry cuelga sin responder, en la voz se le nota la angustia. Pero Aly oye unas palabras antes de que la conversación acabe. "Chicos, hay que vestirse, tenemos que ir al hospital."
Las chicas, corren hacia el chico de Ilenia, y van rumbo al hospital. Todas asustadas, no hablan, lo cual es muy raro en ellas.

La ambulancia de Niall, pone la sirena, para abrir el paso en la carretera. Están apunto de tener un accidente dos o tres veces.
-Oh Niall, por favor, reacciona.-dice Abie, cogiendo de las manos a Niall, y empezando a llorar.
-Puede que un beso de su verdadero amor le puede despertar.-dice un doctor, riéndose, y golpeando a su compañero por la risa.
-Es verdad, pero yo no soy su novia...
-Ya, y por eso tú tienes los labios medio azules,  y él también. ¿Sois payasos?
-Bueno, es largo de explicar. Si, nos hemos besado, pero no mucho.
La ambulancia llega, un alivio para Abie, que ya no aguantaba ese tipo de interrogatorio o lo que fuese, viniendo de un extraño, que ríe como un pato.
Entran, y a Niall le asignan una sala de urgencias, la misma habitación en la que estuvo ella.
-Lo siento señorita, de momento no puede entrar.
-Está bien, avíseme que tiene.
Después de diez o veinte minutos, los amigos de Niall y las amigas de Abie, aparecen, asustados.
Abie rompe a llorar, solo de verles.
-¿Qué tiene?
-No lo sé... Todavía no me lo han dicho.
-Abie, todo saldrá bien, ya verás.
-Aly, esto es grave, ¡se ha caído desde un tercero!-dice Abie, perdiendo la paciencia, y sentándose de golpe en la incómoda silla azul.
Zayn y Louis, deciden ir a por un café. Es tarde y tienen sueño, después de un día duro con algunas fans.
Pero a Liam y a Hannah también les apetece un café y corren tras los chicos. 
Hannah nunca ha tenido problemas con los chicos, puede relacionarse con ellos sin ningún problema.

-Bueno, el paciente está grave. El brazo derecho está roto, en el codo. Tiene también dos músculos lesionados en las piernas, más una pierna rota, en la rodilla. Y tres costillas fisuradas.-el médico le cuenta a los que están en las sillas, lo que le pasa a Niall.

Zayn que viene el primero de la cafetería, ve desde lo lejos al doctor hablando con Abie, y corre lo más que puede, soltando el café en el suelo, hacia la pequeña reunión.
-¿Y se va a poder recuperar pronto?-pregunta Liam, preocupado por el concierto que tienen mañana.
-No. Tiene que guardar reposo en cama, no se puede mover, ni comer solo.
-¿Cuánto tiempo?
-Dos semanas.
Todos los presente suspiran, pero no un suspiro de alivio, si no de mayor preocupación.
-Pueden marcharse esta noche, solo puede quedarse uno de vosotros, para poder dormir en la habitación.
-Yo me quedo.-dice Abie, decidida.
El resto se miran, y asienten. Será lo mejor, piensas todos, lo mismo.
Y se van a la cafetería, a conocerse un poco. Menos Harry, Cynthia e Ilenia.
Los tres empiezan a hablar, sobre los estudios de las chicas, y la fama de Harry.
-Bueno, ¿y qué tal con las fans? ¿Ya te han robado el corazón?-pregunta Cynthia, en plan broma.
-Pues no, lo tengo guardado en una caja con candado, y la llave se la daré a mi princesa.
-¿Y ya tiene nombre tu princesa?-pregunta Ilenia, bruscamente, girando a Harry para que la mire a ella.
-Nunca he llamado a mis novias princesas, simplemente mi niña. El nombre de mi princesa, es único, igual que lo será ella. Y lo más seguro es que sea hermosa, si es mi princesa.
-Que bonito... ojalá todos los chicos fueran igual.
Cynthia no responde a nada. Se queda pensando en algo. Y reacciona de que tiene que volver.
-¡Ilenia!¿Te acuerdas de mi hermana pequeña? Está en el hospital, y pronto la dan el alta.
Cynthia sale corriendo hacia la habitación de su hermana pequeña. En la zona de observación pediátrica.
-¿Qué le pasa a su hermana?
-Pues tuvo un pequeño accidente con la bicicleta, y la han tenido que operar de la vista. Tiene cinco años. Se quieren mucho.
-Vaya, que pena.
-Lo bueno es que vuelve a recuperar la vista. Es una niña, tiene mucho que vivir.
Harry mira todo el recorrido que ha hecho Cynthia, observando con ternura y sonriendo un poco.
-Harry, ¿te parece guapa Cynthia?
-¿Cynthia? Eh, bueno, si.  Es bastante guapa.
-¿Y yo?
-Bueno, yo también me voy a la cafetería.
Harry coge su chaqueta y se va corriendo detrás de Cynthia, en dirección contraria a la cafetería.Ilenia se le queda mirando, extrañada. Hasta entonces, todos los chicos le habían dicho que es muy guapa, y ahora llega Harry, y actúa como si no se lo pareciese.
Harry ve a Cynthia entrar en una habitación, y la sigue. Entra.
-¡Cynthia!
-Harry, ¿qué haces aquí?
-He venido a visitar a tu hermana.
-¿Qué pasa?-la niña pequeña se despierta.-¿Eres Harry Styles, de One Direction?
-Si, soy yo.
-¿Cómo le conoces?
-Ai Cynthia, es mi grupo favorito, ¿no lo sabías?
Cynthia pone los ojos en blanco, alucinando. Una niña de cinco años y ya tenía su grupo favorito, vaya.
La hermana de Cynthia, Lumia, hace una señal a Harry para que se hagan una foto y le de un beso en la mejilla.
Después, Cynthia se despide de Lumia y sale de la habitación, seguida de Harry.
-¡Espera!
El chico empuja a Cynthia dentro de un armario de limpieza, y también entra él.
La muchacha intenta salir, pero Harry la cierra el paso.
-¡Déjame salir!
Harry no hace caso de los gritos, y la apoya contra una esquina del aramario. Pone sus brazos estirados contra la esquina en la que esta Cynthia, acorralándola.
-¿Por qué huyes de mi?
Cynthia no responde, se limita a mirar los brazos de Harry, y a tocarlos un poco.
-Eres fuertote, ¿eh?
-Bueno, voy al gimnasio.-El chicos quita los brazos, y empieza a sacar la bola de su brazo izquierdo para presumir. Pero Cynthia, se escapa. Harry reacciona y la vuelve a cortar el paso.
-¿A dónde crees que vas?
-Dónde no pueda verte.

CAPITULO 10

-Doctor, ¿cuándo me podré ir a casa?
-Esta misma tarde. Tienes que tener cuidado de ti mismo.
-Si doctor...- Niall agacha la cabeza. Coge su móvil y marca el número de Abie, pero se acuerda que ella está en clases.
El rubio muchacho, intenta levantarse, para sentarse en su silla de ruedas. Ahora, su único vehículo.
La mañana transcurre rápido, para todos.Los chicos de One Direction, y las chicas en el instituto.

-Mamá, me voy esta tarde. ¿Me echarás de menos?-pregunta Abie, intrigada.
-¿Cómo no te voy a echar de menos? Eres mi pequeña, aunque seas la mayor. ¿Me comprendes?
-Claro que si mamá.-responde Abie, alargando sus labios, ligeramente hacia arriba, soltando una pequeña risita.
La morena chica, corre ha su habitación, para volver a bajar con su gran maleta en la mano.
Coge su mochila marrón claro, se la coloca en un solo hombro. Dejando parte de él, colgando.
-Vale, estoy lista.-Abie abraza a su madre, como si nunca más la volviera a ver. Lloran, las dos.
Sale por la puerta, despidiéndose con la mano, por última vez.
Tampoco voy a estar mucho tiempo, piensa ella, son solo dos semanas.
Mientras entra en el taxi que su madre había pedido, oye una llamada de su móvil. Es Aly.
Aly la pregunta si su madre no sospechaba que no iban a ir a España de intercambio esas dos semanas.
Siguen hablando de eso, y al final se encuentran en el mismo lugar. Las dos. Se abrazan, se besan, y se desean suerte mutuamente para que sus familias no se enteren.
Llaman a la puerta, a la vez. Lo que hace, que el sonido sea más fuerte. Lo que les da la seguridad de que los habitantes de esa gran casa, oirá sus llamadas.
-Hola chicas, os estábamos esperando.-el "ricitos" del grupo, les abre la puerta a las bellas damas que esperaban impacientes y nerviosas, a que puedan entrar.
Aly y Abie entran. Dejando las maletas en el pasillo, al lado de la escalera.
-¿Dónde vamos a dormir nosotras?
-Venid conmigo.
Harry, sube las escaleras seguido de las chicas, que levantan como pueden sus pesadas maletas escaleras arriba.
Entran a una habitación grande, espaciosa y blanca. Muebles blancos, paredes blancas, incluso el marco de las ventanas son blancas. Las dos grandes camas adornadas con bombillas de colores en la cabecera, adornan a su vez, la habitación. Dándole un toque de modernismo y juventud.
-Podéis elegir la cama que queráis, son las dos igual de cómodas y grandes.
-Vale, ¿dónde está la habitación de Niall?¿Ya ha venido del hospital?-pregunta muy intrigada Abie. Haciendo gestos a Harry para que responda rápido.
-Recorres todo el pasillo, y la última habitación a la derecha. Lo vas a diferenciar porque en la puerta, está pegado el logo de Nando´s. Y si, ya le hemos recogido del hospital, está descansando.
-Gracias.-ella sale corriendo, destino a la puerta de Nando´s.
Da un par de golpecitos suaves a la puerta blanca, por si Niall está durmiendo. No le quiere despertar.
-No quiero ver a nadie. Avísame cuando llegue Abie con Aly.
Abie carraspea un poco, y le dice a Niall que las chicas ya han venido, poniendo voz grave. Intentando imitar a alguno de los chicos.
-¿De verdad?-en la voz de Niall se notaba que se estaba poniendo nervioso, y que se acomodaba de distinta manera.-Dile a Abie que venga, por favor.
La chica hecha una pequeña risita, que apenas se oye.
-Hola, ¿cómo sigues?-Abie avanza despacio hacia la cama de Niall, que está en una esquina de la gigantesca habitación verde claro.
-Bien, ahora mejor.-dice, sonriendo, contento.
Los dos empiezan a hablar sobre ellos, la vida de cada uno, sus familias. También de porque, Niall no salió de la casa por las escaleras. Y bajó otra vez por la ventana, a tres pisos del suelo.
-Bueno, piensa que si no me hubiera caído, tú no pasarías estas dos semanas conmigo. Aquí.
-Ya, pero yo me pierdo dos semanas de ir a España.
-Te prometo, que cuando me recupere y  tú tengas vacaciones. Te llevaré de viaje por todo el mundo para compensarte.
Abie hace gestos con las manos, y con la cara, que hace como si se lo estuviera pensando.
-¿Crees qué mis padres me dejarán ir con un famoso que acabo de conocer, por el mundo?
-Les dices que has ganado un concurso por internet, para ir a acompañar a un grupo británico en su tour.
-Ya veremos.-los dos ríen. Disfrutando.
Abie apoya su espalda en la cabecera de la cama de Niall, mientras él, deja caer su cabeza en el brazo de Abie. Durmiendo.
Ella se percata de eso, y coloca la cabeza de Niall en sus piernas, acariciando su pelo rubio. Observando la hermosura de su cara mientras duerme.

Después de colocar su ropa en el armario, Aly baja al salón. Dónde todos los chicos, miran la televisión.
-Vale, ¿en esta casa no se cena?-pregunta Aly nada más entrar por la puerta.
-Si. Pero de la comida se encarga Zayn y Niall, y como Zayn está en cama.
-Y a mí no me apetece.-interrumpe Zayn a Liam.
-Bueno, entonces. Zayn, vamos a la cocina y preparamos la cena.
-A la orden mi comandante.
Zayn se levanta de un salto del sofá, dejando un hueco libre. Que Louis aprovecha, y se tumba.
Van a la cocina.Zayn le enseña a Aly donde están todos los ingredientes y los cacharros necesarios. Para preparar un buen plato pescado al horno, con sal por encima.
Después de lavar el pescado, hacer una salsa deliciosa, y preparar la masa para un postre.Aly y Zayn, se sientan en las sillas de la cocina, cansados.
-¿Nos saldrá bien?
-Con tus finas manos seguro que si. Cocinas muy bien.-Zayn se acerca a Aly, arrastrando la silla debajo de él. Llega a su lado, y la besa.
-Zayn, ¿qué hay entre nosotros?
-¿De qué?
-La otra vez que nos vimos, bueno, ya sabes. Nos besamos bajo la lluvia, ¿recuerdas?
-Como para olvidarse.
-¿Y entonces?
-Supongo, que somos novios, ¿quieres?
-Bueno, no sé... ¡Pues claro!-Aly salta un poquito, volviéndose a sentar en el mismo segundo, dando un abrazo a Zayn. Besándose.
-Ya me habías asustado.
Los dos se levantan, y van al salón. Cogidos de la mano.
-¿Ya es oficial?
Aly y Zayn se miran, y asienten los dos a la vez. Sonriendo y dándose un beso corto pero profundo.
Se sientan a ver una película juntos. Llevan como media hora riéndose de las comedias que hace un actor, en sus vacaciones ganadas en un concurso, junto con su cámara.
-¿No os huele un poco a quemado?-dice Louis, olfateando el ambiente.
-¡El pescado!-Aly brinca, y va dando grandes pasos de desesperación, hacia la cocina.
El pescado se está chamuscando un poco por encima, en el ardiente horno.
-Ahora está doradito.-susurra ella.
Zayn viene a la cocina, pasados unos minutos. Y ayuda a Aly a servir la cena.
-¡A comer!

Niall se despierta, levantando la cabeza bruscamente, al oír la palabra "comer". Pero al fijarse que Abie también está dormida. Decide volver a apoyar su cabeza en las delgadas piernas semidesnudas de Abie.
Él, se fija en que Abie lleva vestido. Y al quedarse dormida, se le había subido un poco en la cama.
Niall empieza a tocar suavemente con las manos, la piel que está un poco por debajo de la rodilla izquierda de Abie. Y sube poco a poco, haciendo cosquillas a la chica. Llega a la mitad de la parte entre la cadera y la rodilla. Cuando Niall siente un golpe en la nuca.
-¿Pero qué haces?
-¿Yo? Nada, acariciaba tu suave piel.
-Ya... ¿Tienes hambre?
-Pues sí, la verdad.
Abie se levanta y sale de la habitación.

-Oye Zayn.-Zayn mira a Aly, en señal de que la está escuchando.-Mejor hacemos mañana el postre, ya no me apetece.
Zayn asiente, y los demás chicos suspiran, en modo de pena y desilusión.
-Pero mañana os prepararé el mejor postre que hayáis comido nunca.
Entonces, los chicos sonríen, otra vez entusiasmados. Mientras se comen el pescado cubierto de la salsa especial.

Abie vuelve en unos cinco o seis minutos. Con una bandeja llena de comida en la mano.
-Ya está la cena.
-Huele muy bien.
Abie se sienta en la cama, y Niall se coloca para poder comer. Y ella, coge un poco de pescado salseado, y juega con él, como si fuera un avión.
-Bueno, creo que el avión ya se ha retrasado mucho.-dice Niall, impaciente y hambriento.
Ya se había comido más de la mitad del plato. Cuando Niall le pregunta a Abie, que si ella tiene hambre, y Abie niega con la cabeza.
-¿Te gusta la comida?
-Si me la das tú, siempre.
Los dos se acercan en un instinto. Y se besan.

CAPITULO 11

-Abie, Abie, ¡Abie!
-¿Qué quieres pesada?
Abie abre los ojos, y ve a Aly, sentada en su cama con los pies cruzados y asombrada.
-¿Qué soñabas?
La chica morena, pone los ojos en blanco y sonríe, al recordar lo que soñaba.
-¿Yo?Nada en especial. ¿Por qué?
-¿Nada en especial? Claro, y por eso decía: ¡Niall, nuestros hijos son preciosos! ¿Verdad?
-Em... ¿Alguien te ha dado permiso para escuchar mis sueños?
-Mi abuela siempre decía, que una persona que dice sus sueños en alto. Es porque lo que ha soñado le gusta de verdad.
-Tu abuela no tiene que tener razón.
-La tiene, y lo sabes, ¿eh pillina?-remata Aly mientras se sienta al lado de su amiga. Y le da un pequeño puñetazo en el brazo.
Se visten. En modo aleatorio, como les gusta a ellas. Las dos cogen baqueros, de distinto color. Aunque Abie los coge cortos, con una camiseta blanca, ajustada. Y Aly, los prefiere largos, con unos tirantes ajustados por debajo de una camiseta que es ancha y corta hasta el ombligo.
Bajan a desayunar.
-¿Niall ya se ha despertado?-le pregunta Abie a Harry que está desayunando en la cocina.
-Si, ya le he subido yo el desayuno, gritaba como loco que tenía hambre.
-Que mono...-susurra Abie.
-¿Sabes lo que decía Abie en sueños?
-¿El qué?-preguntan Liam y Zayn que entran en la cocina, también a desayunar.
Abie le da un codazo a su amiga, y la mira como diciendo "si dices algo te mato".
-Nada. ¿Cómo lo voy a saber? Yo tengo un sueño demasiado profundo.-ella se ríe. Devolviendo la mirada  asesina a su querida amiga mira mal.
-Pues tendremos que poner cámaras para saber que sueñas.
-¿¡Niall!?-preguntan todos, asombrados.
-¿Qué pasa? Me aburro en mi habitación, y los walkie talkie son muy útiles. Harry colocó uno en la cocina.
-Es verdad, Soy muy malo, y sexy.-dice mientras se ríe.
-Una chapita con tu nombre, tío sexy.-dice Zayn mientras le da un pequeño puñetazo en el brazo, haciendo reír a todos los presentes. Y a los chicos rubios que escuchan todo a través de walkie talkies.
Abie, Aly, Liam, Zayn y Louis, desayunan, hablando entre ellos. Aunque también con Niall y con Harry, que estaba en la habitación del enfermo.
-Oye Niall, ahora subo a visitarte, ¿vale?
-Vale preciosa. ¡Harry lárgate de aquí, que voy a tener visitas!
-¿Y yo que soy?
-¿Tú? Un gato con rizos, que viene a maullar a mi habitación, por que se aburre y como no tengo escapatoria, tengo que aguantarte.
-Vale, tendré esto en cuenta.- y se oye el portazo que da Harry al salir.
La conversación, medio discusión, entre Harry y Niall, hacen reír a todos, incluso a ellos.
Harry da unos pasos bajando las escaleras, que destacan mucho.
-Hola chicos.-saluda el "ricitos", entrando en la cocina.-Ya puedes subir, morenita, el enfermo te espera.
Abie no espera a que se lo diga dos veces. Y sube corriendo a la habotación "Nando´s".

-Hola, ¡mi morenita!
-Hola, ¡mi rubito!
-No les habrás dicho a los chicos lo nuestro, ¿no?
-No. Hasta que tu me digas que se lo quieres decir, no.
Se oye una persona que carraspea. La voz provenía del walkie talkie.
-Chicos... está encendido el aparatejo este.
Abie y Niall se besan. Formando un silencio, que hace pensar a los de la cocina, que han apagado los casi teléfonos.

-Aly, ¿vamos a dar un paseo?
-Vale. Adiós chicos.
-Adiós parejita hermosa.
-Louis, vuelves a decir eso y...
-Y, ¿qué? Se que eres muy celoso,pero decía hermoso a la pareja en sí. Aunque la chica también lo es.
Aly se ruboriza.
-Vamos Aly. No quiero que me quiten tu amor.
-Nadie lo hará. Y lo sabes.
Salen de casa, con una gran sorpresa.
-¡Paparazzis! ¡Corre!
Los dos se cogen de la mano y salen corriendo de la urbanización.
Zayn se pregunta como han descubierto donde vivían. A lo mejor, han visto a las chicas con ellos en el hospital, y ayer las han seguido hasta aquí. Piensa Zayn. Y puede que esa sea la verdadera solución.
-¿A dónde vamos?
-A un descampado que está cerca de aquí. Es muy grande y bonito.
-¿Verde?
-Verde.
-Oye, ¿tú no te mareas con todos los paparazzis y sus filos?
-Si, un poco. Pero ya me he acostumbrado a tanto colorido. Vivo rodeada de gente y animales que desprenden colores.
-¿Y el color cambia o sigue siempre igual a cada persona?
-No cambia, es igual siempre en cada persona. A menos que cambie de personalidad, o eso creo.
-¿Y sabes que significa cada color?
-Para nada. Me tienes que ayudar a descubrirlo.
Llegan al descampado. Está vacío. Se tumban mirando al cielo, y hablan de lo ocurrido. Recordando como se conocieron. Y declarándose lo que sienten el uno por el otro.

Niall y Abie, están tumbados en la cama, hablando de comida.
-¿Desde cuando vas a Nando´s?
-Desde que me conozco, a mis padres les encanta. ¿Y en Irlanda también hay?
-Por supuesto. Allí lo conocí. Amo ese restaurante.
Se besan de nuevo. 
-Cuando pienso que estás así por mi culpa...
-No es por tu culpa. Fue mi idea ir a tu casa.
-Por suerte mi madre no se ha enterado.
Se quedan en silencio. Sin pensar en nada. Hasta volverse a quedar dormidos, los dos. Es temprano, y los dos son dormilones.

El teléfono de Harry suena. Él se levanta y sale a la terraza para poder hablar en tranquilidad.
-Hola Cynthia.-es lo único que Liam y Louis llegan a escuchar.
-¿Tú crees que a Harry le gusta esa chica?
-¡Mi Hazza es mío!Pero creo que si, ella es muy guapa. Y él demasiado sexy.
-Entonces somos los únicos sin chica...
-¡Abrázame mi Daddy Direction!-ambos se abrazan, riéndose a mas no poder.

Aly y Zayn, corren. El chico persiguiéndola a ella.  
Zayn se para y la grita a Aly.
-¡Aly! Ven.
Aly para. Se da la vuelta, y corre hacia Zayn, que está con los brazos abiertos. Salta encima de él, rodeando su cuello con sus finos y desnudos brazos. Y poniendo las piernas alrededor de su cadera. Y se vuelven a besar.

-Chicos, me voy.
-¿A dónde?
-A preparar la maleta.
-Harry, ¿dónde te vas?
-Al aeropuerto.

CAPITULO 12

Zayn y Aly, tumbados en la seca tierra. Deciden volver a casa. Ya que los chicos se habrían dado cuenta lo de los paparazzis y estarían preocupados.
-Cariño, ¿crees que piensan que somos novios?
-Cielo, no te preocupes. Si no quieres que lo nuestro se sepa, algo me inventaré.
Aly sonríe, satisfecha. Le besa, en modo de agradecimiento. Y él, se lo devuelve, también satisfecho.
Andan lentamente, en silencio. Alguna que otra vez se besan. Hasta llegar a casa.
Llaman a la puerta. Y les abren.
La voz de dos chicos carraspea fuertemente, y uno de ellos sostenía una tablet.
-Menuda bienvenida.
-Zayn, lee esto.
El joven famoso, coge la tablet entre sus suaves manos, y Aly, se pone al lado suya para leer.
-Últimas noticias: El famoso Zayn Malik, de One Direction. Fue visto con una muchacha joven y rubia, saliendo de su casa hace un par de horas. Se rumorea que pueda ser su nuevo ligue.-lee Zayn, con el ceño fruncido y preocupado.
-¿Nuevo ligue?
-Ligue: persona que está con otra sin ningún compromiso, solo de lío.-aclara Harry.
-Pareces un diccionario. Dime que es un hipopótamo.-dice Louis, riéndose a más no poder.
Harry empieza a decir que es un hipopótamo, con las palabras científicas que sabe.
-Dejadlo ya chicos. Hay más.-todos paran de bromear y están atentos a lo que Zayn lee.-En la misma casa donde se vio a Zayn y su "ligue". Se oyó una "conversación", proveniente de una de las habitaciones de la casa, que tenía la ventana abierta. Un grito que hizo Niall, no se sabe si de dolor o placer, continuo de unas palabras de una chica, "no es nada Niall, tranquilo", desconcierta a todas sus fans y cotilleos. Haciéndonos pensar que, el rubio de la banda, también tiene un ligue. ¿Acaso la banda tendría alguna noche de fiesta, en la que les gustaron chicas?
Todos se miran. No sabían que pensar. ¿Traería muchos problemas el que las chicas pasaran unos días en casa de One Direction?
Suben corriendo a la habitación de "Nando´s",para preguntar que es lo que había pasado.
-Chicos. No hicimos nada. No podemos y ni queremos. Simplemente, le cambié las vendas de las costillas a Niall. Y a él le dolió.
-¿Y lo de la ventana?
-Cuando vine esta mañana, la abrí para que el aire cambiara.
Todos, excepto Niall y Abie, suspiran aliviados.
-Me voy. Que pierdo el avión.-Harry sale corriendo de la habitación, para coger la maleta de la suya, e irse de la casa, en dirección al aeropuerto.

El número de Cynthia, hace sonar el teléfono de Harry. Hablan sobre donde se encontrarían. Y a la hora más o menos.
-¿Vendrás?
-Allí estaré. ¿Te encuentras bien? Tienes la voz rara.
-Si. No es nada. Solo que por el teléfono, y porque estoy un poco resfriada, se me a cambiado.-hay un pequeño silencio, en el que Harry oye unos gemidos, y el número de Cynthia intenta colgar.-¡Espera!¿Qué pasa ahí?¿Otra vez esos gemidos?
-Nada, ¿qué va a pasar? Adios Harry. Ponte sexy.
El chico se preocupa. Y ella cuelga.

-¡Qué te calles!Harry casi nos descubre.
Los ojos de la chica atada, de pies, manos y con la boca tapada. Se vuelven tristes y sin esperanza alguna.

Liam, Louis, Zayn, Aly, Abie y Niall. En el cuarto de este último,  hablan  sobre porque Harry se va, y con quién.
-¿Creéis que se gustan mucho?
-No lo sé. Pero, o a Harry le gusta mucho Cynthia, o a ella le pasa algo.-propone Niall.
Abie y Aly, se miran, desconcertadas.
-¿Algo  cómo que?
-Oye que ya he aportado mi granito de arena.
-¡Niall!Necesitamos una montaña, no un granito.
-Estoy enfermo. No puedo pensar.
-No, si tu el problema de la cabeza lo tenías desde que naciste.-dice Louis, terminando su "agradable" conversación.
Abie saca su móvil, y marca un número. Que, por lo visto, se sabe de memoria.
-¿A quién llamas?
-A Cynthia.-responde Aly. Porque conociendo a su amiga, no está tranquila e intenta averiguar sobre Cynthia.
La chica morena, pone la llamada en altavoz. Para no ser la única testigo, de lo que pasa. Y si no pasa nada. Todos estarán tranquilos.
-¡¿Ilenia?!-gritan las dos chicas, al reconocer la voz de Ilenia.
-La sorpresa es mutua.¿Por qué no habéis venido a España?
-Nos hemos quedado a cuidar a Niall. Bueno yo, pero Aly se ha quedado conmigo.¿Y tú no que no querías ir a España?
-Al final decidí ir.
-Imposible. La fecha máxima para entregar la solicitud y el dinero fue hace un mes.
-Lo sé. Pero si vas aparte en el avión. Allí al final te dejan entrar en el grupo.
-¿Y Cynthia?
-En el baño.
-¿Y esos gemidos?
-Nada. Nos vamos. Adiós.
El final de la llamada, preocupa a todos los presentes. 
Hablan sobre que hacía Ilenia con el móvil de Cynthia, aunque ella esté en el baño. Abie y Aly, saben perfectamente que Cynthia sin móvil no es persona.

Tengo que averiguar que la pasa a Cynthia. Piensa Harry. Primero que me pida que vaya con ella a España, cuando me dijo en el hospital que no me quería volver a ver. Después lo de la voz. Y por último, lo de los gemidos. ¿Qué te estará pasando, mi preciosa ojos verdes?¿Estás bien o mal? Tengo que pensar positivo. No la pasa nada, solo quiere verme y listo. En una hora, o lo que falte de vuelo, aclararé todas mis dudas.

-No lo coge.
-Vuelve a intentarlo, Liam.-Louis insiste a Liam en que llame a Harry, Está preocupado.
-Cuando vea todas las llamadas perdidas, nos llamará.
-¿Y hasta entonces qué?
-Ya veremos. Harry ya es grandecito.
-Me parece mentira que diga eso el Daddy Direction.

Abie se asoma a la ventana a respirar aire. Está angustiada por Niall, por lo mal que está.
-¿Qué te pasa princesa?
-Adoro cuando me llamas princesa.
-Nunca me imaginé, que una chica intentara robar mi corazón en unos pocos días.
-¿Intentara?
-Si. Ya sabes.
-No sé.
-Pues bueno. Lo intentaste. Pero te diste cuenta, de que ya era tuyo.
La chica, corre hasta la cama de su novio, y le besa.

Aly sale al patio trasero, para coger una llamada entrante de su madre. Su madre la pregunta sobre su viaje a España, cómo está ella y el país. Cuando se estaban despidiendo, Amy, le dice a su hija, que ha visto la foto de ella y Zayn, saliendo de la casa del muchacho.
-¿De dónde le conoces?
-Le he conocido aquí, mamá.
-¿Y porqué dice que  os han visto en las afueras de Londres?
-¡Por qué no estoy en España!

CAPITULO 13

Aly abre la puerta de Nando´s, llamando a Abie para que salga un momento, y volviéndola a cerrar.
-¡Tía!¿Qué quieres?
-Nos han pillado.
-¿De qué?
-Mi madre ha leído el artículo en el que me ven con Zayn.
-¿Y qué ye ha dicho?
-Que volvamos a casa...
-Pero yo no puedo dejar a Niall solo.
-Tiene a los chicos.
Suspiran, preocupadas y desorientadas.

Bueno, esperemos que pasen cosas buenas, y no malas. Piensa Harry. ¿Pero y si la ha pasado algo por mi culpa? No puedo permitirme pensar así.
Él, llega en el lugar acordado. Un edificio sucio por fuera, pero moderno. Abandonado, al parecer.
Entra, despacio, gritando el nombre de Cynthia. Unos grandes gemidos de desesperación y algo de alivio, junto con una risa malvada, es lo que el boyband de moda llega a oír.
La gran sala vacía y gris, llena de polvo, con los muebles cubiertos de sábanas que en su época, eran blancas. Hacia un gran eco, a cada paso que daba el joven chico.
-¡Harry!
Estas seis letras, resuenan en la cabeza de Harry, haciéndolo saber de que Cynthia está acompañada. O quizá esa persona está acompañada de Cynthia. Una mujer.
-¿Cynthia?¿Dónde estás?¿Y con quién?
-Cariño. 
-¿Ilenia?¿Eres tú?¿Y Cynthia? He quedado con ella.
La voz de Harry empieza a quebrarse cada vez más. Se nota que está preocupado, mucho.

-Lawren, no hace falta que te pongas así. Son todavía unas niñas.
-¿Unas niñas? Este año cumplen la mayoría de edad. Hemos gastado muchísimo dinero para ese viaje a España, ¿para qué?¿Para que tengas romances con famosos aquí, en Londres? No me parece Amy. Se han pasado.
-A lo mejor con lo del dinero un poco.
-Bastante.
-Pero el tener dieciocho años, no implica madurar, ¿acaso tú lo hiciste?
La puerta de la casa de Abie, donde las madres de las adolescentes hablan, se cierra dando un buen golpe ruidoso.
-Eso mamá, ¿tú no hiciste ninguna travesura o inmadurez a los dieciocho años?
Amy y Lawren, las madres de Abie y Aly, se sorprenden al oír la voz de Abie, y al ver a las chicas con las maletas.
-¿Qué hacéis aquí?-pregunta Amy, muy sorprendida.
-Mamá, no podíamos seguir allí. No después de que sepáis que seguimos en Londres...
-Pero hija, sales con un famoso. Tú ya eres mayor de edad... Puedes hacer lo que quieras.
A Amy se le llenan los ojos de lágrimas, impidiéndole parpadear. Porque sino, las lágrimas brotarían de sus ojos, como las rosas de su capullo en primavera.
Madre e hija Reeve, se abrazan como si fuera el último día. Queriéndose, y demostrándose en un afecto físico, que se aman.
Abie también llora al ver esta escena, pero su madre Lawren no.
-Mamá, ven, abrázame.
-¿Todavía esperas que te de un abrazo después de lo que hiciste?¿No tienes vergüenza?
-Si papá siguiera con nosotras lo entendería...
-¡Pero tu padre nos abandonó!
-¡Ojalá hubieras sido tú la que nos hubiera dejado!¿Por qué no puedes ser cómo Amy?
Esto último hace que Lawren, se enfurezca más aún. Abie sale corriendo de la casa, con su maleta en la mano.
-Voy a por ella, a tranquilizarla.-susurra Aly en la oreja de su madre, desprendiéndose de su aroma. Dejando atrás el último beso que le da a su madre, antes de salir tras su amiga.

-Chicos, me voy, adiós.
-Liam, ¿a dónde vas? En cuatro horas va a venir la entrevistadora a casa, por lo de Niall.
-Lo sé, espero estar de vuelta.-El chico sale de la casa, sin decir a dónde va. Y sin terminar de oír las regañinas de Harry.
-¿Cómo que "esperas"?

-Lawren, ¿no crees qué te has pasado un poco?
-¿Y ella?
-De las dos, ¿tú cuál crees que es la más madura?
-¿Vamos a buscarlas?
-Vamos.
Las señoras, guapas como sus hijas, y elegantes con su propio estilo. Salen de la casa, se suben a uno de los coches de su propiedad, aparcados en frente de la casa, y buscan a sus hijas en la calle. Mirando por la ventanilla y gritando sus nombres.
"¡Abie!¡Aly!", son las palabras que oyen los habitantes de la zona suroeste de Londres, provenientes de aquel coche azul claro.
-Gira a la izquierda a la siguiente calle.
-Pero eso lleva a la zona rica.
-Lo sé.
Lawren conduce, nerviosa y a la vez preocupada. Buscando con la mirada a su hija y a su mejor amiga.
Amy sigue gritando los nombres de Abie y Aly por a ventanilla, desesperada.
Saca el  móvil de su bolsillo, decidida a llamar a Cynthia.

El tono de llamada del móvil de Cynthia, hace que Harry se sitúe en ese abandonado edificio.
-¡No te preocupes mi niña ojos verdes!¡He venido aquí, por tí!
Cynthia intenta sonreír, debajo de ese grueso y ancho celo gris, que le tapa la boca.

Aly corre tras su amiga. Gritando su nombre, y que pare. Intentando que deje esa carrera, la cual su meta es la nada, y el sufrimiento.
-¿Dónde vas?
-¡Con mi padre!
-¿Por qué?
-¡Por que es el único que me entiende!
Aly se para en seco. ¿Cómo que su padre?¿Qué la entiende? Piensa ella. Su padre la abandonó cuando tenían diez años. ¿Le habría visto?¿Habría tenido algún contacto con él?Por eso siempre hablaba de él, y que es bueno y buen padre. Ahora me explico porque Abie no le ha guardado ningún rencor a su padre por haberlas abandonado. ¿O me lo ha ocultado?No, es imposible, soy su mejor amiga. Nos lo contamos todo. ¿Pero y si su padre la obliga a no decir nada de esto?
-¡Abie!¡Tu padre te abandonó!¿Cómo te va a entender?
-¡Tú crees que me abandonó, mi madre que está muerto! Y yo, ¿yo qué? ¡Yo lo único que creo y pienso ahora mismo es que él, es el único que me entiende!
Abie empieza a andar, cada vez más despacio, hasta que se para y se da la vuelta. Ve que su amiga, la que la ha acompañado durante toda su vida está ahí, parada y sonriendo, esperando un abrazo. De consuelo, pero no para ella, sino para Aly, que, a pesar de todo, y de todos, sonríe y vive la vida. Después de su accidente y de ser huérfana de la persona a la que más quiso en su vida, sonríe e intenta ser feliz, viviendo el 
día a día junto a ella, su amiga, y más que eso, su hermana. Si, Abie se siente miserable e hipócrita. Se pregunta cómo ha podido ser tan ciega de no darse cuenta de que su mejor amiga sufría, mucho, y en silencio. Sonriendo, siendo una buena actriz, y ocultando su tristeza tras una máscara de felicidad, que a veces no se inventa. Las dos chicas, se acercan paso a paso de un abrazo que marcará su amistad, ¿otra vez? No. Por primera vez, las dos hermanas, aunque no de sangre, se dan cuenta de lo que siente cada una. No con palabras, sino con miradas, y ni eso. Se dan cuenta, con el simple hecho, de que una corre y la otra la persigue. De que una sufre y la otra la acompaña en el sentimiento, que también tiene, pero de distinta forma y expresión.
Se abrazan, llorando. Y se turnan, las lágrimas se turnan. Una cae, siendo felicidad, y la otra, siendo tristeza. Pero el abrazo hace que las lágrimas se junten, aunque sea de la misma persona, y lo transforman en amistad, cariño, amor. 
-No quiero que este momento acabe.
-No lo hará. Permanecerá. Solo que en nuestro corazón, mente y alma. En nuestros ojos, y en cada lágrima. Sea cual sea el lugar en el que estemos, si estamos juntas, el sentimiento estará.
-Lo siento.
Aly la mira con desconcierto. Preguntando el porque de su "lo siento".
-Nunca he sido una buena amiga.
-Por que has sido la mejor de las hermanas, confidentes. Compañera de llantos y risas.
-Aly, ¿qué color desprenden mis lágrimas?
-¿Cómo?No tienen perso... ¡Espera! Son... blancas.

El teléfono de Abie, interrumpe el momento, y abrazo.
-Cógelo.
La chica morena, responde. Y a los pocos minutos se arrepiente.
Cae de rodillas al suelo, sus rodillas sangrando, por el camino pedregoso. Su móvil roto, por la brutal caída. 
Ella, mirando a su amiga, la pregunta:
-¿Qué color desprenden ahora mis otras lágrimas.
Aly también rompe a llorar.
-¡Negro!-grita con desesperación, mucho dolor.
Abie, al oír las palabras de su amiga, más lo oído de la llamada. Levanta las mano hacia el cielo, mirándolo. 
Un trueno, acompañado de su hermoso, y doloroso rayo, caen desde el cielo. Y Abie, lo oye, a la vez que grita, una simple palabra de dos letras. Una "N" y una "O". La peor palabra existente. Pero a la vez, la mejor, en este caso.

CAPITULO 14

-¡Harry!¡Ayúdame, por favor!
-¡Calla Cynthia!No te he quitado el celo para que grites. Que ya está aquí. Ha venido a por ti. Sin saber el riesgo que corría.
-¡Harry!¡Vete de aquí! Esto es una trampa...-Cynthia llora. Sin saber que hacer ni que decir. Ella oye los pasos de Harry acercándose.
-¿Cómo que una trampa?-pregunta el chico.
-¡Qué te calles te he dicho!
El muchacho se gira, da vueltas, observándolo todo con una mirada casi felina. Ve un pequeño flash, que proviene de un armario un poco abierto. ¿Paparazzis? Piensa él. ¿Habrá sido Ilenia capaz de hacer esto? Pero, ¿para qué? Imposible. Bueno, me hacen fotos aquí, desorientado. Buscando a Cynthia. ¿Habrás sido Ilenia la que avisó a los paparazzis de que las chicas están en nuestra casa? Y otra vez, ¿para qué?

Niall enciende la televisión. Está aburrido sin ella, sin su bromas. Sin la sonrisa que le hace olvidar que está en cama, con un cuarto del esqueleto roto, y fracturado.
-¡Chicos!¡Corred!¡Subir a mi cuarto!
Los dos chicos que estaban en la cocina comiendo, suben corriendo a la habitación del rubio. Para ver que le pasaba.
-Tío, ¿estás llorando?-pregunta Zayn, algo asombrado, pero preocupado.-¿Te duele algo?
-Leed o mirar la tele.
-¿Leer?
-La noticia de última hora que aparece abajo.
Todos lo leen, con paciencia, ya que el texto se mueve lento. Zayn también empieza a soltar alguna lágrima.
-¿Qué?¿Qué pasa?
-Dos mujeres de mediana edad. Una viuda y la otra la abandonó su marido. Las madres de Aly y Abie.-aclara Zayn.
-¿Muertas?
-Accidente de coche. Solo una de ellas está muerta, la otra está muy grave. Pero no especifican quién es quién.
-¿Se habrán enterado las chicas?
-Las habrán llamado para avisar de lo sucedido.
-Vamos al hospital.
Los chicos pusieron a Niall en la silla de ruedas, ya que insistió en que quiere consolar a Abie.

Harry por fin encuentra la habitación en la que Ilenia, esperaba impaciente.
-Por fin llegas, mi precioso ricitos.-Ilenia le asusta, tocándole  los rizos a Harry.
Él aparta la cabeza, corriendo hacia la esquina en la que Cynthia, sigue atada. Se pone de rodillas enfrente de ella intentado desatarla.
-¡Oh Cynthia, por fin te encuentro!¿Te han vuelto a tapar la boca? Pero si... a lo mejor te han vuelto a tapar antes de que llegara.
La muchacha atada, mira a Harry y luego detrás de él, haciéndole una señas, que él no capta. Pero ella es rápida y muy lista. Estira como puede sus piernas atadas, golpeando las rodillas de él, haciendo que caiga tumbado hacia abajo y que se golpee la cara contra el suelo. Con este hecho, Cynthia evita que Ilenia le golpee a Harry con un gran trozo de metal en la cabeza. Haciendo así que ella también cagia al suelo, por tropezarse con las piernas estiradas del boyband.
-¡Mm!-Cynthia intenta hacer ruidos para que Harry reaccione, dándole golpecitos en su cuerpo, con  las piernas.
Pero Ilenia se levanta. Y al ver al chico tumbado sin reaccionar, lleva acabo su plan. Secuestrar al chico, para guardarle para ella sola. Le ata, y le pone al lado de la ojos verdes.
Cynthia observa algo que cae del bolsillo derecho de Harry, del bolsillo que ella llega a ver y tocar.
Un botón que está conectado con la policía. Piensa ella. ¿Habrá sido Harry tan listo cómo para hablar con la policía antes de venir aquí? Y pulsa el botón rojo. Esperando a que llegue la policía.
 A lo mejor no es tan idiota como creía. Sigue pensando. Y a parte de intentar ser mi héroe, que yo lo considero así, es muy guapo. Ha venido desde Londres para quedar conmigo. Solo para eso. ¿Le importaré?¿O solo me considera una amiga? Es imposible que me considere amiga. Me he negado a conocerle, ¿por qué?¿Por qué he sido tan tonta? ¿Estaba nerviosa? No. Un chico no me pone nerviosa tan fácilmente. Quizás porque Ilenia ligaba con él, y él le hacía caso. Y luego venía detrás mía. Se cree el mejor y más guapo. No. Simplemente lo es.

Abie y Aly, corren lo más rápido posible hacia la carretera principal. Con la esperanza de encontrar un taxi vacío, que las pueda llevar a tiempo al hospital.
-Abie, ¿cómo están?-pregunta Aly, cuando ya han cogido un taxi express.
-Aly, muy graves. Y... y...-la chica morena no puede evitar llorar y tartamudear.- ¡Una de ellas ha muerto!
-¿¡Qué!?¿¡Cuál de ellas!?
-Dicen que la piloto... como me han llamado nada más saber lo del accidente. No han tenido tiempo de reconocer quien es quien... O no me lo han querido decir.
Se abrazan, llorando.

Al llegar al hospital. Abie no hace más que correr hacia recepción, pidiendo información sobre su madre y la madre de Aly. Corren hacia el ascensor, al ver que tarda mucho, deciden subir por las escaleras. Alguna que otra vez tropiezan, pero se levantan al instante.
Son sus madres, las quieres, y se nota mucho.
Ellas, preguntan a todos los médicos y enfermos, sobre sus madres. En que habitación están y cómo.
Uno de ellos, un señor con bata blanca, de esos que llevan los que trabajan allí. Por fin les da algún dato.
-Señoritas, una de ellas ha fallecido.
-¿Cuál?-preguntan ambas a la vez, sollozando.
-Se llama Lawren Treims.
Lo único que puede hacer Abie, es caerse al suelo, sentarse. Arrastrarse hasta la pared, ensuciándose los pantalones, que es lo de menos. Llorando.
-España. Famoso. Discusión. Abrazo. Coche. Muerta. ... Culpa mía.- susurra Abie, con la cabeza entre las piernas flexionadas. Llorando aún más.
-¿Cómo está mi madre, doctor?
-¿Amy? Ha sufrido un golpe muy fuerte en la cabeza. La están intentando revivir.
-¿Revivir?¿¡Está muerta!?
-No del todo. A cada minuto, late una vez su corazón. Pero se está debilitando.
Aly pone los ojos en blanco, nota como su corazón de salta un par de latidos. Ya no puede ni llorar.
Se acerca a su amiga, poniéndose de cuclillas al lado suya.
-Vamos Abie. Siéntate conmigo en la silla.
Pero Abie, no reacciona.
-España. Famoso. Discusión. Abrazo. Coche. Muerta. ... Culpa mía.-vuelve a repetir, y lo repite una y otra vez. No se cansa, no se da por vencida. Como si pudiese volver al pasado, y arreglarlo todo.

La policía llega, entran en el edificio, apuntando con las armas. Todos los paprazzis escondidos, salen de su escondite, con las manos en alto.
-¿Qué pasa aquí?-pregunta un oficial.
Uno de los paparazzis señala la habitación. Todas las personas  con trajes de uniforme, y armas, entran por la puerta.
-¿Quién nos ha llamado?
El policía que atendió a Harry, le reconoció.
-Señor, son ingleses.
-¿Hay alguien aquí que hable bien el inglés?
Un policía levanta la mano. Habla con Ilenia, mientras otros dos policías desatan a Cynthia y a Harry.
-Está usted detenida.
-¿Por qué?
-Por secuestro.
Interrogan a Cynthia, que por fin está libre y a salvo. Y también a Harry, que tiene la nariz sangrando.
Harry acompaña a Cynthia, a hablar con los profesores con los que vino a España. Les cuenta lo que ha pasado, y la dejan volver a casa. Volver a Londres, junto a Harry.
En el avión, que Harry paga. Cynthia se queda dormida. Y cuando faltan un cuarto de hora para aterrizar. El beso que Harry le da a la mejilla de Cynthia, la despierta.
-Mm... Hola. ¿Qué tal? Bueno, que pregunta más tonta. Oye, que muchas gracias por venir, y por salvarme.
-No te he salvado...
-Si que lo has hecho. Gracias a ti, que has traido el botón conectado con la policía, les he podido llamar.
-¿Y los paparazzi?
-Se los han llevado detenidos. Cómplices de un secuestro.

Los chicos llegan al hospital, al piso cinco, donde están las chicas. Liam también está, le han avisado. Han cancelado la entrevista, están muy ocupados y sin cabeza para eso.
Niall se acerca en su silla de rueda, al lugar dónde Abie sigue sentada con la cabeza entre las piernas.
-Abie. ¿Cómo estás?
-España. Famoso. Discusión. Abrazo. Coche. Muerta. ... Culpa mía.
-¿Cómo?
-España. Famoso. Discusión. Abrazo. Coche. Muerta. ... Culpa mía.
Niall se gira, y le pregunta a Aly todo lo sucedido. Niall vuelve a dirigirse a Abie.
-No es culpa tuya. No te atormentes. Es cosa del destino.
Abie levanta la cabeza, y se levanta del suelo. Le mira, a los ojos. El chico le sonríe. Ella no se inmuta. Solo cierra los ojos, medita.
-Es verdad. No es culpa mía.-dice, volviendo al mundo.- ¡Es tú culpa!-dice, gritando, sacando el odio, y dolor que lleva dentro.
-¿Mío?
-Si no te hubiera conocido, nada de esto hubiera sucedido.
-Pero Abie...
Ella sale corriendo. ¿Hacia dónde? La nada. El único lugar donde estaría sola.
A Niall, se le escapa una lágrima. Que nace en su ojo izquierdo, recorre su mejilla, inclinándose hacia la nariz, y muriendo en sus labios. Donde él, se acuerda que la besó. Por última vez, y probablemente, para siempre.
Abie sigue corriendo y gritando unas palabras.
-¡Te odio Niall Horan!¡Te odio!

CAPITULO 15

-Hola Abie, ¿Abie? ¡Abie!

Un chico, de pelo negro, muy negro. Con ojos grandes y brillantes, azules como el cielo, con ropa no muy ajustada, pero tan poco ancha. Ve a Abie correr escaleras abajo, se asombra, y continúa andando.

-¡Rayan!-Aly corre a abrazarle, llorando.-La madre de Abie ha muerto... ¡Está muerta!

-Lo vi en las noticias, vine lo más rápido posible.

-Ejem... ¿quién es, Aly?

-A, Zayn, este es Ryan, el mejor amigo de Abie y mío. Desde que empecé a hablar. Aunque él ya sabía, me saca dos años.

-Encantado.-le saluda Zayn, sacudiendo la mano a Ryan.

-Igualmente. ¿Es tú novia?-le pregunta.

-Eh, si.-Aly se pone al lado de Zayn, le coge de la mano, y las levanta un  poco.- ¿Ves?

Ryan cierra el puño disimuladamente. Aly no ve ese gesto, pero Zayn si. Y le mira, matándole con sus ojos.

-Si las miradas matasen...-susurra el chico de ojos azules.

-¿Qué?-pregunta Aly, girándose para atrás, para verle. Ya que está caminando de la mano de su novio, hacia las sillas azules. Donde Liam y Louis, intentan consolar a Niall.

Harry invita a Cynthia a tomar algo en alguna cafetería o restaurante. Ella acepta.

Varias preguntas pasan por la cabeza de la chica. ¿Qué te pasa?¿Por qué ahora aceptas salir con un famoso, casi desconocido?

Mientras ella pensaba, se queda mirando la pequeña televisión que había en esa pequeña cafetería rústica. Cuando oye los nombres: Amy y Lawren. Junto con el anuncio de un accidente.

-Llévame al hospital.

-¿Cómo?

-¡Harry, por favor, es muy urgente!

Abie cuando sale del hospital, deja de correr. En las aceras de las preciosas calles de Londres, va dando saltitos. 'No puedo pisar, las líneas. Moriría. Como mi madre. Todo es culpa mía.' Piensa ella, dando un saltito más grande, para no pisar el azulejo roto.

La chica morena, empieza a cantar, sin ninguna melodía que la acompañe. Canta canciones inventadas. Algunas tristes, sobre muerte. Y otras alegres, sobre su madre y los momentos pasados junto a ella.

Los versos riman. Las notas varían, entre graves y agudas, algunas llegan a un extremo inimaginable. Y ella, sin pensarlo, sigue saltando, como una niña pequeña, acompañada de su madre. 'Mamá', vuelve a pensar. Y es lo único que le pasa por su mente. Ahora blanca, vacía y muy dolorida.

-Mamita, mi querida mamá.

Vuelve conmigo, y abrázame una vez más.

La vida es cruel, y te tuve que fastidiar,

antes de que te vayas, y no vuelvas jamás.

Pero espérame allí, mamá,

porque pronto me verás llegar.

Te lo prometo mamá,

nunca más te haré enfadar.

La melodía de esta, canción, que por lo visto, Abie no para de cantar. Conmueve a todos los que llegan a oírla. Haciendo imaginarse a todos, lo sucedido, y hacerles llorar.

-Mamita, mi querida mamá.

Te lo ruego, no me dejes,

no aguantaría una ida más.

La idea de que te has ido, me hace llorar.

¿No ves cómo me dejas cuando te vas?

¿No tienes compasión por tu hija,

que queriendo y no queriendo,

contigo el cielo va a alcanzar?

Un señor, no muy viejo, pero tampoco joven, barbilla negra y bigote gris. Para a Abie en seco. Ella no se inmuta, para los pies, pero su muy agradable voz, sigue sonando.

-Mamita, mi querida mamá.

La gente me rodea, y no me deja de mirar.

Me creen loca, loca de atar.

Pero lo que no saben, mi querida mamá.

Que los locos son ellos,

que no te han podido llegar a amar.

Cae al suelo, sentada. Observando a la gente que la aplaude, por esa medio canción, medio poesía.

-Mamita, mi querida mamá.

¿Ves cómo me lanzan dinero,

creyendo que con eso me van a ayudar?

Mamita, vuelve conmigo,

y no te vuelvas a marchar.

Necesito que me mires a los ojos,

y me digas una sola vez más:

¡Te quiero hija! Eres mi felicidad.

 El hombre se pone de cuclillas junto a ella. Diciendo algo que la muchacha no llega a oír. 'Este si está loco', piensa ella. '¿Qué quiere de mí?¿Acaso no ven que lo estoy pasando fatal?'

-España. Famoso. Discusión. Abrazo. Coche. Muerta. ... Culpa mía.-susurra otra vez.

-¿Qué?-pregunta el del bigote gris y barba negra.

-¡España!¡Famoso!¡Discusión!¡Abrazo!¡Coche!¡Muerta!...¡Culpa mía!-grita, sobresaltando a todos los presentes. Decenas de personas, presenciando la escena. Algunos murmurando, y otros simplemente observando.

En un abrir y cerrar de ojos. La gente cambia de pensar. Y se  amontonan todos, pisándose y empujándose. Preguntado y gritando, '¿qué es lo que la pasa?'

Abie no sabe como reaccionar. Les mira, desconcertada. '¿Tengo que sonreír?¿O qué? Mamá siempre decía que en situaciones así, hay que correr. Oh mamita... mi querida mamá...' Hace lo que piensa. Antes de que nadie la pudiera detener. Salta y corre, con cuidado de no pisar las líneas del azulejo.

-Mamita, mi querida mamá.

¿Crees que debería pisarlas,

Para contigo poderme encontrar?

A lo mejor sigues enfadada,

y no me quieres ni mirar.

¿O me quieres responder,

y no me puedes hablar?

Ya nada importa, mamá.

Recuerda, nunca te voy a olvidar.

Y que tú, en mi corazón, siempre estarás.

Un joven, bueno, mejor muchacho. Empieza a aplaudir. '¿Por qué?' Se pregunta Abie. '¿Qué he hecho?¿Acaso parezco un payaso o algo por el estilo?' No se lo puede creer. Alguien la está aplaudiendo por algo que no sabe.

-Cantas muy bien.

'¿Cantar?¿He cantado? Yo solo pienso en mi mamá... Yo no e cantado. ¿Por qué me está mintiendo un desconocido?¿No pueden ser sinceros conmigo por una vez en la vida? No soy mala... Yo no... No tengo la culpa. No. La culpa es de Niall. Rubio de pacotilla. ¿Por qué te tuviste que meter en mi vida? No tendrías que haberlo hecho. No tan dentro de mi corazón. Entraste como si no pasara nada, como si fueras bueno. ¿Y ahora qué? Eres el culpable de la muerte de mi madre. Esto nunca, ¡nunca te lo perdonaré!'

-¿Te pasa algo?-pregunta el muchacho, casi joven. Castaño, con ojos oscuros. Según la vista de Abie, que no es muy buena, porque lleva lentillas. Le parece que son negros. Pregunta, pasando con la mano por delante de los ojos en blanco de Abie, repetidas veces.

Ella, no responde. No es capaz de pensar con claridad. O si. Pero no puede relacionar el mundo, con 'su' mundo. ¿Qué tiene de distinto? Muchas cosas. Para el mundo, la muerte de Lawren, es una simple muerte más. Para el mundo de Abie, es la muerte de su madre. Y eso lo explica todo.

-¿Crees qué podrá soportarlo?

-Es mayorcita. Tendrá que hacerlo. Sino, yo estaré para apoyarla.

-¿Y ahora por qué no estás con ella?

-Ryan. ¿Qué es lo que no entiendes? Estoy aquí, esperando respuestas sobre mi madre. ¿Morirá o no? Intento despejar mi mente de ese tema, hablando de otro. Pero siempre acabas preguntándome lo mismo, con distintas palabras. Déjalo ya, ¿vale?

-Pero Aly...

-¡Te ha dicho que la dejes en paz!¿Estás sordo?

-Vale. Famosito.

El 'piropo', no le gusta nada a Zayn. Lo que hace que se enfurezca aún más, pero antes eran celos. Ahora, una especie de negación contra él, casi odio. Y le da un puñetazo en la mejilla. Haciendo que la nariz, también dañada, sangre.

El taxi que llegan a coger Harry y Cynthia, es el mismo que ha llevado a Aly y a Abie al hospital. Un taxi express.

-Al hospital de la zona oeste, por favor.

-Vaya, hoy mucha gente tiene como destino el hospital. ¿Alguna muerte?

-Pues sí. Y corra por favor.

El conductor asiente, avergonzado por su comentario. Arranca aquel vehículo amarillo, destino al hospital de la zona oeste.

Cynthia manosea un poco el asiento.

-¿Sangre?

-Una chica que fue también para el hospital. Tenía las rodillas sangrando.

Los dos muchachos, el héroe y la rescatada, asienten asombrados y perplejos. 'Sangre', piensan ambos.

Liam se va del hospital. La había dejado esperando, le había prometido volver.

-Hola. ¿Cómo está todo?

-Bueno...-responde Liam, bajando la cabeza.-La madre de Abie ha muerto. Y la de Aly la están reanimando.

-Oh, cuánto lo siento. En cuanto se tranquilice todo un poco. Iré a darle el pésame a Abie. Su madre me caía muy bien. Y creo que yo a ella también.

-Estoy seguro de ello.

Se besan.

-¿No me vas a responder?

'¿Qué haces aquí?¿Qué quieres de mi? Déjame en paz. ¿No ves lo mucho que estoy sufriendo?' Las preguntas carcomen la cabeza de Abie. Y su única reacción, es ponerse las manos en los oídos, y cantar. Cantar alto, para que todos la oigan. Y lleguen a amar a su madre. Pero nunca como ella la ama.

-Mamita, mi querida mamá.

Dile que me deje en paz ya.

Los recuerdos no me dejan de atosigar.

Quiero, pero no puedo olvidar.

¿Debería hacerlo, o dejarlo estar?

No comprendo, mamá.

Ayúdame a elegir esta decisión,

que es muy difícil de tomar.

'Solo puedo hablar cantando. Lo amo. Mi madre está actuando. ¿O solo es mi instinto?¿Y Niall?¿Cómo está él?¿Le amo o le odio?

-Mamá, por última vez te pido.

Ayúdame a elegir la decisión que debo tomar.

Para con ella, mi camino continuar.

Eres mi guía, de aquí y para allá.

Eres mi estrella fugaz.

'¿Por qué me haces esto, Abie? Sabes que no soy culpable. Pero...¿Y si lo fuera? Soy el culpable, ¿de verdad lo soy? Nunca me imaginé que pudiera ser un asesino.'

-Soy un asesino.

-¡Niall!¡No lo eres! No te atormentes.

-No, Louis. Piénsalo. Si nunca la hubiera conocido. No me habría subido a su habitación. No me hubiera caído y ella no se habría escapado de su viaje a España. Por tanto, ellas no hubieran discutido. Y no hubiera muerto. ¿Te das cuenta Louis? Soy un asesino.

-No Niall, no es así...

-Vete Louis. No quiero que estés conmigo. A lo mejor, llego a matarte a ti también.

-¿Qué estás diciendo? Estás enloqueciendo.

-¡Vete!¡Vete de aquí! Podría alterar el futuro, tu destino. ¡Podrías morir!

Louis, en un instinto. Le aprieta un nervio del cuello de Niall. Lo que hace que este se quede inconsciente.

-Calladito, estás más bonito. Aunque estás bonito de cualquier forma.

Los guardias del hospital, separan a Zayn y a Ryan. Les salvan de una buena pelea, ¿o mala? Ya nunca se sabrá.

-¿Pero qué hacíais?¡Sois un par de críos! Yo aquí preocupada por mi madre, que se debate entre la vida y la muerte. Y vosotros, ¿vosotros qué?¿Os peleáis? Eso demuestra lo mucho que me apreciáis.-responde Aly a lo sucedido. Indignada, y algo enfadada. Preocupada, sobre todo.

-Aly, cariño. Lo siento.-la besa.

-Vale. Pero dejadlo ya, ¿vale? Quiero que seáis amigos. Mi novio, y mi...¿hermano? Si. Creo que eres lo más parecido a un hermano.

Zayn le da la mano a Ryan, en forma de reconciliación. Mirándole, como diciendo, 'Gané, date por vencido.'

'¿Hermano? Oh Aly, si tu supieras...' piensa Ryan. Entristecido, pero fingiendo una sonrisa. Que Aly cree, pero Zayn sabe que es falsa.

-¿Señorita Reeve?

-Aquí estoy señor, ¿y mi madre? ¿La han salvado?-Aly llora, sin saber si de felicidad o de tristeza

El doctor mira a Aly, luego a Zayn y a Ryan, y después, vuelve a fijar su mirada en la rubia, hija de Reeve.

-Lo siento mucho. Hicimos todo lo que estuvo en nuestras manos. Ha fallecido.

Aly le mira. ‘No puede estar pasando. No. Ella no puede morir’. Piensa.

Se desmaya. Y lo único que recuerda antes de golpearse contra el duro y frío suelo del hospital, es el abrazo y el beso que le dio a su madre antes de irse tras Abie. El último beso y abrazo.

El muchacho, vamos a llamarlo acompañante de Abie, le coge la mano de esta. Ella, le sigue. Sin darse cuenta de lo que hace. Sin pensarlo. Solo canta, pero ya no sobre su madre. Ahora, sobre su futuro. Pensando en ella. Solo, y exclusivamente en ella.

Después de caminar unos cuantos minutos. Abie gira la cabeza hacia la izquierda. Ve el camino de arena donde estaba con Aly cuando le dieron la noticia. Suelta la mano del chico, y corre hacia el camino. Hasta llegar a una parte, donde en la arena, están dibujadas dos largas líneas, muy juntas. Formando un muy estrecho camino, que Abie sigue, intentando no salirse, y también intentando no perder el equilibrio.

-Es una niña pequeña, en un cuerpo de adolescente mayor. Un bello cuerpo, adornado con su hermosa carita, con rostro de dolor.

CAPITULO 16

Abie mira por la ventanilla, asombrada y perpleja. Nunca había visto una tormenta desde un avión. ¿Desde cuándo los rayos aparte de bajar, suben por encima de las nubes? Esto es demasiado. Piensa ella.

Pero a pesar de todas las turbulencias, retrasos y todo lo malo sucedido, Abie sigue mirando por aquella ventanilla pequeña y redonda, con ojos luminosos,  grandes y llenos de nuevas ilusiones.

'¿Qué me deparará el futuro?¿La vida me recompensará por lo sucedido últimamente? Espero que el destino no se olvide de mí… Aunque cada uno se lo construye, a veces con ayuda de otras personas. ¿Quién es esa persona que me ha ayudado a llegar hasta donde estoy? Ni si quiera le he preguntado su nombre. ¿Será mi ángel? No existen. O por lo menos, prefiero pensar que a partir de ahora, y desde que murió, mi ángel es mi mamita querida. Mi ángel: Mamá Lawren.'

Los pensamientos y preguntas, bombardean cada milímetro del ser que Abie todavía controla, aunque no por mucho tiempo.

-El vuelo llegará a su fin en unos pocos minutos.-la voz grave que suena por cada uno de los muchos megáfonos colocados en distintas partes de aquel complejo avión, sobresaltan a la muchacha.

-Por fin.-susurra.

Aly se pregunta donde estará su amiga. No había hablado con ella desde que se fue del hospital. ¿Estará bien?¿La habrá pasado algo? Son unos ejemplos de preguntas que interrumpen los pensamientos de Aly, que está tumbada en una camilla del hospital, por su anterior desmayo.

-¿Estás mejor?

-¿Zayn? ¿Pero tú no tenías hoy un concierto?

-Si cariño. Lo tuve ayer.

-¿Ayer?

-Te durmieron. Llevas un día dormida.

El silencio hace que Zayn piense. Aly también.

'¿Seré yo la culpable de la muerte de Lawren y mi madre? No me puedo permitir pensar así, no como Abie. Tengo que ser fuerte, por Abie, por mí, incluso por Zayn y Niall. Quizá por todo el mundo, todo aquel que haya conocido y querido a su madre y a la mía. Mi padre. ' Cada cosa, por muy pequeña que sea, hace que Aly no pare de pensar así. Quizá, haya renacido una nueva Aly, más madura, inteligente y responsable, con dolor pero ocultándolo bastante.

-¿Por qué no funcionan?-se pregunta Abie, aunque sin querer, lo dice en voz alta.

Una señora algo ancha, baja y con una voz grave de hombre, intenta responder a Abie un par de veces, pero al ver que la joven no la presta atención, desiste de la idea de responder a una desconocida.

Ella, la pequeña morena, observa a una niña pequeña que se sube en el ascensor junto a su madre y su hermano pequeño, que duerme en el carrito. Luego mira sus pies, que suben por las escaleras mecánicas paradas, y se pregunta por qué sus pies suben cada escalón, si ella no ha dado la orden.

Recoge su maleta, después de que un señor la empujara y ni siquiera la pidiera disculpas. Resopla. Cruza dos grandes puertas de cristal que intentan cerrarse, pero con el paso de todas las personas no  pueden. Observa a todas las personas que esperan a sus parientes, amigos, o pareja. Ella se pregunta si alguien también la espera a ella, ¿pero quién? Es algo absurdo. Mira los carteles que la gente sostiene entre sus dedos gordos o delgados, y los lee.

-¿Señorita Donovan?-lee Abie, preguntando y gritando, sorprendida al leer un cartel.

-¿Es usted?

-¿Quién eres?

-Soy el primo de Robert.

-Espera, ¿quién?-se queda pensando.-  Espera otra vez. No será uno castaño, con ojos oscuros, y no muy alto, ¿no?

-Tal como lo dices si, si es. ¿Eres la futura cantante?

-¿Futura cantante?

-Soy Robert.- el chico castaño con ojos oscuros, al igual que su primo, mira a Abie, que se asombra.- Si, se lo que vas a preguntar, a nuestros padres les gustó mucho el nombre 'Robert', y nos lo puso a los dos.

-¿Y qué  haces aquí?

-Soy el... como lo decís vosotros 'El hombre de los focos', de un programa llamado 'America´s Talents'. ¿Lo conoces?

-Si. Pero sigo sin entender quien eres.

-Verás. Mi primo me pidió que te llevara a ese concurso, que cantes, y que te hagas famosa.

-¿Bromeas? No soy buena. Jamás seré famosa. Es una gran pérdida de tiempo.

-No lo creo. Por como describió tu voz, tienes un gran don. Además de ser muy atractiva.

-Oh muchas gracias.- responde Abie al cumplido, agachándo la cabeza y enrojeciéndose un poco.- Tú también lo eres.

-Eso si que no me lo creo. ¿Tienes hambre?

-Si.

El chico acaricia con su mano la espalda de Abie, y la empuja ligeramente hacia un restaurante del aeropuerto.

-Así nos conocemos mejor.

Abie asiente. Aunque en lo único que piensa, es en Niall. 'Rubio de pacotilla. Aunque... es mi rubio de pacotilla, guapo, con talento, y muy cariñoso. '

-¿Qué pasa?¿Quieres?-pregunta Ryan irónico.

-Eres tonto. Sabes que no me gusta.

-Vale, vale. Pero sabes que yo adoro las setas a la plancha.

Los mejores amigos, por fin tienen una tarde juntos, para hablar y desahogarse. Ahora que Abie se ha ido, y Aly no sabe nada de ella. Esta última necesita desahogarse con alguien.

-¿Y Zayn?Ahora que es tu novio, ¿no es él tu mejor amigo?

-Si. No. Bueno, no sé. Te tengo a ti, y también a él. A él le quiero como novio, en cambio a ti, te quiero como hermano. Es complicado hablar de Zayn con Zayn, ¿no crees?

-Yo le ví muy creidito.

-No es creido. Es muy modesto, que lo sepas. Solo que sabe que es guapo.

-¿Lo sabe o se lo cree?

-Lo sabe. Por que lo es, y mucho. No es como  otros, que se lo creen y no lo son.

-¿Y yo soy de esos 'otros'?

-Supongo que no.

-¿Supones?

-¿Qué quieres que te diga? Te veo con ojos de hermana. Nunca te veré como las demás, que ven toda la hermosura que da un hombre.

-Si, hermana... No quisiera que lo fueras...-susurra él.

-¿Qué?

Ryan niega suavamente con la cabeza, como diciendo 'Nada, déjalo. '

Zayn, habla por Twitter, intentando responder a las millones de menciones que les mandas sus fans. 'Directioners' se llaman algunas de ellas.

-¿Qué pasa tío?

-Twitteo.

-Si. Vale. Pero yo creo que lo haces para olvidar, ¿no?

-Si. No soporto la idea de que Aly siga teniendo sus 'tardes' con Ryan. Se que es su mejor amigo. Pero soy celoso, y mucho.

-Lo sé. Pero deberías saber que ahora que Abie no está, necesita desahogarse.

-¿Y no puede hacerlo conmigo?

-Ella me ha dicho, que no puede hablar contigo de ti.

-¿De mi? ¿Tanto le gusto?

-También me ha dicho que cree, que para ella, eres más que un novio pasajero.

-Creo que no lo soy. Yo también siento lo mismo sobre ella. ¿Y qué más te ha dicho?

-Nada.-Zayn mira a su compañero de banda, diciendo con la mirada que sabe que no es verdad.- Bueno sí. Pero no puedo decir nada más.

El joven castaño, le da un par de palmaditas a su amigo, y se va en silencio de la habitación.

-¡El 'Daddy Direction' se va, y no me va a decir nada más!-grita Zayn- ¿Sabías que te odio?

Zayn se ríe por dentro. Y sigue respondiendo a sus fans, ahora con más ánimo, y decidido a responder a cuantas más menciones, mejor.

Abie se despierta, dispuesta a empezar de cero. Olvidarse de todo y de todos. Y también,a aceptar la propuesta de participar en 'America´s Talent', e intentar triunfar con la música.

-¿Qué canción cantaré?-pregunta la morena, entrando en la cocina y sentándose en la silla de enfrente de el Robert americano.

-¿Vas a cantar?-ella asiente.- Bien, entonces tendrás que elegir una canción que te guste, y que puedas cantar muy bien. No tiene que ser muy fácil, para sorprender aún más al jurado.

-Bien.

-¿Tienes novio?

-No lo sé.-él se asombra.- Es decir, me enfadé mucho con él. Y me fuí. Conocí al Robert británico, y aquí me ves. En EEUU.

-Entonces no habéis cortado oficialmente.

-Creo que no.

-¿Y a ti te gustaría que lo hubieras hecho?

-No lo sé. Por una parte no, y por tra sí. No quiero salir con un asesino.

Robert la pregunta lo sucedido. Abie se lo cuenta todo, sin inventarse nada. Claro que lo cuenta desde su punto de vista. Pero Robert intenta ponerse en el pellejo de Niall, le comprende en cierto modo.

-No creo que él sea el culpable.

-Yo si.

-Recapacita. Ponte en su lugar. ¿Te gustaría que tu novio te llamase asesina? ¿Y más de su madre? No es justo Abie. Ni para él, ni para ti.

El doctor le hace unas radiografías que tardan. Niall no pregunta, no responde, no hace ni un mísero comentario. Tiene la mente en blanco, junto con un intenso dolor en las partes heridas. 'Estoy así por tí. Huesos rotos, y también el corazón. Mente dolida, intentando olvidar, sabiendo que no vas a volver y ni siquiera lo intentarás, ¿o sí? Por como estabas no lo creo. ' Es lo único que Niall llega a pensar.

El doctor le pregunta algunas cosas al muchacho. Él, sigue sin responder. Preguntándose una y otra vez, el por qué de la reacción de Niall. Desistiendo de la idea de ser una especie de asesino, cosa que seguro, no es y ni será.

-Comprendo que te duela, pero aguanta. No tienes que sufrir un shock por esto. Son solo huesos, se curarán.

-No es por los huesos. Ojalá no se me curen.

-¿Por qué no?

-¿O si? Mejor que se curen. Así la busco. Necesito aclararlo todo. ¿Encuánto tiempo se curarán?

-Pues cómo ya ha pasado casi un mes. Las costillas están recuperadas, aunque sentirás un leve dolor. Por suerte no se te rompieron. Te vamos a poner una escayola solo hasta la rodilla. Irás en muletas, ya que tu brazo solo estaba un poco fracturado, y ya han sanado. En un mes aproximadamente, estarás como nuevo. Vivito y coleando.

-Es genial Niall.-Harry intenta animarle. Niall, sonríe.

Las semanas pasan, y la preparación para con Abie, avanza mucho. Está lista para participar y haber que pasa. Solo falta un día. Menos de 24 horas.

La relación de Aly y Zayn mejora, más de lo que estaba. El chico, empieza a aceptar a Ryan, y se están haciendo muy amigos.

Niall está practicamente recuperado. Ya le han quitado la escayola, por tanto solo necesita una pequeña ayuda de una muleta.

Harry y Cynthia se están volviendo muy amigos. Aunque lo que sienten el uno por el otro, es más que amistad.

Liam, tan misterioso como siempre,  hacen que sus salidas a escondidas, lo hagan más interesante aún.

Y Louis, sigue igual. Ayudando a sus amigos en lo que puede, con sus bromas ayuda mucho.

Aly, cada día, intenta llamar al número de Abie, o por lo menos al número que ella tiene regustrado. Sin respuesta alguna. No han hablado, no hablan y ambas creen que no lo harán. Abie piensa que no va a conseguir nada con el programa de talentos americano. Y Aly, no tiene una mísera idea de lo que está viviendo, pensando y sintiendo su aún, mejor amiga.

-Yo digo... ¡Si! Te lo mereces, tienes talento, eres guapa, y te siento triste. No te quiero entristecer más. Sonríe, ¿me lo prometes?

-Muchisimas gracias. Si, lo prometo.

-Bueno, pareces lista. Aparte de que tienes una voz dulce y que cautiva la atención de muchos, creo que deberías forzarla más. Yo, personalmente, creo que has empezado a cantar hace poco.

-Así es. Me descubrió un chico en Londres, y bueno...

-Aunque me da igual. Llegarás lejos, bonita. ¡Si!

Abie llora, de felicidad. Es lo único bueno que le ha pasado en mucho tiempo.

-¿Y tú, Simon?¿Qué opinas sobre esta chiquilla?

-Tiene talento. Se nota, y mucho, la verdad. Y como ha opinado aquí mi compañero, necesitas mucha práctica. Pero te apoyo, y te ayudaré a conseguir fama. Palabra de honor.-dice, poniéndo la mano derecha en alto y enseñando su palma a Abie y luego al resto de jurado y público.

La chica, coloca la mano que Simon Cowell. Este señor, jurado de mútiples programas de talentos, es muy conocido,por haber creado el famoso grupo británico, One Direction.

-Juro poner todo, absolutamente todo de mi parte para que mi voz mejore, y consiga fama.

La sala aplaude, emocionada.

Después de un mes de duro trabajo. Todos los días, casi a cada hora, el single de Abie suena en la radio y televisión. El videoclip acaba de salir, y se está espandiendo por todo América, todavía no ha salido de este continente.

La canción es buena, pegadiza,moderna y sencilla. Compuesta por Robert, que aparte de ser 'El Hombre de los Focos', adora la música y tiene un gran don. Cantada por Abie, que también protagoniza el videoclip.

-Vas a cantar un dúo.

-¿Con quién?

-Un cantante de una banda, que cantará solo contigo.

-Vale. ¿Cuando y qué canción?

-Mañana. Tu canción, aunque creo que él no sabe quien eres.

-¿No?

-Puede que de nombre si, pero de verte no. Como te has cambiado el nombre, la gente ya no te reconoce.

-¿Él me conocía de antes?

-Creo que no. No lo sé.-Robert responde a todas las preguntas que le pone Abie, aunque son demadiadas.

Abie, ya ha cantado en varios conciertos sola. Ahora, la toca en un dúo. ¿Será difícil para ella? Tiene un precioso don, y lo está utilizando.  Lo haré lo mejor que sé. ' Se repite una y otra vez, en su cabeza.

Harry y Cynthia han quedado, pero como  amigos. Cenan juntos, riéndose y pasándolo lo mejor que saben.

-¿A dónde vamos?

-¿Un cine?

-¿Otra vez?

-Pues nosé...

-Vamos a un parque muy bonito, en el que hice una firma de discos hace un par de semanas. Y ahora que es de noche, será más precioso aún.

Los dos jóvenes, caminan hacia el parque, que no está muy lejos.

-Oh Harry, es precioso.

-Te lo dije.

Cynthia y Harry, tumbados en la húmeda hierba del parque, miran las brillantes estrellas.

-¿Y qué tal con tu novio?

-¿Qué novio? Sabes que no tengo.

-¿Tan bonita y sin novio? No lo puedo permitir.

-¿Y qué vas a hacer?

El chico no responde. Se levanta rápidamente, y tapa la vista de Cynthia besándola, y haciendo que ella cierre los ojos. Se gustan, y ambos lo saben.

Abie, nerviosa por el concierto de hoy, se tumba lo mejor que puede en los tres asientos traseros, intentando descansar. Pero en vez de eso, se limita a observar las cosas y los seres que se ven a través de horizontales, finas y negras líneas dibujadas en el cristal trasero del coche.

-¿Nerviosa?

-Bastante.

-Todo saldrá bien.

-Estoy segura de ello. Solo que... no sé con quién voy a cantar.

-Es un cantante conocido en todo el mundo. Y a lo mejor te pongo nerviosa con esto, pero... te verá todo el mundo.

-¿¡Todo el mundo!? No puedo hacerlo.

-Pero lo harás.

Llegan a su destino, San Francisco. Y después de que la maquillen, la vistan, la hagan una corta sesión de fotos, la vuelvan a maquillar de distinta manera y cambiarla de ropa. Está esperando en el escenario al cantante que la acompañará esa noche en su canción.

En el momento en el que el muchacho sube al escenario, ambos se miran de pies a cabeza o de cabeza a pies.  Después de un silencio de cinco minutos, por parte de los cantantes y un minúsculo barullo por parte del público, uno de ellos dice algo.

-¿¡A-Ab-Abie!?

Aly, sentada en la húmeda hierba, oye un ruido muy fuerte proveniente de una radio que enciende un niño.

-Mario, apága eso.- grita Aly.

Mario, niega con la cabeza, subiendo el volumen de la radio.

-Pero profesora, esta noche canta mi primo y una chica americana en un dúo.

-¿Quién es tu primo?

-Niall Horan. No creo que le conozcas.

-Pues si. Le conozco, y en persona.

-¿Enserio?

-Claro, pero son  cosas personales.

Aly le deja seguir escuchando la canción. Y aprovecha para escuchar el concierto.

'Esa voz...¿Por qué me suena tanto?' Se pregunta ella.

-Mario, ¿cómo se llama la chica?

-Abbigail Jhonson.

'¿Abbigail Jhonson? Abbigail...A Abie siempre la ha gustado ese nombre, porque es muy parecido al suyo. Pero es imposible que sea ella, nunca a hecho ningún ejercicio con su voz, y sobretodo,que yo sepa no se ha ido a América. Pero por otro lado... no he hablado con ella desde entonces.' Aly se vuelve a quedar pensando.

-¿Por qué la has apagado?

-Profe, ya se ha acabado la canción.

-Muy buen concierto Abie, perdón, Abbigail.

-¿Muy buen concierto?¿A qué viene todo esto, Robert? Pensé que podía confiar en ti.

-¿A qué te refieres?¿Qué he hecho?
-¿Y todavía lo preguntas?

-Te refieres a lo de Niall, ¿no? Pensé que sería una gran oportunidad para tí.

-¿Qué oportunidad? Sabes perfectamente que no le quería volver a ver en mi vida.

-Lo sé. Pero no es justo para él, y tú todavía lo quieres.

-No es verdad.

-Claro que lo es. Me has hablado de él, mil y una veces, y la forma en la que hablas de él, es igual que la forma en la que habla mi cuñada de mi hermano.

-No le quiero.

-Le amas.

-No Robert. Le odio, es el asesino de mi madre.

-No lo es. La culpa es del destino, no es suya, y tampoco tuya.

Abie se da la vuelta y empieza a andar en dirección a su camerino. Pero Robert es ágil, la coge del brazo, le da la vuelta. Ella, se suelta como puede, forcejeando mucho, y corre hacia su camerino, ahora con éxito.

Aly siente que alguien la empuja ligeramete por la espalda. Es Dayana, una chica morena, con el pelo ondulado y largo, no muy alta pero tampoco baja, ojos verdes claro, y muy guapa.

-Dime Dayana.

-¿Puedes venir a la cabaña un momento?

La profesora de aquel campamento, se levanta y junto con la muchacha de 14 años, se sientan en una de las literas viejas y oxidadas de la cabaña, también vieja y llamada 'Cuca'.

-Verás. Tú haces los grupos, ¿no?

-Si.

-Y mañana se vuelven a repartir los niños en grupos.

-¿Y qué quieres que haga por ti, cariño?

-Bueno, se que tú vives muy cerca de Mario. Y me gustaría que le hablaras de mi y tal. Y sobretodo, ¿me puedes poner en su grupo mañana? Y no te puedes negar a hacerme este favor. Tu madre y la mía eran muy amigas.

-Oh cielo, claro que si. ¿Te gusta Mario? Si, se que lo eran.
-Si. Es guapísimo, y gracioso, y amable, y siempe me acaricia el pelo.

-Entonces está hecho. Haré que le gustes, y que salgais juntos, ¿eh?

-¡Aly, eres la mejor!-la pequeña, abraza a Aly. Se conocen desde hace muchos años. Dayana considera a Aly una hermana mayor, y Aly considera a Dayana una hermana pequeña.

La puerta del camerino de Abie, se cierra de golpe. Abie se asusta, se da la vuelta, y sin inmutarse, suelta unas palabras.

-Sabía que este día llegaría. Pero no me lo imaginaba así.

-¿Tú no sabías que íbamos a cantar?

-¿Crees que hubiera querido? Lo he hecho porque nos han obligado. Te sigo odiando. Y este sentimiento nunca va a cambiar.

-Abie, lo sé, y lo acepto. Pero, ¿por qué te has cambiado el nombre?

-No quería que nadie supiera de mi exstencia. Empezar de cero.

-Podrías haber elegido un nombre totalmente distinto al tuyo real.

-Lo he hecho porque a mi madre siempre le ha gustado este nombre, pero a mi padre le parecía muy largo, y por eso me pusieron este.

Liam y su novia, están hablando sobre si los chicos aceptarán su relación, ya que los compañeros de trabajo del chico, no la conocen a ella, a Catherine.

La chica de pelo negro, que le llega hasta los hombros y es liso, pero con un tono de piel blanquezino, siempre se está peleando con Ilenia. Se conocen de toda la vida, pero tienen gustos y pensamientos totalmente distintos. Catherine cuida el medioambiente, es vegetariana y odia el maquillaje. En cambio Ilenia, solo usa cosas de piel y abrigos de pelo de animales verdaderos, usa  mucho maquillaje, y es de lo más carnívora.

-Abie, vuelve a Londres, vuelve conmigo.

-¿Y olvidarlo todo? No Niall, no puedo.

-¿Por qué?¿Qué es lo que te retiene aquí?

-Quiero empezar de cero, ser cantante y vivir feliz.

-No es suficiente motivo Abie. Dame un buen motivo, que me haga desistir de la idea de llevarte de vuelta a Londres, a la fuerza si es necesario.

-Pues...nosé...bueno...verás Niall...es que...

-¿Es que qué?

-Estoy prometida con Robert...-responde Abie, sin saber si ha hecho bien o mal, y cogiéndo de la mano al acoplado en la habitación.

CAPITULO 17

Aly, responde a la llamada telefónica, que interrumpe la conversación entre Dayana y ella. Aunque la expresión de la cara de 'la hermana mayor', no le gusta nada a 'la hermana pequeña'.
Después de colgar. La mala noticia, hace que Aly se quede muda. '¿Cómo se lo digo?Se lo que se sufre. Y encima para ella es doble. ¿Con quién se va a quedar? Y sobre todo. ¿Con que palabras se lo digo?' Son preguntas muy difíciles de contestar. Pero la pequeña insiste en saber lo ocurrido.
-¿Es sobre mí? Venga Aly, tengo derecho a saberlo.
La rubia medio castaña, sigue callada, buscando las palabras adecuadas; también las respuestas.
-Vale. Haber, no te asustes. Es decir, tranquílizate desde ahora, siéntate.-Dayana obedece.-Es difícil, lo sé. Lo superarás con el tiempo. Mm... yo te puedo cuidar. Y como soy mayor de edad, te puedo adoptar...
-Aly, ¿de qué hablas?¡¿Adoptar?! ¿Qué pasa con mis padres?-las dolorosas lágrimas recorren las blancas mejillas de la frágil y pequeña muchacha.
La dieciochoañera, la abraza. Dayana ya sabe lo que ha pasado, solo con ver los ojos llorosos de su amiga.

La puerta se cierra de golpe. Niall por fin está en su casa, pero muy enfadado y triste; celoso. Los chicos le saludan, el no habla. '¿Qué habrá pasado?' Se preguntan todos. Se miran entre ellos, no encuentran respuestas. Saben que Niall ha cantado con Abie, pero, no saben que Niall la ha perdido para siempre, o eso cree él.

-No tenías que haberle mentido.
-No tenía opción.
-Si. Volver con él.
-Nunca. ¿Y dónde está esa amiga tuya?
Una chica de pelo muy rizado, largo y marrón oscuro; con los ojos del mismo color que su pelo, y grandes; delgada, alta y fina en la cara, toca el hombro derecho de Abie. 'Hola', mima la nueva incorporada. 'Hei', responde Abie, también mimando.
Robert las presenta. Margharet, la ricitos de carbón, es una amiga del supuesto prometido  de Abie. Y Abie, solo es la supuesta prometida de Robert, y la nueva cantante de moda.
Se sientan, hablan de su vida y los problemas que Abie ha tenido ultimamente; de Niall. Robert le cuenta a su amiga que Abie todavía le ama, y que se ha inventado que están prometidos. Abie niega con la cabeza, convirtiendo a Robert en un mentiroso.

Los padres de Ilenia, entregan todo el dinero, para sacara a su hija de la cárcel. Ella, solo dice 'Gracias', y se va directa al coche. No habla. Llega a casa, come, se ducha y coge su teléfono negro, que tiene una pegatina de Harry Styles.
-¿Si?
-He vuelto. He planeado mi venganza. Has creído que te has librado de mí. No lo has conseguido, no lo conseguirás.
-¿Quién eres?
El número de Ilenia, marca como 'Número oculto' en la pantalla del celular del cantante. Ella cuelga, él se desconcierta.
Ilenia ríe. Una risa malvada se oye en su habitación. La muchacha coge un cuaderno y su estuche, saca un boli, el boli que Cynthia le prestó a Ilenia el último día, y que esta última no le devolvió.
Escribe una palabra, luego otra, hasta llegar a la última palabra de la frase, que escribe con delicadeza y odio, cerrando los dientes y haciendo fuerza con ellos. 'Cynthia', es la última palabra. La frase es 'Lo primero, acabar con Cynthia.'

Harry llama a su novia. La pregunta si está bien. Le cuenta la misteriosa llamada. Ella no se sorprende, sabe quien ha sido. Le advierte al ricitos, y planean otra cita. Hablan, bromean, ríen, sonríen, se dicen cuanto se quieren. Al final cuelga Cynthia. Harry la vuelve a llamar, solo para decirle que la hecha de menos. De repente suena el timbre del chalet donde vive Cynthia.
-¡¿Qué haces aquí?!¿Te has vuelto loco?
-Pero por ti.-la besa.
-Mis padres están en casa. No saben que estoy contigo.
-Ya es hora de que lo sepan.
Harry coge de la mano a su novia. La lleva por el pasillo, hasta el salón. Donde tumbado cómodamente, los padres de la muchacha, cambian de canal la televisión, con el mando a distancia. Cierran la televisión.
Cynthia presenta a su novio delante de sus padres. Les cuenta lo sucedido en España, algo de idea tenían, no con lujo de detalles. Se toman un café, hablan, se aceptan. Ahora, los jóvenes enamorados, pueden vivir su amor sin ocultarlo.
-¿Y tus fans?
-Tendrán que aceptarte, ¿que remedio?
-Cortar.
-¿Contigo? Jamás.
Se vuelven a besar, ahora delante de los 'nuevos' suegros del ricitos de la banda.

Los días pasan. Abie y Margy, como la llama la morenita cantante, se están haciendo muy amigas. Se cuentan todo, incluso se han comprado una casa juntas. Margharet siempre pregunta sobre Aly, como es, de físico y personalidad. Abie, le cuenta todo.
Ahora están en un columpio viejo y oxidado, hablan de 'sus amores.'
-¿Y desde cuando estás enamorada de Robert?
-Desde que le conocí. Pero nunca se lo he dicho.
-Margy, deberías hacerlo, de verdad.
-No Abie. El te quiere a ti.
-¿Pero qué dices?
Discuten, Abie no se lo cree; Margy no tiene argumentos para continuar.
Aparece Robert, estropeándolo todo. Pone preguntas tontas, mientras ofrece a las chicas, un menú de comida rápida o basura; es lo mismo. Comen, ahora sentados en un sofá viejo que hay en la terraza de una casa vieja. Todo está conjuntado; todo es viejo.

El entierro de los padres de Dayana, ya ha sido, y muy doloroso, por cierto. Aly está decidida a adoptar a la pequeña, son 'hermanas', no la puede abandonar a su suerte. No tiene otros familiares, aparte de tíos y primos segundos o terceros, llega incluso a cuartos; demasiado lejanos.
Cuando Zayn se entera, hace que las cosas vayan más rápido. Ayuda a Aly a vender la casa en la que se crió, le recuerda a su madre y su padre muertos, demasiado dolor.
El pequeño chalet en el que se han mudado la nueva parejita de hermanas, es pequeña y acogedora. Color carne por fuera, pero por dentro, cada habitación tiene un color. El salón una gama naranja, la habitación de Dayana rosa y negra, y la habitación de Aly es blanca con bombillas de distintos colores en la cabecera de la cama, igual que la habitación que los chicos de One Direction le ofrecieron en su casa.
'¿Cómo seguirá Abie?¿Se habrá enterado sobre lo que pasó con los padres de Dayana? A lo mejor tiene novio. Pero, ¿y Niall? Tengo que hablar con ella.'
Aly se decide, coge su móvil y marca el número de su amiga. Un par de sonidos chillones, suenan antes de que la voz metálica de una mujer, le informara a a rubia, que está llamando al extranjero. '¿Extranjero?Oh Abie, ¿dónde te has ido?'
-¿Si?
-¿Ab-Abie?
-¿¡Aly!?¡Qué alegría volver a oírte! ¿Qué tal todo? ¿Zayn y Ryan?
-Bueno, te resumo. Los padres de Dayana han muerto, la he adoptado. Zayn y Ryan se están haciedo amigos, aunque Zayn creo que está algo celoso de que tenga mis tardes con Ryan. Liam está con Caty. Cynthia con Harry. Louis solterito y bromeando. Y Niall, bueno, triste, peor que nunca.
-Entonces está todo más o menos bien. Lo siento por los padres de la peque. Aquí, he conocido a Robert, y a su amiga Margy, se llama Margharet, están conmigo ahora. Me he hecho cantante. Y he cantado con Niall. Le odio más que nunca, y le he dicho que estoy prometida con Robert para que me deje en paz. ¿Me guardarás el secreto?
-¿Abie?¿Cantante?¿Supuestamente prometida?¿¡Qué le odias más que nunca!? No te creo. Te conozco, es imposible. Te guardaré el secreto, siempre lo he hecho. Espero que te vaya todo bien...
-Pronto nos veremos, te lo juro. Ahora tengo que irme. Adiós fea, te quiero.
-Y yo a ti. Adiós.

Dayana, tiene su primera 'cita' con Mario. Han quedado para tomarse algo y dar una vuelta por la ciudad.
Aly aprovecha y queda con su famoso novio, Zayn. Van de compras, entran en muchas tiendas. Se compran un conjunto vaqueros y sudadera iguales, claro que uno de chica, y otro de chico. Aly, piensa una cosa, una frase, y se la dice a Zayn. 'Tú eres mi BFF doble.' Es la frase.
-¿Cómo que doble?
-Verás. Son dos. Uno: 'Best Friend Forever'. Y dos: 'Boy Friend Forever.' ¿Lo has pillado?
Zayn la besa, sonriendo. Lo que hace un efecto de beso extraño. Lo cual hace que los dos se rían a más no poder en medio de la tienda.
-Me encantas.
Ella sonríe satisfecha. Sabía que su novio diría algo parecido.
Se cogen de la mano, salen de la tienda, y mirando escaparates, observan la ternura y el amor que se tiene, reflejado en esos cristales, algunos sucios y otros limpios, que hacen de espejo en este momento.
Llegan a un lugar muy bonito de Londres. London Eye.
-¿Entramos?
Él asiente, con un poco de miedo. Pero siente el calor que desprende la mano de la persona que tiene al lado, y se tranquiliza.
La cola no es muy larga, entran rápido. Las transparentes cabinas, se desplazan lentamente, haciendo un efecto aún más bonito. +
Es un día soleado, por lo que cada cristal, sea de un coche, una farola, la ventana de una casa, o las gafas de alguien, se ven iluminados por el precioso sol, ya poniente, que se decanta por el oeste, esta noche, como todas.
Los jóvenes sienten como la cabina se para.
-¿Qué pasa?
-Tranquila.
Están arriba del todo. El miedo empieza a notarse en el rostro de Aly, incluso en el de Zayn.
La gran noria,empieza a girar hacia el lado de donde ha venido.
-Habrán cambiado el sentido de la noria.
Después de recorres cinco minutos. Vuelve a parar la noria entera. Y otra vez, empieza a girar hacia el sentido contrario.
-¡Me estoy asustando!
Se abrazan. Zayn, en un pequeño movimiento, besa a su pequeñita novia. Un gesto que tranquiliza a ambos.
Al final, el recorrido original, llega a su fin. Aly y Zayn quieren tomar algo en un restaurante. Pero el más cercano es Nando´s.
Se sientan. Piden la comida. Y disfrutan de la comida preferida de Niall y Abie.
-Es el restaurante de Niall.
-Y el de Abie.
-Tienen tanto en común.
-Si. Son tal para cual.
-Abie es muy injusta. Y ahora tiene prometido.
-Sé que lo es, pero, intenta comprenderla. Ha sido todo muy doloroso. ¿Prometido?-Aly se queda pensando unos segundos. No le gusta mentir a su novio.-Verás, cariño, Niall piensa que tiene prometido. Sé que tú también. Pero, ¿juras guardarme el secreto?
-Si. Lo juro.
-En realidad no están prometidos.

Margy le cuenta a Abie, que Robert le ha comentado a ella, que Aly y Abie han tenido un accidente. Abie intenta explicárselo, lo mejor que puede. Habla sobre como su amiga despertó, y sus casi primeras palabras fueron 'Este accidente no acabará conmigo.' Le cuenta que se desmayó y que por eso conocieron a Zayn y los demás. Y aparte, que Niall y Abie se conocieron por casualidad, en su restaurante favorito.
-¿Por qué se desmayó?
-Tuvo problemas con los ojos, veía filos de colores.
La ricitos de carbón, sigue preguntando sobre lo sucedido. Abie, al final le dice lo que significan. Margy silencia, algo raro en ella, ya que es muy habladora. Piensa en los filos de colores, y su supuesto significado.
'¿Y si no fuera ese su significado en realidad?' Se pregunta Margharet. La preciosa, y habladora Margharet Dreemjak.

CAPITULO 18

'Soy una chica de 18 años que busca la felicidad. Aspiro a ser cantante. Un chico famoso, guapo, tierno, lleno de dulzura, con una sonrisa increíble, que adora comer y que le acaricien el pelo, sufre y creo que por mi culpa. Estoy supuestamente prometida con un chico al que considero un amigo. Mi mejor amiga está a miles de kilómetros de mí. Mi padre está planeando su venganza contra el mundo. Mi madre está muerta, y sabrá dios quién la mató. No ha sido una accidente, y yo averiguaré quien fue. ¿Niall Horan? Puede que no. Posiblemente no. Estoy segura de que no. No puedo volver con él. No después de lo que le he dicho y hecho. ¿Me perdonará? Seguramente no. ¿Le amo? Probablemente si.' Piensa Abie.

-Bien chicos, y chicas. Vamos a aterrizar en breve. Abróchense los cinturones de seguridad.-La voz del co-piloto, deja sin habla a todos los chicos y chicas, que se están poniendo los cinturones, del avión privado de los chicos de One Direction, que viajan junto a sus novias y Dayana.
Aterrizan en el aeropuerto de Madrid, España. Los famosos cantantes, van a sacar un nuevo álbum, y viajan a España para presentarlo. ¿Tendrán éxito?
Un famoso programa español, llamado 'El Hormiguero',los ha invitado una noche de verano. Los 5 chicos, y las 4 chicas que les acompañan, irán. Pero planean un magnífico plan, para gastar una broma a las Directioners españolas. ¿Ellas se enfadarán o se llevarán una preciosa sorpresa?
A la hora de bajar del avión, las chicas van por separado y los chicos por otro, para no levantar sospechas de nada.
El hotel en el que se alojarán también es distinto. Se instalan. Todo es precioso.
-No hay ninguna fan fuera del hotel.
Esto sorprende a todos los cantantes, que en todos los países que habían visitado, habían tenido el problema de las fans fuera del hotel.
-No no querrán lo suficiente.
-O nos quieren tanto, que no quieren molestarnos.
De todos modos, a ellos no les incomoda eso. Más bien, les relaja.
Pasa una noche, y parte del día siguiente. Las '20:46' marca el reloj de Liam.
-A prepararse. Esta noche la sorpresa.
-O el desastre.
-Depende.

Abie acepta la petición que Margy le lleva haciendo desde hace semanas. Irse a su casa a dormir. Y aunque sea por la mañana, pasarán el día juntas.
Se visten en pijama para estar cómodas. Se maquillan. Se desmaquillan.Se pintan con pinturas de cera blanda en la cara. Abie la ha pintado a Margy de tipo gótica payasa. Y Margy a Abie, con los labios azules, frente rosa y ojos blancos. 
Abie se mira en el espejo, se ríe de ella misma. Luego, se acuerda del día en el que Niall escaló su ventana y la besó con los labios azules. Cuando se cayó y fue al hospital. Cuando fue a su casa y le cuidó. Cuando su madre murió.
Margy la nota pensativa. Y la pregunta que es lo que pasa. Ella sabía todo. Excepto el detalle de los labios azules. Un mísero detalle, incluso el más insignificante para todo el mundo. Excepto para Niall y Abie. Son los labios azules, de su primer beso.
Se quitan esos pegotes de pintura rara que tienen por toda la cara. Están listas para ir a un circo y que se hagan millonarias allí.
Se ríen entre ellas. Al final, los restos de pinturas ya no son visibles, de lejos. Pero de cerca, son los más gracioso que se puede ver. Las chicas no cayeron en la cuenta, de que esas pinturas no se tienen que poner en la piel, porque no se quita.
Después de una buena ducha individual, Abie quiere pintarle las uñas a Margy, del mismo color que se las pintaba a su aún mejor amiga Aly; rojas con una pequeña flor blanca en la esquina derecha superior de cada pequeña uña de los finos dedos de Margharet.
Pero Margy, se los pinta a Abie de un color simple, neutro e inclinado ligeramente hacia dolor; el negro.
Quieren secarse las uñas muy rápido, y utilizan el ventilador para ayudarlas, y lo consiguen.
-¿Quieres ver un programada español que trae famosos que pasan por ahí?-Le pregunta Margy a Abie. Y esta se le queda mirando, preguntándose como conoce ella un programa español.-Se lo que te estás preguntando. Pero mi padre es estado unidense, pero mi madre no.Es española, y yo sé español.¿Te lo pongo?
Abie asiente.
Margharet enciende su televisión, conecta el satélite español, y busca el canal en el que emiten el programa. Y busca la aplicación que tiene para poner los subtítulos en inglés, para que Abie pueda entender todo.
La morena de mechas rubias, se dedica a acariciar un suave y gigantesco peluche oso, con sus uñas negras. Haciendo un movimiento, como si le quisiera arrancar los cortos pelillos pelirrojos sobresaliente de ese conjunto de lana. El mismo movimiento que le hacia a Niall cuando le acariciaba el pelo.
-¡One Direction!-Grita el presentador del programa español 'El Hormiguero.'
-¿¡Qué!?-Gritan Margy y Abie a la vez.
Se acercan a la televisión, para observarlo todo desde más cerca. Abie cuenta a los chicos, se da cuenta de que Niall no está. '¿Dónde estás, rubio de pacotilla?' Se pregunta la morena de pacotilla.

El murmullo de las fans, que hoy hacen de publico, aumenta de volumen, haciendo así, que ya no se oiga el presentador.
Los chicos se sientan. Las novias y Dayana se ríen. Pero, ahora ya no son 4 chicas haciéndose pasar por simple público Directioner, ahora son 5 chicas.
-Tenía entendido que eráis cinco chicos. ¿Uno de vosotros se ha separado?¿Y ha sido el rubio?
-No se ha separado. Solamente, que hemos tenido un problema, y no ha podido venir.
-Que pena. Bueno, en otra ocasión será. Tomad asiento.
-Espere.-Traduce una voz de chica, intentando traducir bien, lo que Zayn quiere decir.-Antes de empezar con lo que tenéis preparado, queremos anunciar algo.
-Adelante.
Louis carraspea un poco fuerte, para que las chicas lo noten y salgan al escenario.
-¿Pero qué...?
Aly coge de la mano a la chica que tiene al lado, algo tapada, y con pelo de plástico.
Llegan al escenario, 4 chicas, menos Dayana. Tres de ellas besan a sus respectivos novios, y la otra, se puede decir otro, abraza al chico del grupo restante.
-¿Qué está pasando aquí?
-Verás Pablo, estás son nuestras novias.
-Pero yo no.-La chica de pelo de plástico, se quita el sombrero, la chaqueta, la peluca y las gafas de sol. Las tira al público. El público grita como loco.-Soy Niall Horan, el rubio de la banda. Me disfracé de chica, porque como ni Louis ni yo tenemos novia, no queríamos sentirnos diferentes. Y así no nos sentiríamos solos, cuando el resto de los chicos presentase a sus novias.

El suspiro que el público y Abie hacen, hace reír a Margy, que se imaginaba algo así.
Abie empieza a llorar, pero de alegría. Puede ver a sus amigas felices, y volver a ver a su 'amor', Niall, el rubio de pacotilla, propiedad de Abie Donovan, ahora conocida como Abbigail Jhonson.
-Tú podrías estar entre esas novias, ¿sabes?
-No. ¿Y entonces Louis qué?
-Estás aceptando que podrías serlo.
-No. Estoy diciendo que Niall debería buscarse una chica que lo quiera.
-Ya la tiene. Y eres tú. No lo niegues Abie.Mírate, estas llorando.
Abie no contesta. Sigue mirando el programa. Se ríe, de vez en cuando, muy seguido. Pablo les hace preguntas serias y bromas a los chicos, pero ellos siempre responden en modo de broma. Unos experimentos sorprenden a los chicos. Como por ejemplo, hacer un cono con tres chicles sin masticar, ponerlo en una mesa, y poner encima de él, sin apretar, una sandía. El cono penetrará en la sandía, si lo has hecho bien, la sandía no sufrirá; si lo haces mal, la sandía de partirá.
Dan un pequeño concierto de una sola canción, y les dice al publico que mire debajo de sus asientos. Para la sorpresa de todas las chicas, dentro de las bolsas de regalo, hay unas chapas con las fotos de los chicos, un cuaderno de ellos con sus bolígrafos, las pulseras y el colgante, y lo mejor de todo, una entrada para el próximo concierto sin fecha fija que harán en España la próxima vez que vengan.
La cámara enfoca a Niall, él se percata y señala la cámara mimando unas palabras con sus preciosos y rosados labios, 'Abie Te Amo'. Así, tal cual, en Español mismo.
Abie, desde casi la otra parte del planeta, pone sus dos manos encima del corazón. También mimando, 'Niall Te Amo'. Ella también en Español.
Margy lo ve todo.
-¿Ves?
-¿El qué?
-Le amas. Lo acabas de decir.
-Déjame en paz, ¿quieres? Si. Le amo. Más que a mi vida. Me equivoqué. Él no me perdonará nunca.
-Pero Abie, te acaba de decir que te ama, ¡y en Español!

A la salida del edificio. Una gran, gigantesca multitud de fans y demás, esperan la ansiada salida de One Direction y sus novias.
Aly se vuelve a marear al ver tantas luces, y encima de noche, junto con las luces de los coches, farolas...
Pero lo que ve, no es una persona de cada color. Sino un gran filo, del mismo color, que rodea toda esa multitud de Directioners y fans, que no son lo mismo. Pero otras personas, que van por la calle tranquilamente, tiene un color diferente cada uno.
-Mira cariño, todas están unidas en un gran sentimiento.-ella asiente.
'Sentimientos. ¿Y si fuera eso lo que realmente indican los filos? Todas ellas tienen el mismo sentimiento de alegría, amor, y orgullo. ¿Y si los filos de colores indicasen sentimientos en vez de personalidades?'

CAPITULO 19

Él, baja del avión, y llega al gigantesco pasillo de aquel gigantesco aeropuerto, junto con su maleta de mano y nada más. Y también junto con sus cuatro mejores amigos.

Abie está nerviosa. Se muerde las uñas negras, y piensa en que le volverá a ver, y en qué le va a responder cuando Niall le pregunte sobre su relación con Robert.
-Creo que le diré la verdad.-murmura, en soledad.
Se pregunta si se enfadará, y cree que si lo hará. 
Se levanta de su cama, y decide cambiarse con ropa normal, ya que lleva puesto su pijama. Es por la mañana, y lo primero que ha hecho al despertarse ha sido pensar en él. Es un gesto de enamorada, pero Abie todavía no quiere reconocérselo a otras persona que no sea Margy, y Aly si de verdad la descubre.
Intenta desayunar su famoso gigantesco vaso de leche con muchas galletas, pero se da cuenta de que no puede sin Aly, la hecha muchísimo de menos.
La entrevista es esta tarde, y el concierto la semana que viene, pero no de ella, sino de él.
Las horas pasan, y Abie, cada minuto está más nerviosa. ¿Cómo se sentirá al verle? No le hablará, hablará con los demás evitándole a él. Y es lo único que llega a asegurarse para sí misma. Desde luego, las cosas que decide Abie para con Niall, cada vez son más absurdas y sin ninguna lógica para una mujer que tiene guardado una entrada sorpresa, que era de One Direction, con mucho cariño, y al que nunca llegó a asistir.

Se viste lo más agradable posible. Va hacia la puerta de la habitación del hotel en el que se aloja, y Harry se ofrece voluntario para llevarle al lugar donde se hará la entrevista con Niall y con Abie, sobre su anterior concierto.
Llega al estudio donde se realizará ese conjunto de preguntas, y la ve. Empieza a sudar, y nota que ella le evita la mirada, parece nerviosa. El color rosado invade la cara de ambos, que ni poniéndoles todo el maquillaje que Cynthia puede llegar a poner en sus 'maquilla sorpresa', lo taparía.
-Hola.
-Asesino.
Niall se entristece, y a Abie le duele. ¿Por qué ha dicho eso? Se sorprende, ella no quería, sin embargo, le salió. Es algo que no puede remediar más que con un 'lo siento' que nunca saldrá de la boca de esa chica orgullosa y nerviosa que está sentándose en la silla que la entrevistadora le asigna.
-Hola, Abbigail, Niall, ¿qué tal todo?
-Bien, está todo muy bien.-responden al unisono. Se miran, y se sonríen.
Las preguntan comienzan, pero los dos se sienten incómodos respondiendo las mentiras que planearon para las preguntas sobre cómo se llevaron al conocerse después del concierto. Dicen que quedaron un par de veces, pero simplemente son amigos y nada más. A los dos les duele, porque en ese momento se acuerdan del momento en el que Niall se quedó dormido en las piernas de Abie, y ella le acariciaba suavemente el pelo, en un movimiento como si le quisiera arrancar esas cosas que salían de la piel, llamado pelo teñido, en el caso de él.
-¿Y no surgió nada más, aparte de amistad?
Se quedan un par de segundos callados, pero al final responden que no.
-Ella ya tiene novio.
-No lo sabía.
Abie no sabe que responder, y no se puede quedar callada, todo aparecería en alguna revista de cotilleos o incluso en la tele o internet.
No sabe si contar la verdad o simplemente asentir y decir que le ama y está genial con su novio. Se decanta por la segunda opción y fingir una hermosa relación entre Robert y ella.
Es todo muy confuso para todos, incluso para la entrevistadora, que nota cierta tensión entre ello, y no le gusta.
-Es complicado, nada más llegar a un país, triunfar con un par de canciones, y tener ya una relación seria y estable, pero me gusta y no lo cambiaría por nada del mundo.
-¿Enserio?¿Ni por un pasado que te gustaría revivir con alguien especial?-pregunta Niall, nervioso y esperando una respuesta afirmativa, pero sabe que no va a serlo.
-No sé que responder. La verdad, estoy confundida.
-¿Entonces sigues sintiendo algo por la persona a la que a lo mejor quisiste en la relación que tuviste con él?
-Aquí la entrevistadora es ella, no tú. Por favor, Leyre, quiero que seas tú la que ponga las preguntas.-mira desafiante a Niall, y le sonríe a Leyre, la chica rubia también teñida, que sentada en esa cómoda silla blanca, nota la desesperación y necesidad que siente Niall por las respuestas que Abie está pendiente en responderle.
-Yo quiero saber la respuesta de la pregunta que te ha hecho él.
Gotas de agua llenan las cavidades de los ojos de Abie.
-Simplemente, no puedo responder a eso aquí y ahora.
Sale de allí, corriendo y soltando lágrimas que Niall ve. Él se levanta, y  se despide así de la entrevistadora no muy atractiva, dejando la entrevista en mitad de su proceso. 

Los mensajes que a cada hora le llegan a Aly, la preocupan. Le llega anónimo, y esa persona, sabe cosas que nadie sabe, aparte de ella y Johan.
'Johan. Claro, seguro que es él.'
El nuevo mensaje, dice que dentro de una semana y 5 días, en la plaza 'La urgencia', se volverán a ver.
Decide no contarle nada de esto a Zayn, ya que se preocuparía o se pondría muy celoso.
Se tumba en el sofá, y se acuerda de la primera vez que conoció a Zayn. Lo borde que ella fue con él, y él no se dio por vencido, claro que las circunstancias eran una escusa para el mal humor de  Aly, y la ha ayudado mucho.

Una semana, exactamente, ha pasado desde el día de la entrevista llorosa, por parte de de Abie, o mejor dicho, Abbigail.
Y hoy es el día del concierto que One Direction, hará por no se cuánta vez en ese país. Pero este concierto será diferente, ya que Abie, va a asistir.
Las personas que harán de público esa noche, están tomando asiento, o por lo menos ocupando el lugar en el que estarán y en el que disfrutarán de la presencia y las voces en directo de sus ídolos.
Aunque Abie, no quiere ponerse en las primeras filas, y se pone en la últimas. ¿El por qué? Le da vergüenza ver otra vez a Niall, después de lo sucedido la semana pasada.
Las canciones suenan, y ella se alegra de oírles. Pero por desgracia, ese momento ha acabado.
Las fanáticas llegan a la zona donde están los camerinos de los chicos, pero los guardias allí presentes, no las dejan pasar.
-Dejadme pasar.
-¿Por qué?
-Por que les conozco, y tengo que hablar con ellos.
Abie ha venido al concierto con un propósito, hablar con Zayn y los demás, y preguntarles que tal están todas sus amigas, y todo Londres.
Ella grita el nombre de todos los chicos de la banda, excepto Niall. Y justamente él es el que reconoce su voz de entre la multitud y se asoma por la puerta.
Niall hace un gesto, y los guardias la dejan pasar. Entra en el camerino y no ve a nadie, exceptuando al rubiales.
-¿Dónde están todos?
-Se han ido a firmar autógrafos.
-¿Y tú?
-Estoy ocupado.
Una chica, con el pelo castaño oscuro, y cortado por los hombros, sale del baño, y se presente con el nombre de Hillary.
Abie también se presenta, pero cómo ex-novia de Niall.
Niall se ríe, e intenta hacer que se lleven bien. Pero Abie quiere salir, y no volver a ver a ese chico en toda su vida. Está celosa y está si que se lo reconoce a ella misma.'¿Por qué está con una chica asolas en su camerino? Tendría que ser yo, y no ella. Encima es guapa, seguramente se gusten y estén saliendo. No tendría que haber hecho la tontería de llamarle asesino de mi madre. He hecho fatal, y nadie sabe cuánto me arrepiento. Ahora estoy intentado huir y él no me deja.'
-Déjame salir.
-¿Qué te pasa? 
Al final lo logra. Sale y se va corriendo de ese lugar. Llega a la parada de autobús. Se sienta indignada, y esperando al autobús que la llevará a su apartamento. 
Saca la entrada del concierto de One Direction al que no acudió, y que le habría entregado a Niall, cuando le hubiera dicho que todavía le ama, y que su noviazgo con Robert es mentira. Cuando intentaría arreglarlo todo.

Los siguientes 5 días pasan, y Aly llega al lugar citado.
Un chico de pelo castaño claro, y con una radiante sonrisa, está apoyado en la puerta abierta de un coche negro brillante bajo el sol.
Aly se acerca a él, y le da dos besos. Hablan sobre todo lo ocurrido estos últimos meses. Aly le cuenta su relación con Zayn, y a él no le entusiasma esa idea, que se diga.
-Te quiero para mí, Ayleen.
Y en un segundo, el chico la besa, y ella intenta soltarse pero no puede,  Johan la está obligando.
Un chico moreno, y bastante alto, le da un puñetazo en la espalda, y Johan suelta a Aly.
-¿¡Zayn!?¿Qué haces aquí?
-Él me ha citado, por lo visto no pierdes el tiempo cuando me voy a dar conciertos, ¿no es así?
-No es lo que piensas, cariño.
-No, solo es lo que veo, querida.

CAPITULO 20

Zayn se va por donde ha venido, y Aly corre tras él. Johan se dedica simplemente a reír, con esa risa maléfica con la que se ríe siempre que consigue lo que se propone, que en este caso es destruir la relación entre Zayn y Aly y quedarse con ella.
Pero ella no está decidida a permitirlo. Frena a su aún novio, y le cuenta todo lo que pasó, y como ocurrió. Que estaba preocupada y que no sabía que hacer con tanto mensaje que recibía, que la citó en aquel sitio y que al parecer, a él también.
Zayn decide creerla y perdonarla, ya que él también ha sido engañado. Se besan en forma de disculpa, por parte de ambos, y sonríen cuando dejan de hacerlo.
Johan lo observa todo desde su coche, y no puede creer lo que está viendo.
-Admítelo amigo, la has perdido, y no tiene remedio.-le dice su fiel amigo Marco, un chico rubio bajito que sería una gran persona, si no idolatrara a Johan, la peor de las personas.

Abie se acuesta en su gran cama, se pone los cascos blancos y rosas, y pone la aplicación de música en modo aleatorio, así se sorprende. Pero la canción que empieza a sonar, es una canción que Niall canta en solitario: Teenage Dream, de Katy Perry.
Apaga las luces y empieza a girar en la cama.
También rompe a llorar, porque se acuerda de él. Llora por ser tan tonta como para no haberle perdonado en esa equivocación que tuvo ella. Por no estar durmiendo ahora mismo junto a él. Por no estar en su preciado país y ciudad, intentando encontrar al verdadero asesino de su madre y de la de Aly. Por estar en una supuesta relación con Robert, que por cierto no ha visto desde hace tiempo. Por no decirle a Niall, cuanto le necesita, y cuanto le ama.

Niall se va a dormir. Sigue en Estados Unidos, junto con Harry, Liam y Louis. Está cansado por el día duro que ha tenido con las fans hoy.
'Se despierta tarde, casi a la hora de comer.
Desayuna y se va a ver un poco la televisión.Pero Liam avisa a todos de que la comida del hotel ya ha llegado. Y los chicos van a disfrutar de su exquisito manjar.
Se cambian de ropa, algo informales. Niall tiene algo pendiente, y lo va a resolver. Se dirige hacia la casa de Abie, que ha comprado recientemente, junto con su gran amiga Margy. 
Llama a la puerta, y mientras espera a que le habran, observa que hay una ambulancia en la calle,para frente al jardín de la casa  la que está entrando.
-¿Qué pasa?
Entra del todo, y ve a Abie tendida en el sofá, junto con muchos médicos, que la intentan revivir.
-Un paro cardíaco.
-Pero, ¿cómo?
Margy le explica lo sucedido, Niall no se lo puede creer.
Abie reacciona, todos se alegran. Niall se pone de rodillas al lado  suya y coge las manos de la chica, besándolas.
Abie llega a proonunciar unas palabras antes de que Niall, Margy y demás, rompan a llorar, por la gran pérdida.
-Niall, nunca olvides esto: Te amo, desde que te conocí no paré de pensar en ti. Nunca lo hice, ni lo haré. E
Dile a Aly que la quiero mucho, muchísimo, y que sea feliz con Zayn, los dos se lo merecen. Eres el amor de mi vida. El príncipe azul de nuestra historia. Encuentra a una chica que te ame como yo lo hago, y sé feliz junto a ella. Habla a tus futuros hijos bien de mí, sino me las pagarás. Y una cosa más, quiero que sepas que... te... amo.'
Niall se despierta sobresaltado, gritando de dolor y llorando por esa pérdida ficticia. Con sus gritos y sustos, despierta a los demás, con los que comparte habitación. Les explica lo que ha soñado, con la peor de las pesadillas.
-La perdía tío, para siempre y sin remedio.
-Ve a su casa, y esta vez no te encontrarás con ninguna ambulancia. Arréglalo todo, y haz de esta pesadilla, el mejor de los sueños. Ella se lo merece,  y tú, por sufrir tanto los últimos meses.
Niall asiente y los demás chicos aplauden. El precioso consejo de Harry les ha impresionado e incluso emocionado.
Se prepara, y sin desayunar ni nada, sale del hotel en dirección a la casa de Abie, que sabe donde es gracias a Margy.
Llama al timbre, y esta vez no ve una sola ambulancia por los alrededores, y si lo hubiera vito, realmente hubiera enloquecido.
Y no no abre Margharet.
-Si no me respondes a esta duda que tengo, juro que me volveré loco. ¿Me sigues amando, si realmente alguna vez lo hiciste?
Abie no esperaba esta visita. Así que no sabe si asentir o decirle que si.
Ninguna de las dos opciones. Se lanza a sus brazos, lo que pilla por sorpresa a Niall, y se besan más apasionadamente que nunca. Ese beso significa más que un simple 'si', significa su reconciliación, su felicidad y la de la gente que les rodea. 
Se quedan abrazándose después del grandioso y hermoso beso.
Margy, que grababa su videoblog de todas las semanas, al oír el timbre, enfocó la puerta, y ahora tiene todo grabado. La prueba de que se aman, a pesar de haber estado separados tanto tiempo. Porque el verdadero amor, nunca acaba.
-Toma.
Niall lo coge. Es la entrada. Abie lo lleva guardado desde que lo cogió con Aly, aquella tarde en Londres. Nunca llegó a asistir, por las circunstancias, pero el concierto si se realizó.
-¿Te imaginas que hubiera pasado si  hubieras ido? Te hubiera conocido antes de lo de 'Nando´s' y nada de esto hubiera pasado.
-¿Por qué? Nos hubiéramos enamorado antes.
-Me refiero a esta gran separación. Te hubiera visto entre la multitud del concierto, y le habría dicho al primer chico que estuviera al lado mío: La he encontrado, es ella, es mi princesa, la que tanto tiempo he estado esperando. Y hubiera hablado contigo, y hubiera sido muy distinto.
-Pero de esta manera, me he dado cuenta, de lo muchísimo que te amo, y de que realmente ha valido la pena haber conocido al rubio de pacotilla.
Y se vuelven a besar, sonriendo, lo que es una prueba evidente, de que lo que sienten el uno por el otro, es amor, del bueno.

Al final, todos deciden volver a su país natal: Reino Unido, aunque Niall vaya un poco más tarde a Irlanda.
Liam y Caty. Bueno, no resultó. Gustos diferentes, y demasiada infidelidad por parte de Catherine. Nunca ha sido una buena novia, y nunca lo será. Es otra diferencia entre Ilenia y ella. Porque aunque Ilenia sea muy abierta con los chicos y todo eso, cuando ama, ama de verdad, y no con mentiras.
Harry y Cynthia, se ven más seguido y se divierten juntos, en el sentido literal. Después de un par de meses juntos, deciden dar un gran paso en su relación, y mudarse juntos. Vivir felices sin matrimonio, aunque no descartan esa idea.
Aly y Zayn, desde luego no han vuelto a tener esos celos entre ellos. Ryan ha encontrado el verdadero amor, en la dependienta de la caja del supermercado, de la vuelta de la esquina, de su barrio, por supuesto.
Louis sigue buscando a su chica, y Liam también. Y esperarán lo que haga falta para encontrar la perfecta para ellos.
Robert, estaba enamorado de Abie, sinceramente, pero cuando abrió los ojos, y vio lo que tiene ante ellos. Y lo que observó con claridad, fue la radiante sonrisa de Margy, su bondad y personalidad, aparte de su carita de niña pequeña. Ella está enamorada de él, desde hace tiempo. Y Robert, al fin, también se enamoró.
En cuanto a Niall y Abie, son más felices que nunca, se han encontrado y están hechos el uno para el otro. No podían haber elegido mejor cada decisión que ha marcado su vida, para los restos.

-Cariño, ¿cuánto tiempo crees que durará nuestro amor?
-No he esperado tanto tiempo, para estar enamorado solo durante unos pocos años. Yo nunca dejaré de amarte. Porque cuando la muerte quiera separarnos, no lo logrará.-responde Niall, a la pregunta, un tanto absurda, que le hace Abie.
Ella se queda pensando un par de minutos, que se convierten en diez minutos de absoluto silencio.
-Y todavía me pregunto, ¿quién era la chica con la que estabas en el camerino el día que fui a vuestro concierto?
Niall intenta recordar quien era. Y después de otros cinco minutos de silencio, se acuerda.
-Ah, ¿Hillary? Pues, es la hija de Paul. Necesitaba ir al baño y bueno, tenía que dejarla. Y te preguntarás con que estaba ocupado entonces. Pues verás, los chicos estaban con las fans, y les habíamos preparado una sorpresa, y yo tenía que acabarla, ¿comprendes? Y, ¿qué pensaste?¿Qué estábamos juntos?
Abie niega con la cabeza, riéndose. Pero se acuerda lo que realmente pensó sobre esa chica: que era la nueva novia/ligue de Niall, y que él ya se había olvidado de ella. Que sufrió mucho por ese mal entendido, y también se puso muy celosa.

Pero todavía queda algo por resolver, y no será fácil averiguarlo. Porque si Niall no asesino a la madre de Abie y Aly, alguien ha tenido que hacerlo. Nadie sabe con exactitud como ocurrió, pero las dos hijas están dispuestas a averiguarlo. ¿Quién mató a Lawren y Amy?

CAPITULO 21

Ella necesita un respiro. Después de triunfar con su canción, los fans del mundo, la acosan. Y su novio pasa siempre por lo mismo, pero es distinto.
Ella también es algo claustrofóbica, y el tener a tanta gente al lado, la agobia, y a él. Se cogen de la mano, y van a su casa, o más bien la de Abie, que compartirá con Niall un par de días, mientras él se instala en su nuevo apartamento, a no más de un kilómetro de nuevo lugar donde están entrando.
Pero todo es viejo y está sucio.
-¿Lavado de cara?
-A la vieja usanza.
Arrancan todo lo que ven a su paso: sábanas en los muebles, cuadros, libros, ropa... Nada es de ellos, no hay nada allí que les pertenezca, aparte de su propia vida, que no les interesa arrancar.
Los cubos de pintura, diferentes para cada habitación o sitio, son trasladados al sitio en el que se utilizarán, respectivamente.
Las brochas llenas de pintura, se arrastran por las paredes. Desde luego, Abie y Niall no saben pintar paredes, y mucho menos para que queden bien.
Se tiran pintura entre ellos, manchando su delicada ropa, o lo que queda de ella. Se  ríen mucho, disfrutando del momento, de cada segundo que están juntos, ya que ambos saben que no será por mucho tiempo. El pelo esta coloreado, parecen pelucas; tan duras por la pintura ya seca, y coloreada con colores que dan un efecto de plástico.
-Cuando acabemos, llamamos a algún albañil.
-No lo dudes, princesa.
Abie se acuerda de todas las veces que ha llamado a su adorado novio 'asesino', de todas las veces que le ha gritado y mentido. De todas esas veces que ha humillado y despreciado el amor que él todavía le brindaba. De esos ratos en los que los dos se miraban, y se ruborizaban.
Una ligera lágrima, pero cargada de mucho sufrimiento, recorre la mejilla de Abie. Ella no se lo seca, pero intenta ocultarlo. Pero no puede. Niall se le acerca por detrás, la coge por la cintura, y le susurra al oído: 'Ya pasó'. Le da la vuelta a la chica, le seca la lágrima con sus manos pintadas, coloreando así la mejilla aún blanca de Abie, y la besa.

Es difícil saber la sensación que causa Dayana en Mario. Para él son solo amigos, pero ella siente más que eso. Y aunque solo tengan 14 años, y los 15 los cumplan en meses, son muy pequeños para pensar en cosas serias. Porque ni siquiera sus padres lo hacían.
Aunque el quedarse huérfana, ha hecho que Dayana madure muy rápido. Ahora su tutora legal es Aly, y vive con ella. Son como dos hermanas huérfanas y consentidas por el novio sexy de la mayor, Zayn.
Es un sentimiento agradable que te recorre la piel que está alrededor de las uñas de las manos, e incluso de los pies. Es ese sentimiento que incluso  tus labios llegan a sentir, cuando ves al amor de tu vida, o por lo menos ese amor pasajero o duradero, pero no para siempre. Aunque Aly y Zayn, sean tal para cual, todavía queda mucho tiempo, para decidir con quién van a pasar el resto de sus vidas.
Es algo que no se plantean por el momento, ya que son muy jóvenes. Pero saben que crecerán y que el amor que sienten ahora mismo el uno por el otro, nunca se olvidará, aunque haya desaparecido. 
Las circunstancias han sido diferentes en la relación de Abie y Niall, que en la de Aly y Zayn. ¿Por qué? Porque a Aly nunca se le ha pasado por la cabeza en ningún momento que Zayn pudiera ser el asesino de su madre y de su 'tía', por así decirlo.  En cambio, Abie tampoco pensó que Zayn pudiera serlo, pero de Niall si. Se le ocurrió esa idea en el momento en el que le vio llegar escayolado de la cabeza a los pies, y que su madre estaba muerta; mientras ella sufría otra pérdida más. Pero de todos modos, Abie desde que se fue a Estados Unidos, supo que su exnovio no era el culpable, o por lo menos lo sabía muy en el fondo. Lo decía y afirmaba, eso sí, pero no lo pensaba, simplemente intentaba convencerse a ella misma de que sí lo era.
Aún así, Niall no perdió nunca la esperanza de recuperar a esa morena glotona que se le metió por los ojos en el mismo instante en que ella daba vueltas a sí misma intentando buscar un sitio donde sentarse en ese restaurante: el favorito de ambos.
Por supuesto que se amaron entre ellos todo el rato, pero claro que de distinta manera y cantidad.

-Oye cariño - dice Cynthia esperando una reacción del chico que le está rodeando los hombros con la espalda - ¿Ilenia te ha vuelto a molestar?
-Desde que me llamó no, pero estoy preocupado, y no por mí.
-A mí no me hará nada.
-Y estoy seguro de ello. - Cynthia arquea las cejas en modo de pregunta - Es que... es difícil adivinar lo que pasa por esa astuta cabecita malvada, ya lo sabes. Estoy preocupado por Abie y por Niall. No quiero que se vuelvan a separar.
-¿Y ella porque tendría que influir en la relación de esos dos?
-No sé, es un presentimiento.
La chica sacude la cabeza incrédula e insegura, cree que Ilenia no puede causar ningún mal en torno al rubiales y a la morenita.
Es ya costumbre en Harry y Cynthia el beber un vaso de leche con galletas por la noche. Lo llaman 'la sopita nocturna'.
Pero seguramente esto de que vivan juntos tendrá que acabar pronto; los padres de la chica no están muy de acuerdo, y la hermana de Cynthia se ha vuelto a poner mal, muy mal.
Ella no quiere entrar en la Universidad, pero sus padres la obligan, y como no ha aprobado el examen de selectividad, tiene que estar un curso asistiendo solo a las clases de las materias suspendidas.
Por otro lado, Aly si ha entrado, y ya está asistiendo, desde hace un trimestre o así. Y Abie ha dejado por completo los estudios,pero a lo mejor no para siempre.

Acosos de las fans locas que no aceptan las relaciones que los chicos tienen.  Los insultos y amenazas, hacen que este grupo británico-irlandés, se separe un poco. Pero no entre ellos, sino entre el mundo y ellos.
Ya no se dejan ver por fiestas ni galas insignificantes. Solo algún que otro concierto y algunas firmas de discos.
Pero esta racha tiene que acabar, y acabar ya. Están perdiendo fama, no lo pueden permitir; una nueva gira para el próximo año, que dentro de unos días empezará, y que tienen que realizar; nuevos productos que necesitan tener fotos pegadas o impresas, lo que significa muchas sesiones de fotos y tonterías que hacer.
Las entrevistas y entrevistadores, cada vez se meten más en sus vidas privadas, y los chicos no quieren dar muchos detalles de lo sucedido en España o lo de las madres de Abie y Aly y la gran historia que carga esas muertes. Esos misterios que quedan al aire, como cabos sueltos en una caja llena de cuerdas: grandes y largas cuerdas trenzadas, con es color marrón que te recuerda al plato de lenteja que tu madre siempre te pone delante y que alguna vez, seguro, has rechazado solo por su aspecto. Así son esos problemas, misterios, o de la manera a la que se le puede llamar a estas cosas: son de un aspecto raro, desagradable, y que pueden gustar o  no gustar, a veces incluso, para algunas personas, saben o sientan igual de mal que el físico que tienen, asqueroso y amargo.
Y una nueva cuestión atraviesa los pensamientos de los chicos de One Direction, o por lo menos a través de ellos: ¿Sus padres que piensan sobre sus actuales novias?

-¿Alguien me sabe responder a esta pregunta?¿Jennifer?-el profesor da un golpe con el cuaderno en la mesa de la muchacha, que está medio dormida, por ser primera hora de clase.
-¿Eh?¿Qué?
-Está usted castigada hoy en el recreo, por no prestar atención en mi hora. Y luego me viene su madre quejando de que suspende sin razón.
Jennifer da un suspiro en modo de queja, pero de indignación. No la apetece nada en absoluto perderse una preciada media hora, en la que podría perfectamente estar leyendo en la biblioteca, el libro que sus padres no pueden permitirse comprarle.
Ella siempre ha sido una chica reservada, tímida y no muy sociable, que se diga. Pero cuando alguien entra en conversación con ella, cambia: se vuelve habladora, muy abierta y desde luego graciosa,  y ese aspecto agradable le da bonus a la puntuación que los chicos y chicas suelen poner a la gente, sobre todo a gente como ella.
¿El aspecto? A sí, ese pelo castaño y onculado, con los ojos marrones, pero de un marrón precioso. Con su piel blanca y con la carita fina y limpia. Unos labios redondeados perfectamente, y un cuerpo delagdo que nunca exhibe, pero se nota que es hermoso.

Con un solo movimiento de mano, Ilenia consigue lo que quiere, y desde luego no dudará en hacer y conseguir lo que tiene pensado, y se propone a ella misma. Es como si fuera un reto, el reto de su vida. 
Parece ser, que lo único que la mantiene con vida, son esas ganas de destruir cosas para obtener lo que desea, y a veces solo por capricho y no por necesidad.
Como sus padres son ricos, mucho, siempre ha tenido todo a pedir de boca, sin esforzarse en nada, incluso los exámenes eran pagados para que aprobase con muy buena nota.
Esta vez, lo que quiere conseguir, va a tener mérito por parte de ella, ya que se está esforzando mucho para llevarlo acabo sin que nadie se de cuenta y que ni siquiera sospechen de que pueda ser ella.
Simplemente quiere destrozar todo lo que la molesta e incordia, y desaparecer.  Pero desaparecer en un mundo desierto, sola y sin ninguna compañía, menos el de una persona, la persona que ya ha hecho o dado el primer paso en el plan, y desde luego es algo irremediable y que si no continúan con ello, les pillarán.
Esa persona que ha dado el principio de la peor pesadilla que ese grupo de amigas que con sus nuevos novios sufrirán, es alguien cercano a uno o una de ellos, y causará un profundo dolor y desde luego desesperación, llantos, gritos, noches en vela y días acurrucada en una esquina sin comer ni beber, deseando con todas sus fuerzas morir ya, y que nada de esto les afecte más, y sobre todo, renunciando a lo único que la hace feliz en este mundo rencoroso y sin piedad: su amor verdadero.